Modalidad del pico y placa encarece costo de gasolina colombiana en el Táchira

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Antes de la restricción, la gasolina colombiana, llevada al Táchira por las trochas, se cotizaba hasta en 3000 mil pesos por litro, ahora la misma se vende en 8000 mil pesos el litro y cuando se complica el suministro puede costar mucho más. Conductores temen reaparición de colas kilométricas.

San Cristóbal. Poco más de un mes tiene la nueva restricción a la venta de gasolina implementada por la Mesa de Combustible en el Táchira y el panorama dista mucho de mejorar, pues, aunque las lluvias han mermado, la situación en lo que respecta a la escasez de combustible se mantiene.

Seis meses duró la calma en los tachirenses, quienes tienen más de 20 años sufriendo, en lo que respecta al abastecimiento de combustible y los planes de regulación nunca han surtido efecto.

Si bien el principal problema que causó colas interminables en la entidad, era el contrabando, dado el diferencial en los precios de la gasolina entre Cúcuta y Táchira, ahora son otros los problemas. Las lluvias terminaron de destruir la vialidad que desde el estado Zulia conectaba con el Táchira, por lo que son menos las gandolas de carburante que llegan a la entidad, desde el llenadero de Pdvsa en Bajo Grande.

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Ya va un mes desde el inicio de la restricción en la venta de gasolina. Foto: Ana Barrera.

Esto causó un efecto dominó en lo que concierne al precio de la gasolina en el mercado negro que llevaba medio año con los números casi iguales a los del precio de la gasolina internacional, en vista de que no había restricción por terminal de placa.

Sin embargo, desde la nueva puesta en marcha de la modalidad pico y placa a mediados de noviembre, el valor de la gasolina, que se vende en botellas plásticas en las carreteras, en especial aquellas que conducen a la frontera, se disparó en más de 300%.

De venderse entre 2800 o 3000 mil pesos, el litro de gasolina traído de Cúcuta se cotiza ahora en 8000 mil pesos, gasolina que pasan por las trochas desde el vecino país, ya que en la actualidad, afirman negociantes, “no es rentable seguir llevando a Colombia el combustible venezolano”, que en otrora era el más cotizado por los cucuteños, dada la calidad que tenía.

Trasnochados

Para Laura Rojas, la lotería del combustible le quita el sueño, al menos dos o tres veces por semana. Debe madrugar porque no solo ella usa su carro para ir al trabajo. Sus hijas van a la escuela y por eso debe madrugar más de lo necesario cuando la aguja del marcador ya marca menos de medio tanque.

Para llenarlo de gasolina, debe disponer de al menos 50.000 mil pesos, o 10 dólares, si tiene medio tanque. De estar más bajo, depende de cómo la haya tratado la economía.

Con esos 50.000 mil pesos, afirma, surte 20 litros, pero en el mercado negro, es poco más de seis litros de gasolina.

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Si bien no hay restricción en los litrajes, no todos los días se pueden abastecer de combustible. Foto: Ana Barrera.

A veces nos toca al menos tres litros, como para llegar, pero no está fácil para uno sacar del bolsillo 80 mil pesos para 10 miserables litros de gasolina que le venden a uno en pipotes plásticos”, dijo.

Lamenta que nadie informe de la situación que viene a desgastar aún más los bolsillos de los tachirenses, ya que, desde hace dos años, no se vende gasolina a precio regulado en el estado, salvo para algunos pocos que reciben la venia de los encargados del suministro de gasolina y reciben el beneficio.

El mayor temor

Cuando se aproximan las fiestas decembrinas, el temor de nuevas colas kilométricas por gasolina, tiene en zozobra a los tachirenses, quienes ven como la situación se comienza a complicar en todo el país, por razones que aun nadie define.

Siempre en diciembre nos esclavizan en las colas. Así fue el año pasado. Ahorita vamos por lo mismo. Nunca nos dejan pasar un diciembre en santa paz”, dijo Luis Navas, quien trabaja como transportista hacia la frontera.

Nadie quiere bolívares

Si bien en todo el país los usuarios pagan con bolívares, hasta este año, fue que se implementó el pago en la moneda local en las estaciones de servicio, ante la inestabilidad del peso en el vecino país de Colombia, pues quien quiera pagar con la moneda vecina, debe verificar el valor del dólar TRM.

Son pocas las bombas que reciben bolívares. Foto: Ana Barrera

Previo a las elecciones presidenciales en Colombia, la fluctuación del precio hacía que la gasolina saliera más cara si se pagaba con peso que con dólares o bolívares.

Sin embargo, en la actualidad, las reglas del juego cambiaron y en las estaciones de servicio le hacen mala cara a quienes van a pagar con punto de venta. Aseguran que incluso, ponen la tasa más alta del dólar para que les quede algo de ganancia.

“Es injusto que debamos pagar más de lo que dice el Banco Central de Venezuela. Si el dólar está a un precio, ellos lo cambian a otro y siempre uno es el que pierde”, dijo Raúl Mogollón.


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