El presidente del Poder Electoral afirmó que se comunicó con el Plan República para garantizar que en los estados Aragua, Apure y Táchira, en los que operan grupos delincuenciales y la guerrilla, los candidatos puedan hacer recorridos sin limitaciones.
Explicó que la presencia de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea generó tensiones tanto en sectores del Gobierno como en la oposición, al tiempo que garantizó que en esta elección no habrá puntos rojos ni de otros partidos en las adyacencias de los centros de votación.
Caracas. Pedro Calzadilla es historiador egresado de la Universidad Central de Venezuela y profesor de la Escuela de Historia. Su cátedra es Historia de Américas y su línea de investigación ha sido siempre la historia de Venezuela y, en particular, la del S. XIX vinculada a la construcción de la identidad. Por su trayectoria académica, él fue el primer sorprendido cuando fue nombrado rector y presidente del Consejo Nacional Electoral. “No me lo esperaba”, asegura.
Sin embargo, la política lo ha acompañado toda su vida. Su padre fue un antiguo militante del Partido Comunista de Venezuela; el rector también militó en la juventud del PCV y luego en el partido hasta 1983. Es un apasionado de la lectura y la poesía. Su poeta preferido es Ramón Palomares, y está leyendo un libro de Luis Britto García sobre Bolívar y su pensamiento económico.
Calzadilla es de verbo fácil y trato afable, habla sin rodeos sobre las dificultades que enfrenta en su posición de árbitro y la coyuntura del país signada por la polarización y la desconfianza. No le rehúye a ningún tema ni situación que se le presente.
“Entendí que por mi trayectoria y mi personalidad podría contribuir con el país y que debía conducir el organismo en un momento muy sensible; era necesario generar confianza y espacios de encuentro. No me ha costado porque soy una persona con capacidad de oír y aceptar la diferencia. La diversidad de posiciones no me es incómoda”, afirmó.
Consciente de que el voto y el CNE como institución han perdido credibilidad, resaltó que todos los rectores están trabajando de manera unida. “Todas las decisiones que hemos tomado en el Consejo han sido por unanimidad, esto no es un dato menor, es un mensaje al país. Es posible que personas con diversas tendencias puedan administrar un proceso tan complejo como el que está en marcha”.
A una semana de la realización de las elecciones de gobernadores, alcaldes y consejos legislativos el próximo domingo 21 de noviembre, el titular del ente comicial se compromete a garantizar que los candidatos de los estados Aragua, Apure y Táchira, puedan recorrer de palmo a palmo sus entidades, pues los abanderados a la gobernación han denunciado públicamente que se han visto impedidos de hacerlo por bandas delincuenciales, presencia de la guerrilla y zonas en la frontera controladas por la oposición. “Hablé con el Plan República para garantizar que todos los candidatos puedan desarrollar sus actividades con normalidad”.
¿Cómo ha sido para usted el salto como profesional, como historiador, de pasar del Ministerio de Educación y Cultura a un organismo técnico-político como lo es el Consejo Nacional Electoral?
Bueno, mi trayectoria profesional es académica, pero la actividad política ha sido una pasión desde mi familia. Entendí que quizá por mi trayectoria, podía contribuir a hacer una tarea para el país, que entiendo que es temporal porque no es mi campo. Pero lo asumí con toda la responsabilidad y la pasión con la que asumo las cosas que tienen que ver con mi país. Lo asumí como una tarea patriótica. Por supuesto, todos tenemos nuestras preferencias políticas e ideológicas.
Ya que usted lleva unos meses al frente del CNE, y estamos a una semana de las elecciones de gobernadores y alcaldes, quisiera como una suerte de balance y me dijera cuál cree usted han sido las acciones que ha tomado el CNE para recuperar la credibilidad del voto. ¿Qué acciones impulsó para que la ciudadanía vuelva a confiar en esta institución?
—Fíjate, ha pasado un poco más de seis meses desde que asumimos la responsabilidad en mayo cuando fuimos designados rectores por la Asamblea Nacional. Como cuerpo, como Consejo —y aquí incluyo tanto a los cinco principales como a los tres suplentes incorporados— hemos enviado un mensaje al país muy nítido, muy claro, en el sentido de que estamos trabajando de forma unida, estructurada y coherente, todos los rectores.
Puedo decir que las decisiones que han sido tomadas por el Consejo, han sido por unanimidad, no puede ser un dato menor en cualquier institución, cuerpo político, administrativo, técnico. Menos el CNE que es un ente que administra una instancia de la política muy importante, pero eso sabemos que es porque el Consejo está compuesto por personas que tienen intereses, afiliaciones, y orígenes políticos distintos y entonces, yo tuve claro desde el principio que más que declaraciones, había que hablar de hechos.
Hay una cosa importante para explicar y entender esto, es que este CNE nació de un proceso de diálogo y entendimiento y sigue en coherencia con ese proceso. Luego, una de las cosas que hemos hecho como decisión, que va dirigida a ganar voluntades y los espíritus de quienes todavía pudieran estar todavía dudosos, pudieran ampliar como garantía también la participación de observadores, acompañantes, como los queramos llamar. Son los que están en Venezuela, de distintas organizaciones, de diversos orígenes que están nuevamente con nosotros. Algunos tenían 15 años sin venir, por ejemplo, la Unión Europea, la invitamos a la semana de haberla asumido, una vez que hicimos la convocatoria a las elecciones, inmediatamente le cursamos la invitación y hemos tenido que ganar la confianza de aquellos que celebran la venida y aquellos que les incomoda la venida de la Unión Europea y esa misión de observación en Venezuela que te digo de los dos bandos o de todos los bandos o de todas las tendencias políticas porque hay desconfianza.
¿Me está hablando del diálogo en México?
—El de México y el anterior. En este año 2021 es que esos resultados se empiezan a ver, concretar. A pesar de la pausa que hay actualmente en el diálogo en México, es un proceso largo, a mediano plazo, y hay quienes se desesperan. Siempre invito a que hay que tener que pensar que los procesos sociales e históricos llevan ritmo, que no son los ritmos con las expectativas que a veces pudiera tener algún actor. Es posible que estemos sentados diversos conduciendo de manera coherente, equilibrada un proceso tan complejo como las elecciones que están ahorita. Adicionalmente, hemos tomado algunas decisiones, como te digo, van en sintonía con los grandes esfuerzos de negociación y diálogo, y de encuentro de todos los actores políticos del país en relación con algunas cosas concretas, como las auditorías.
Sí, son 16 en total a todo el sistema, ¿no?
—Sí, pero hicimos una que es completamente nueva, que tiene un valor adicional a las que hemos hecho hasta ahora, que se llama Auditoría Integral al Sistema Automatizado en la que participaron 10 académicos seleccionados por unanimidad por el CNE. Todos fueron postulados, designados, aprobados por los cinco rectores principales y la rectora. Ellos trabajaron durante 45 días, nunca se había hecho eso, estuvieron escrutando los distintos componentes de nuestro sistema automatizado (el software, el hardware y el movimiento de los datos), y el resultado fue muy pero muy bueno. Los 10, por unanimidad, hicieron un informe que no deja duda. Esto es una cosa positiva, importante. Quizás pueda alguien decir: “Bueno, pero eso ya se hace porque ya se hacían 16 auditorías”. Sí, pero en las otras auditorías participan los partidos políticos, los técnicos de los partidos. Y uno puede decir: “Bueno, pero son los mismos de siempre y tal”, no son los mismos de siempre, fueron otros de nuestras mejores universidades. Creo que eso tiene un valor adicional que a lo mejor un amplio sector de la población no lo haya captado, pero sí fue un tema valorado, y valorado en el exterior.
¿En total, cuántos observadores internacionales más las individualidades vendrán el domingo?
Alrededor de trescientos, incluyendo unas cien personas que vienen acreditadas por la Unión Europea y entre ellos y el panel de expertos de Naciones Unidas, el grupo de expertos del Centro Carter, el Observatorio de Asuntos Políticos del Parlasur (Parlamento de la Alianza del Mercosur), una Asociación de Juristas de Estados Unidos. Son alrededor de doce grupos”.
¿Qué opina usted de las declaraciones que ha dado el jefe del comando de campaña del chavismo, Diosdado Cabello, sobre que hay que desconfiar desde ya de la Misión de Observación electoral de la Unión Europea y que ellos ya tienen listo el informe? ¿Qué llamado le hace usted?
—El gran esfuerzo que hemos hecho es por generar confianza en todos los sectores políticos, en que avancemos. Sabemos que en Venezuela hay una politización muy fuerte de la vida nacional y que cualquier cosa que uno hace, inmediatamente recibe reacciones encontradas. Parte del esfuerzo que hemos hecho es tratar de equilibrar las voluntades alrededor de un propósito. Uno de los temas sensibles es la observación internacional.
Hay un sector de la derecha extrema internacional que le parece un escándalo que venga la Unión Europea a Venezuela, porque le parece que ellos al venir aquí están acreditando a la tiranía de Nicolás Maduro. Esa es una posición que tiene expresión en Venezuela. Nosotros hemos hecho un esfuerzo porque esa posición se vaya sin que eso signifique una traición a las cosas fundamentales que deben sostener a una República.
Igual del otro lado, hay opiniones donde ven amenazas en la presencia de organismos internacionales en Venezuela, argumentando las cosas que sabemos. Lo que quiero traer a colación es que hay una atmósfera que pudiera ser propicia para un rechazo.
¿Qué nos ocurrió a los cuatro días de haber firmado el acuerdo administrativo? Que el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Internacionales y de Seguridad, Josep Borrell, dispara unas declaraciones que pusieron en riesgo todo lo que habíamos hecho hasta ese momento. Habíamos pasado como tres meses negociando el acuerdo, realmente un trabajo de filigrana para construir y allí se crea la emergencia. Las declaraciones de Borrell decían que la misión de observación electoral de la Unión Europea venía a apoyar a un sector político y venía a acreditar o no esas elecciones.
Por supuesto, eso iba a contracorriente con el espíritu del acuerdo que habíamos firmado, pero además le daba materia a todo un sector que había dicho que no vengan, pues vienen a hacer justamente lo que dijo Diosdado Cabello. Entonces nos tocó reconstruir, no sólo con la Unión Europea sino con los actores políticos nacionales, rearmar la confianza. Dar garantías de que el CNE no va a permitir que eso ocurra.
No vamos a ceder nunca en la responsabilidad y en las facultades que tenemos, por términos de soberanía nacional, ningún ente, organismo, instancia, persona ajena a Venezuela pueda ni dar resultados ni acreditar. Simplemente vienen a una tarea muy específica que es darle acompañamiento a un proceso. Ya habrá un informe donde mencionaran recomendaciones. Yo espero que también haya reconocimiento a las virtudes de nuestras elecciones, de nuestro sistema. Todo esto es parte del esfuerzo que nos toca hacer tanto de un lado como de otro para volver a generar confianza.
Cuando se dan declaraciones de ese tipo, por ejemplo, ¿ustedes no tienen comunicación con Diosdado Cabello o hablan con él de manera informal?
—Actuamos, permanentemente estamos hablando, dando mensajes, haciendo reuniones, hablando con hechos y yo entiendo que esta fuerte dinámica, esta fuerte polarización, tiene implícito estas cosas. Esa no es la única que me preocupa, porque no es el único momento en que ha habido problemas. Con lo de Borrell fue un momento delicado pero, hace poco, al Partido Popular Europeo le tocaban designar a tres miembros para incorporar a la misión de observación a doce parlamentarios. Finalmente, entiendo, según la última notificación, van a venir nueve solamente, porque los tres que les correspondía a ellos no van a ser designados porque ellos no van a acreditar esa misión. Todo hay que irlo construyendo todos los días, hay cosas que podemos atender, hay cosas que se nos escapan de las manos.
Hay un tema sensible que son las inhabilitaciones políticas. Hay 17 candidatos, la mayoría disidentes del chavismo. ¿Por qué el CNE no ha tenido una posición más firme en defensa del derecho que tienen esos ciudadanos a representar a sus conciudadanos y a postularse? El caso más emblemático es el de Eduardo Samán y los postulados del PCV.
—El Consejo es un poder del Estado, tiene unas facultades, tiene unas competencias, tiene una función y le corresponde interactuar con el resto de los poderes. Cuando recibimos notificación de que determinada persona ha sido inhabilitada o cuando se ha levantado una inhabilitación, que también ha habido un número importante, a nosotros, como cuerpo, nos corresponde aplicarlas porque si no sería entrar en colisión con competencias de otros poderes, más allá de la opinión que cada uno pueda tener. Aquí yo me reservo la mía porque me toca hablar como presidente del cuerpo y cabeza de un poder del Estado en el que me toca hacer cumplir unas disposiciones y una ley. Sin duda, creo que quienes se han visto afectados tienen el derecho de ir a instancias para apelar a esa decisión. No en el Consejo…
Al TSJ o a la Contraloría…
—Exactamente. Instancias que yo estoy seguro recibirían y deberían procesar estos temas.
Usted dijo que le llamaba mucho la atención el equilibrio que había en VTV. Sucede que de acuerdo con mediciones que han hecho observadores imparciales, la cobertura en VTV es 75 % hacia el chavismo y un 25 % hacia la oposición. Incluso el mismo rector Roberto Picón ha llevado unas mediciones y dio unas cifras en algún momento. ¿Puedo explicar esa afirmación?
—Yo se lo dije al rector Picón, ¿de dónde sacaste tú esas cifras? Porque el CNE tiene una sala de monitoreo. Yo nunca he dicho que hay un equilibrio total.
Acláreme el contexto, es lo que uno lee…
Esa fue una entrevista con Vladimir Villegas, creo. Cuando nosotros hemos hecho los comparativos con otras elecciones, siempre en las campañas arrancando, no solo VTV sino en general todos los medios, los desequilibrios han sido mucho más pronunciados. Yo no sé si en el marco del esfuerzo del diálogo, del entendimiento, ha habido un sosiego en relación con este tema. Debo decir que en relación con las plantas y con los medios, los canales de televisión, hemos tenido relación permanente, diaria prácticamente. Le estamos advirtiendo, a veces sin abrir las averiguaciones, digamos sin pasar a la fase administrativa de apertura y se han corregido las cosas.
Nosotros hemos hecho una solicitud de que haya equilibrio en la cobertura informativa, en los programas de opinión y, debo decir que, en general, hay unas plantas de televisión que no estaban cubriendo el tema de la campaña, cero cobertura.
Tenemos una sala de monitoreo y día a día, los rectores todos tenemos el acceso a esto y tenemos el registro y donde hay los ilícitos inmediatamente nos activamos. Entonces, hay dos plantas de televisión que han tenido los más pronunciados desequilibrios que son VTV y Globovisión.
Pero entonces, ¿cuando usted hablaba del equilibrio de VTV era con relación a otros procesos?
—Sí, cuando decía que me sorprendía… VTV y los otros medios. Además esto es construido. Nos hemos reunido, hemos hablado. Yo tuve una muy buena reunión con el ministro de Comunicación, Freddy Ñáñez. Tengo constancia de que él ha bajado instrucciones al Sistema de Medios Públicos. Sé también de las plantas privadas, por ejemplo, Globovisión me dice “me cuesta mucho que candidatos del Gran Polo Patriótico me acepten venir a los programas de opinión. Yo los invito y no vienen”. VTV dice lo mismo “me cuesta mucho que candidatos de la Mesa de la Unidad Democrática o de la Alianza Democrática me acepten venir”. La otra cosa que dicen es: no nos envían las pautas informativas de las actividades, tanto de la tolda… en el caso de VTV la tolda opositora o Globovisión de las toldas del Gran Polo Patriótico.
Ahora, yo discutía con algunos colegas: por qué tu pones aquí que el 80 y pico por ciento de la cobertura informativa de VTV es… de dónde salen esos datos. “Bueno es que el Presidente estuvo tres horas”. Pero ya va, si es el Presidente en un acto de campaña entiendo; ahora el Presidente transmientiendo un acto de Gobierno, no.
Claro, pero el Presidente hace sus trampitas, porque en un acto de Gobierno invita a los candidatos y hace proselitismo…
—Puede ser y eso hay que identificarlo, creo que lo hemos incluso anotado dentro de los llamados de atención que hemos hecho. Mira que estamos trabajando en esa dirección. Por supuesto no es, no logramos una situación óptima, pero yo quisiera apuntar dentro de los haberes de esta elección como positivo ese esfuerzo que hemos hecho en el Consejo.
Dos candidatos a gobernadores en Aragua denunciaron públicamente que en las zonas de paz los pranes no les permiten realizar actos electorales y que tienen vedados ciertas zonas del estado Aragua y ahí solo puede entrar.
—Sí. Lo leí en Crónica.Uno, justamente.
Eso lo escribió nuestra corresponsal y también pasa en Apure, que la guerrilla FARC, el Frente Bolivariano de Liberación Nacional permite a los candidatos del PSUV que se movilicen. Y una cosa que aparentemente está sucediendo —claro no tengo pruebas ni nombres ni nada, pero es un temor de alguna gente— es que aparentemente hay aspirantes de grupos delincuenciales armados aspirando a cargos en los consejos legislativos
—Lo de Aragua lo vi y lo identifiqué, lo procesamos como una denuncia a investigar. Yo pedí inmediatamente, y debe seguramente llegarme hoy, mañana, desde las instancias del CNE en el estado Aragua, en el sur de Aragua, es muy complejo en algunas zonas la situación. De todas maneras ya alerté al Plan República, porque nosotros tenemos que hacer el esfuerzo de garantizar los derechos políticos, no solo de los ciudadanos y las ciudadanas, sino de los candidatos y las candidatas, las organizaciones con fines políticos. Ahí con toda seguridad son temas que trascienden al Consejo, pero nosotros no podemos quedarnos de brazos cruzados y estamos haciendo las articulaciones.
Tengo denuncias en sentido contrario también, no las voy a nombrar porque están en investigación, pero donde también está proscrito como la actividad política en zonas del Táchira, del lado del PSUV y del Polo Patriótico donde no se les permite, donde hay persecución. Sabemos la complejidad de la frontera que tenemos. Sobre todo la frontera con Colombia, lo extensa y compleja de una situación que vive el hermano país y que afecta y pasa del lado venezolano, asuntos que no deseamos.
¿Se eliminarán finalmente los puntos rojos?
—Hay dos temas: una de las garantías que nosotros anunciamos, lo reafirmamos y una decisión que tomamos en el Consejo es ratificar la prohibición de los puntos de animación política.
Pero eso siempre lo prometen y nunca se cumple…
—Pero te debo decir que hemos tenido reuniones y estamos resueltos, no te puedo decir que lo vayamos a cumplir al 100 %, pero además debo decir, porque lo vi en los medios de comunicación, varios de los actores políticos de ambas toldas han hecho ese anuncio y se han comprometido públicamente, espero que se confirme eso. Te digo esto porque es uno de los temas que se han pedido como garantía, reafirmar esto.
¿Qué opina usted de los protectorados y de las ciudades comunales?
—Eso no es competencia nuestra, pero te puedo decir que sé que el presidente de la República anunció que él se comprometía o había anunciado que no iba a haber más la figura de protector, del protectorado en los estados, que es un asunto que ha estado en el debate público.
Yo le preguntaba su opinión porque, de alguna forma, el CNE tiene que velar por los intereses de las personas que son escogidas por la ciudadanía y que luego les ponen otra persona a la que se le asignan recursos y tienen autoridad…
—Pudiera dar una opinión personal, pero prefiero no hacerlo porque desde esta posición cualquier cosa que yo diga involucra a la institución y compromete, digamos, el cargo que ocupo. Pero, el Consejo lo que si es que nosotros tenemos competencias para garantizar los derechos políticos de los electores y las electoras, y de los candidatos y las candidatas, y de las instituciones con fines políticos, hasta que han sido proclamados y son investidos de su cargo, y se le otorgan sus credenciales. Ya de ahí en adelante nosotros perdemos facultades para actuar.
Cuando Diosdado Cabello apunta directamente a atacar al vicepresidente Enrique Márquez o al rector Roberto Picón, que lo acusa y dice que es el rector del dirigente Henrique Capriles, ¿ustedes debaten ese tema? No he visto una posición institucional en defensa de los rectores.
—No hemos tomado posición ni en defensa de ellos ni de los otros rectores que son atacados.
¿Por qué no se defienden como cuerpo e institución?
—Es un tema que hablamos permanentemente. Cada vez que nosotros tomamos una posición… es que casi todas las decisiones que tomamos son polémicas porque al ordenar un proceso político o al orientar de una determinada manera el proceso electoral, frecuentemente es interpretado como una adscripción a una tolda política, individual o colectiva.
A mi colega Enrique Márquez y Roberto Picón los han atacado de lado y lado, pero con todo…
Hay un sector de la oposición que los quiere linchar…
Les dicen de todo. Y a nosotros también. Digamos a nosotros, cuando digo nosotros estoy hablando de la totalidad del Consejo en sus diversas expresiones. Dicen que el Consejo es tres a dos: tres chavistas y dos… entonces, ahí meten, acusan a unos, a otros. Nosotros, siempre el llamado es a mantener ecuanimidad, y a mantenerse a salvo. Porque una vez que nosotros pisemos el peine de la diatriba política podemos perder el rol que nos corresponde como árbitro.
Con relación al material electoral, ¿ya empezó la distribución?
—Ya prácticamente están la totalidad de las máquinas producidas, y queda un porcentaje muy pequeño de máquinas que van a llegar a los estados más cercanos a la capital.
¿Y el cotillón electoral ya empezó a fue distribuido?
—Ya el cotillón está despachado.
¿No tienen un porcentaje?
—97 % fue que leí la última de máquinas producidas.
¿Qué le diría a un elector que después de leerlo igual no le crea nada?
—Este CNE ha trabajado con ahínco y sentido patriótico, no pensando en una, dos, o tres banderas políticas. Está trabajando por el país, con la conciencia de que están en juego muchas cosas para el país —no solo elegir gobernadores y alcaldes—, sino por el valor que esta elección pueda tener en el proceso de estabilización de la paz del país, que es el requisito para que todo sea posible. Y allí me atrevo a hablar por todos los rectores que han obrado de manera honesta. Habremos cometido errores, seguramente. Hemos hecho un trabajo que se verá el 21-N. El que vote, verá su voto expresado allí.
¿Usualmente qué hace usted cuando está estresado para relajarse? ¿Lee, ve series? ¿Qué libro está leyendo ahorita?
—Estoy leyendo ahorita un libro muy bueno de Luis Britto García que se llama El Pensamiento de Bolívar, Economía y Sociedad, interesante sobre todo la parte económica. Luis Brito tiene una formación económica también, y él hace ahí una lectura un poco de cómo se estructuró el pensamiento de El Libertador en materia económica. Lo comencé a leer hace unos tres días. Un libro que se acaba de presentar en la Feria del Libro y la verdad es que me ha puesto a ver cosas que no había visto, yo que he leído a Bolívar, cosas que habían pasado desapercibidas en la lectura previa.
Leo, leo.
Como historiador lee, pero ¿qué es lo que más le gusta? ¿Lecturas históricas o lee novelas, poesía, ensayos?
Leo poesía y leo historia. Mi poeta favorito es Ramón Palomares.
¿Ve series?
—Sí, series históricas. Hay una que está en Netflix que se llama “Ertugrul”, mis colegas dicen que es muy larga, pero trata sobre el conflicto con las cruzadas. Es ambientada en el siglo XIV. Tengo mala memoria, pero con mi esposa vi una serie nórdica que me encanta: Borgen, es fantástica.
Ah, una serie sobre política. Pero ella no podría existir en la vida real, es una dirgente política demasiado buena…
— Sí, sí. (Risas…)
Fotos: Adolfo Acosta
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