Humberto Prado, director del Observatorio Venezolano de Prisiones, informó que 1016 reos iniciaron huelga de hambre, mientras que en otros centros penitenciarios se registraron casos de desnutrición por escasez de comida.
Caracas. Según cifras del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), durante enero registraron 13 presos muertos dentro de penales venezolanos, mientras que otros 50 se fugaron de diferentes instalaciones.
Félix Guzmán, de 23 años, y Miguel Antonio Lanz, de 21, fueron asesinados el 5 de enero durante una riña en el Centro de Coordinación Policial Guaiparo, en el estado Bolívar. Guzmán recibió varias puñaladas en el cuerpo, mientras que Lanz fue golpeado hasta morir.
El mismo día, el OVP reportó la muerte de Carlos Eduardo Patiño en el Internado Judicial de Vista Hermosa, estado Bolívar. Su cadáver fue ingresado a la morgue del Hospital Universitario Ruiz y Páez, con múltiples quemaduras en el cuerpo.
Por otro lado, en los calabozos de la Policía Municipal de Barinas se generó una revuelta en la que murieron dos presos, presuntamente ahorcados por otros reos. Los cadáveres fueron encontrados cuando guindaban de mecates amarrados a las vigas de los calabozos.
En el balance presentado por la organización, también se indicó que entre el 24 y 25 de enero, cinco presos fueron asesinados en el estado Anzoátegui.
En el primer hecho, Aldo José González fue encontrado muerto por funcionarios de la Policía Municipal Bolivariana de Sotillo con hematomas en sus brazos y cuello. Al tiempo que Jesús Raúl Rodríguez Idrogo, de 27, Francisco Augusto Moreno, de 18, y Morely Alí Solva fueron asesinados durante una riña entre bandas en el Centro de Coordinación Policial en El Tigre. En el hecho, otros cinco reos resultaron heridos.
El resto de asesinatos ocurrieron durante enfrentamientos con funcionarios policiales en los estados Portuguesa y Anzoátegui.
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El director del OVP, Humberto Prado, señaló que en enero de este año, 1016 presos iniciaron huelga de hambre en protesta a la constante violación de sus derechos humanos por parte de las autoridades dentro de los centros penitenciarios.
Este es el caso de un grupo de 16 detenidos en los calabozos de la comandancia General, en Guanare, quienes iniciaron la huelga el 20 de enero, pues presuntamente en el penal no les dan alimentos, mientras que a sus familiares se les dificulta llevarles la comida a diario. El balance de la organización también reportó casos de desnutrición severa en el penal.
Otros 1000 presos de la cárcel de El Rodeo, estado Miranda, se declararon en huelga el 23 de enero para denunciar las arbitrariedades por parte de funcionarios de la cárcel, como la restricción de visitas y escasez de alimento.
Entre las fugas de reos se registraron seis en la Policía Municipal de San Joaquín, estado Carabobo; 12 en la sede de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) de San Cristóbal y uno de alta peligrosidad en la Comunidad Penitenciaria Fénix, estado Lara.
Foto referencial: Luis Miguel Cáceres
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