El tomate es el rubro que sufrió los mayores incrementos, pasando de 3100 a 10.000 bolívares en cuestión de días.
Caracas. “Me parece espantoso como todo sube a cada rato, para diciembre vamos a estar pagando 50.000 bolívares por un kilito de cebollas así como van las cosas hasta los mismos vendedores deben estar cansados de ver subir los precios”, contó Mariana Monsalve enfermera que reside en Agua Salud y quien aseveró que “en esta economía no hay nadie que gane”.
Como ya se ha vuelto usual en Venezuela, cada mes los precios de los alimentos sufren constantes incrementos que afectan el tan mermado poder adquisitivo de los trabajadores. En un recorrido realizado por Crónica Uno en mercados municipales y supermercados se evidenció que los costos de algunos rubros se duplicaron, y en algunos casos, hasta se triplicaron en cuestión de semanas.
De todos los productos, los que menos sufrieron incrementos fueron el pimentón y el plátano, que tan solo subieron 16 % y 14 % respectivamente, de 6.000 a 7.000 para los pimentones y de 2.100 a 2.400 para los plátanos.
Pero hubo alimentos que subieron más de 220 %, como en el caso del tomate, cuyo precio saltó de 3.100 bolívares a 10.000 por kilo en un mes. La papa pasó de 2.700 a 6.000 bolívares, siendo el aumento 120 %. Las zanahorias estaban en 6.100 ahora se encuentran en 10.000 bolívares, 67 % más en cuatro semanas.
El kilo de yuca -uno de los alimentos que más se está consumido- saltó de 1.800 a 4.000 bolívares, con lo cual el aumento también fue de 120 %.
“Estoy seguro que el síntoma más común en los venezolanos es la fatiga, y todo debido a la mala alimentación, porque te aseguro que la gente ya no consume las raciones recomendadas para mantenerse saludable, la gente ahora solo compra lo exacto para aliñar las comidas y hacer una que otra ensaladita . En mi caso, a las 2 o 3 de la tarde dejo de rendir en el trabajo, me siento sin fuerza y sin ánimos, y es justamente por la mala alimentación”, relató Carlos Villarroel, empleado en una tienda de ropa.
En junio los productos agrícolas denunciaron que la cosecha de hortalizas tenía limitaciones. En la región andina y otras entidades apenas se había sembrado 25 % de la superficie, por tanto, hay una caída de 75 %. En estados como Guárico y Aragua la siembra bajó 90 %.
Los agricultores detallaron que desde hace más de un año no ingresan al país semillas para hortalizas y desde hace seis meses los horticultores no han adquirido sacos de fertilizantes.
El dinero estimado que una familia de cuatro integrantes debe gastar de forma mensual para lograr suplir medianamente los requerimientos diarios de vegetales, verduras y frutas se calcula entre 250.000 a 300.000 bolívares, considerando que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que cada persona debe consumir cerca de 400 gramos de estos alimentos diariamente, pero las cantidades de alimentos consumidos por los venezolanos dista de ser suficiente.
Foto referencial: Cristian Hernández.
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