Marabinos se las ingenian para llevar a su casa aunque sea un botellón de agua

Los constantes apagones dejan sin agua a la capital del estado Zulia. Los vecinos son capaces hasta de proponer “secuestrar” un camión cisterna para llevar agua a sus casas.

Maracaibo. La desesperación aumenta cada día en los hogares marabinos. La falta de agua potable es una de las principales necesidades de los zulianos que deben hacer malabares para conseguirla, mientras que Hidrolago sigue culpando a las fluctuaciones eléctricas de las fallas en el bombeo. Califican la situación de “imposible” de sostener cuando en la región se registran más de 10 subidas y caídas del voltaje al día.

Este lunes los trabajadores de la hidrológica zuliana vivieron lo que ya se ha vuelto cotidiano, según relató Rafael (nombre ficticio por temor a represalias de la empresa).

Los equipos no van a arrancar mientras tengamos tantas fallas de electricidad. Es difícil porque la mayoría están dañados, Planta C y Tulé están seriamente afectadas, y así es imposible mandar agua a las comunidades. El problema es el alto voltaje, cuando se dispara se queman fusibles, motores, cajeras, como pasó este lunes. Esto parecía Navidad con tanta chispa”.

En el caso específico de La Planta Alonso de Ojeda, el trabajador reveló que aunque tienen todos los implementos técnicos para enviar agua, “el problema es la electricidad que no está estable”.

Tulé cuenta con una subestación eléctrica; sin embargo, se conoció que “hay una cola en el sistema, es decir que si en Maracaibo se refleja una variación eléctrica, en Tulé se refleja con mucha más intensidad por ser la cola del sistema”.

En todo caso la peor parte se la lleva la comunidad. Los marabinos pasaron “el peor Carnaval de la historia”, como lo comentó Rogelio Urdaneta, vecino de La Pomona. “Tenemos las pipas aquí en la avenida porque hay camiones vendiendo agua por ahí, al que pase lo secuestramos y nos tiene que echar agua obligado. Sabemos que no está bien, pero ¡vértale, hasta cuándo vamos a estar así! Yo tengo seis días sin bañarme”.

Otros buscan opciones menos violentas, como los habitantes de Altos de la Vanega, que se aprovechan de un tanque que hay en las inmediaciones del Metro de Maracaibo. “Yo me meto porque sé nadar, y así voy sacando de balde en balde para mi casa”, dijo Ernesto Ruiz.

En la Circunvalación 2 el escenario no es diferente. Las colas son interminables, para lograr así sea un botellón de agua, con el que Milagros, una vecina le hace honor a su nombre.

“Con un botellón hago el almuerzo, medio lavo los platos y baño a mis dos niños, ya mañana me baño yo, si alcanza. Todos los días vengo porque ya tenemos 27 días sin agua”.

Una pipa (recipiente grande) de agua vale entre 2.000 y 2.500 bolívares en efectivo en Maracaibo. Sin embargo, ante la escasez de papel moneda muchos prefieren tostarse la piel haciendo cola en cualquier tubería de la ciudad.


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