Algunos no estaban enterados de la convocatoria de la Asamblea Nacional y la sociedad civil. Curiosos, se acercaron a preguntar, convencidos, estamparon su firma y depositaron su voto en la caja. En los municipios Chacao, Sucre y Baruta la jornada transcurrió con normalidad.

Caracas. “¿Esto de qué es?”, pregunta Kelly mientras mira el toldo, las mesas y papeletas. Alguien le responde que se trata de la Consulta Popular y le extiende un papel con las tres preguntas y un bolígrafo. Kelly lo recibe extrañada y repregunta: “¿Es del gobierno?”.

Le explican que es una convocatoria de la Asamblea Nacional y la sociedad civil que adversa a Nicolás Maduro que comenzó el 7 de diciembre. Kelly ya no luce con ceño fruncido. Con un brazo sostiene a su bebé y con el otro intenta enderezar la hoja para leer las preguntas. Sombrea el recuadro dos y tres, dice que el primero lo dejó en blanco porque no lo entiende. Se lo leen en voz alta: “¿Exige usted el cese de la usurpación de la presidencia de parte de Nicolás Maduro y convoca la realización de elecciones presidenciales y parlamentarias libres, justas y verificables?”. “Ahhhhhhh, ponga que sí”, responde Kelly. 

Kelly mete su voto en la caja y sale con paso apurado. Va a comprar unos tequeños para vender en su casa, con eso se ha rebuscado en los últimos meses. Ella es ama de casa y necesita ayudar a su esposo con los gastos del hogar. Este Centro de Participación, ubicado en la parte alta de Palo Verde en el municipio Sucre, a la 1:00 p. m. había recibido a un poco más de 400 personas. 

Kelly participa en la consulta popular en Palo Verde. Foto: Tairy Gamboa

“Vaaaamoooos, vaaaaamooos, vaaaamooos, bien”, canta Reina Rodríguez, coordinadora electoral del centro de Palo Verde. El sonido compite con un “aaaa la oorden” de un puesto de frutas y hortalizas que está a centímetros del lugar. Reina se mueve de un lado a otro, al ritmo de lo que canta, también dice que si tiene que firmar en una hoja de topocho contra Nicolás Maduro, lo hará: “Esto no es por Guaidó, es en rechazo a la miseria, es por mi familia”.

En el teléfono de Alba Romero, de 58 años de edad, no se hizo viral la Consulta Popular. “Vi que la semana pasada hicieron las elecciones de diputados, pero no sabía que venía la contra, la de nosotros”, dice. El 6 de diciembre se hicieron las elecciones parlamentarias en las que hubo casi 70 % de abstención, un proceso que fue desconocido por el Grupo de Lima, la Unión Europea, el Grupo de Contacto Internacional, Estados Unidos, Letonia, Reino Unido, República Checa, Uruguay y Noruega.

consulta
Centro de Participación Palo Verde. Foto: Tairy Gamboa

Alba en la tarde salió a caminar por la plaza Los Palos Grandes: “No sabía de la Consulta Popular, por casualidad iba pasando y voté. Todo lo que sea por hacer el bien”. Mientras que guarda su cédula y, algo apenada por no estar enterada, asegura que respondió “sí, sí, sí”. 

Este centro es uno de los cinco puntos dispuestos en el municipio Chacao. Contó con cuatro mesas, pasadas las 2:00 p. m. tenía una participación de casi 400 personas, aseguró Óscar González, coordinador del centro. El apoyo de la sociedad civil y la empresa civil fue importante para la logística de hidratación y refrigerios. 

consulta
Foto: Tairy Gamboa

A María Azota, de 60 años de edad, mientras trabajaba en sus kiosko a escasos metros de la plaza Bolívar de Chacao un hombre le preguntó si no había visto a Juan Guaidó, quien estaba ahí en la plaza. “Ni sabía”, dijo. María desconocía sobre la consulta: “Siempre hay eventos en la plaza, no me extrañó nada hoy”. Aunque luego se enteró del proceso, siente indiferencia por todo lo suceda en la política. 

Lo que sí sabe María, “lo escuché, no me lo dijeron”, advierte, fue lo que dijo Diosdado Cabello el 30 de noviembre. “Él dijo ‘el que no vota, no come’. Después salió Mario Silva a desmentir. Yo sí no me comí ese cuento. Porque no solo del pan vive el hombre. ¿Qué pasó con el agua, la luz, los medicamentos?”.

Centro de Participación plaza Los Palos Grandes. Foto: Tairy Gamboa
Foto: Tairy Gamboa

Participa en la conversación