Nancy Mendoza, mamá de la pequeña, la rescató dos horas después y la llevó al CDI del sector La Jota, donde le dijeron que se encontraba bien de salud. Sin embargo, una semana después empeoró y falleció el pasado sábado.

Caracas. Nancy Mendoza preparaba el tetero de su bebita mientras lloviznaba, cuando escuchó un gran ruido. Era un talud de tierra que había cedido y caído en su cuarto, tapiando a su hija de tres meses de nacida.

Era la 1:00 a. m. del viernes 2 de diciembre. Desesperada, comenzó a gritar y a intentar sacar todos los sedimentos que estaban sobre la niña, pero eran muchos. La escuchaba quejarse y eso la motivaba a apurarse para poder salvarla. Sus familiares acudieron a ayudarla junto con varios vecinos que escucharon el alboroto, logrando rescatar a la pequeña a las 3:00 a. m.

“Cuando la sacamos tenía toda la boca full de tierra y mi sobrina le metió los dedos para sacársela”, contó la mujer, mostrando con su dedo índice la manera en que extraían tierra de la boca de la menor.

Ya estaba morada y luego de pedir la cola a un vecino —que pasaba por el sector con su carro— la llevó al Centro de Diagnóstico Integral (CDI) del sector La Jota, ahí en La Vega. Aunque no le hicieron exámenes, la revisaron y le dijeron a la madre que la niña estaba bien.

“Yo me quedé tranquila en ese momento porque los médicos del CDI me dijeron que ella estaba bien”, dijo.

 

Sin embargo, en el transcurso de la semana anterior, los labios de la bebé comenzaron a pelarse internamente, lo que preocupó a Nancy. Los síntomas empeoraron este sábado 10 de diciembre, con fiebre y diarrea, y la pequeña fue trasladada de emergencia a un centro de salud. “Cuando la llevamos al Elías Toro mi hija murió. Ya estaba como apagadita, yo le decía a mi mamá que notaba rara a la niña, estaba hasta ronca porque lloraba raro”, comentó.

En el accidente falleció instantáneamente una amiga de Nancy, Yibernut Revette, de 24 años, quien tenía días durmiendo ahí. Su hija, de dos meses, se encuentra grave de salud. También quedo tapiada otra vivienda pero sin víctimas.

“Mi amiga tenía dos hijos, uno de cinco años y la bebé que está grave, de dos meses. Se estaba quedando en mi casa y al momento del derrumbe estaban en mi cuarto”, explicó.

Nancy tenía 27 años viviendo en el sector Las Torres y aunque sabía que vivía en un lugar de alto riesgo no tenía a dónde ir. Sostuvo que hace tres días hubo otro deslizamiento y teme por la vida de sus familiares que siguen en el barrio.

Por el momento, se está quedando en un refugio de La Yaguara, junto con sus tres hijos varones, de 11, nueve y ocho años. “Le pido a los bomberos que vayan a ver esa zona, por el bien de todas las personas que viven ahí y corren peligro”, expresó.

Foto: Yohana Marra


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