La película protagonizada por Angelina Jolie tiene un mensaje de entendimiento y encuentro, pero no se arriesga a tocar otros temas. Su existencia no es bien justificada en su desarrollo.

Caracas. La segunda entrega de Maléfica: dueña del mal presenta una historia leudante para dar continuidad a la trama de 2014 sobre un hada vista como malvada, pero que en realidad muestra verdaderos sentimientos y protección hacia una joven princesa.

En esta ocasión Maléfica, interpretada por Angelina Jolie, recibe una noticia que la incomoda. No se niega a la decisión tomada por Aurora, pues para ella quiere lo mejor, pero esta realidad le exigirá cumplir  protocolos que serán contraproducentes. Sabe muy bien que no es querida ni en el pueblo y mucho menos en el palacio, donde el temor hacia lo que ella supuestamente representa predomina entre las personas con quien deberá convivir.

El Príncipe Phillip le propone matrimonio a Aurora, quien, encantada, acepta. Este es el punto de partida para un mensaje a favor de la aceptación de las diferencias.

Pero el plan para que ambos personajes se unan se convierte en una hecatombe propicia para la traición, los juicios injustos y el enfrentamiento.

Es una historia familiar, especialmente dirigida a los niños, que en su segundo acto muestra el conflicto surgido entre el mundo de los humanos y las hadas, debido a un lúgubre plan para generar la guerra y así dominar ese otro mundo desconocido y misterioso: el de las extrañas criaturas. El plan incluso tambalea la confianza entre Maléfica y Aurora, en quienes surgen las dudas y las acusaciones mutuas.

Maléfica: dueña del mal responde a un contexto en el que las noticias advierten sobre casos de xenofobia, racismo e intolerancia. Su mensaje obviamente no es producto del azar. Va encaminado a vencer prejuicios y promover el entendimiento.

Si bien es loable la intención, el largometraje no tiene más asidero en su desarrollo, pues luce forzado en la justificación de su existencia. Es una película que no aporta más allá desde el punto de vista argumental. Porque además es complaciente y no toma mayores riesgos, especialmente cuando amaga con tratar el tema de la muerte, un asunto que Disney ha trabajado muy bien en filmes como Bambi y El Rey León, pero se arrepiente con una resolución poco convincente y populista. Tal desenlace se entiende –aunque no se justifica– si el objetivo es llevar a la pantalla más historias sobre este personaje, donde se encuentra el principal atractivo de la trama desde su primera entrega.

De resto, sería un simple cuento sobre dos reinos que buscan coexistir sin una verdadera amenaza que superar o temer. Aunque pareciera que las deudas quedaron saldadas en esta entrega, dirigida por Joachim Rønning, quien estuvo a cargo también de filmes como Kon-Tiki (2012) y Piratas del Caribe: La venganza de Salazar (2017).

Entonces, si hay una intención de presentar situaciones que pueden servir de paralelismo con conflictos actuales, hay una minimización de otros y soluciones que pueden resultar risibles para aquellos que no evitarán hacer comparaciones con otras obras mejor logradas.

En esta segunda parte, también cobran protagonismo personajes cuya existencia tampoco es justificada vehementemente, y su paso frente a la pantalla deja más preguntas que respuestas. Meras piezas para tratar de insuflar a la cinta.

Si bien Maléfica: dueña del mal superó a Joker en su primer fin de semana en la cartelera estadounidense, la secuela no recaudó los 45 millones de dólares esperados en esos tres días. Sumó 36 millones de dólares en ese período, muy por debajo además a los 69 millones de dólares que obtuvo la primera en 2014. Claro, también vale decir que la anterior se proyectó en 3.948 cines, mientras que la actual en 3.790

Los datos han hecho que algunos expertos se pregunten sobre el poder de convocatoria de Angelina Jolie, a quien no se ha visto mucho en la gran pantalla desde 2014. Su perfil en IMDB indica que apenas ha estado en el largometraje By the Sea, que ella dirigió y protagonizó, además de ser la voz de Tigresa en Kung Fu Panda 3.

Vea aquí el tráiler de Maléfica: dueña del mal.


Participa en la conversación