Las autoridades colombianas ya han capturado a tres sujetos, que tendrían en su poder armas, panfletos y gasolina que los vinculan a la quema de taxis. Los irregulares planifican los ataques en la línea limítrofe con el estado Zulia, específicamente en El Catatumbo.
San Cristóbal. En Cúcuta la violencia no cesa. La capital del Norte de Santander sufre los embates de la delincuencia en todas sus modalidades. Una de ellas, es la quema de taxis en Cúcuta. La retaliación proviene del Frente 33 de las FARC, al mando de alias Jhon Mechas, que estarían exigiendo cuotas elevadas a los trabajadores del volante por dejarlos laborar en la frontera.
Si bien la presión se le hace a la directiva de las 15 líneas de taxis de Cúcuta que se ha visto en la obligación de ir hasta el municipio Tibú, en El Catatumbo, frontera con el estado Zulia, la orden va para todos los que laboran en Cúcuta.
La “cuota de guerra” como le llaman, ronda los cinco millones de pesos colombianos, es decir, más de 1300 dólares mensuales, lo que aseguran es un monto muy elevado, razón por la cual los presidentes de líneas huyen el encuentro con los irregulares y se niegan a pagar, por lo que ya, desde la semana pasada iniciaron las retaliaciones y pases de factura, con la quema de unidades.
El modus operandi de estos malhechores es que, con gasolina y pistolas en mano, obligan al conductor a bajarse del carro y proceden a prender fuego a los vehículos.
A pesar de que no se habían registrado ataques en contra de los choferes, este fin de semana se registró uno. El conductor se negó a pagar la cuota y en venganza pretendieron quemarlo vivo. El hombre sobrevivió, pero tiene quemaduras de tercer grado en gran parte de su humanidad.
Para este martes 17 de mayo, la cifra de taxis quemados se elevó a once y un taxista que estaba desaparecido, presuntamente fue hallado carbonizado. Aunque no se ha logrado identificar, es muy probable que se trate de Jhon Méndez.
Juan Carlos Bastos, presidente de la Asociación de Taxistas del Norte de Santander, indicó que esperan que las autoridades avancen en las investigaciones, pues están en contra de la pared, ya que es una lotería diaria la que juegan con el accionar de estos irregulares.
Bastos recalcó que en peligro hay 4845 unidades de taxi en Cúcuta.
“Ellos, los conductores saben cuál es el proceder con personas sospechosas, si van a un lugar peligroso. Acá vigilamos las 24 horas del día”, añadió.
Capturados
Por su parte, el jefe de la seccional de la Fiscalía del Norte de Santander, Daniel Tapias, informó que se logró la captura de tres sujetos, luego de varios allanamientos. Al momento de la detención a estas personas se les incautaron armas de fuego, explosivos y gasolina.
Del mismo modo, Alejandro Martínez, secretario de seguridad de Cúcuta, informó que todo el Comité de Orden Público se mantiene abocado a desmantelar la red de extorsionadores que estarían atentando en contra de los taxistas.
“Todo apunta a que son los del grupo 33 de la zona en el Catatumbo. Ya hay cinco detenidos. Dos hace mes y medio, y tres recientemente”.
El más reciente
Medios colombianos confirmaron el hallazgo de un vehículo cuyas características pueden corresponder a uno reportado. Debajo de los amasijos de metal se hallaron restos óseos de un hombre carbonizado.
La dantesca escena se registró en la zona fronteriza de Patillales, en la vía que conduce a Puerto Santander que colinda con Boca de Grita, municipio García de Hevia en el Táchira.
Por ahora, las autoridades comparan los restos con muestras biológicas de un taxista desaparecido.
Desde febrero
El director de la Policía Metropolitana de Cúcuta, Óscar Moreno, indicó que desde febrero se vienen registrando estos ataques a los taxistas cucuteños y que los tres detenidos pertenecen al Frente 33.
“Se puede establecer que estos son los responsables de quemar los taxis y de repartir panfletos en Cúcuta”.
Enconchados en la frontera
Aunque no se ha confirmado la presencia del Frente 33 en Cúcuta, en la frontera con el estado Zulia, específicamente en El Catatumbo, si tienen vida. Desde allí planifican los golpes que dan en la capital nortesantandereana.
Al grupo de alias Jhon Mechas se le acusa de ser los responsables del ataque a la Brigada 30 del Ejército Nacional de Colombia en Cúcuta en junio del año pasado y en la que varios soldados resultaron heridos.
De acuerdo con un artículo publicado en Infobae, este sujeto se ha aliado con otros disidentes y formaron una célula que tiene injerencia en la frontera con Venezuela y en el Norte de Santander.
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