El técnico yaracuyano presentó su renuncia al cargo de seleccionador nacional en una carta pública a través de las cuentas oficiales del combinado venezolano.

Caracas. No dio la cara. Una vez más, Rafael Dudamel se valió de las redes sociales del combinado criollo, que siempre manejó como una cuenta alternativa a su proyecto personal, para anunciar su salida de la Vinotinto a menos de tres meses del inicio de las eliminatorias mundialistas, donde Venezuela debutará ante la selección de Colombia.

Atrás quedaron las consignas de “Somos de talla mundial” o “Catar 2022, el objetivo de todos” o inclusive las palabras de optimismo tras la victoria ante Japón en el amistoso de noviembre. Dudamel esperó la ocasión que mejor le convenía para dejar la selección. Y ese momento finalmente llegó con la oferta del Atlético Mineiro de Brasil, al que, salvo imponderables principalmente de tipo económico, el otrora portero se vinculará en los próximos días.

En una misiva que intenta apelar a la emotividad y que está plagada de frases hechas y edulcoradas, el ahora exseleccionador intenta justificar su renuncia con base en su deteriorada relación con el vicepresidente de la Federación venezolana de Fútbol, Jesús Berardinelli, un “impasse” que llevaba meses, pero que ha podido zanjarse con una mediación más eficiente del presidente de la FVF, Laureano González, o en el peor de los casos, con una salida de Dudamel más anticipada tras la última Copa América en Brasil.

Ahora, la Vinotinto, uno de los combinados más discretos de Suramérica y el único de la Conmebol que nunca ha disputado una Copa del Mundo, deberá empezar de cero y adaptarse a una nueva idea de juego, en un año donde hay clasificatorias y otra edición del torneo de selecciones más antiguo del mundo.

“Hoy he tomado la decisión de dar un paso al costado, de renunciar a la Vinotinto, en su mejor momento histórico, sí, y a las puertas del inicio de un nuevo ciclo de eliminatorias. Considero que es lo mejor para la selección nacional. Mi relación con la dirigencia se fue deteriorando aceleradamente en los últimos tiempos y en las condiciones actuales era muy complicado continuar”, explicó el exportero, quien también mencionó “condiciones de trabajo que ya no se le ofrecían” para referirse a su eventual sucesor.

¿Qué dejó el ciclo de Rafael Dudamel en la Vinotinto? Al cortar anticipadamente un proyecto cuyo objetivo primario desde que inició era competir por un cupo al Mundial Catar 2022 es poco lo que se puede destacar en términos prácticos.

Dudamel utilizó la parte final de la eliminatoria Rusia 2018 para empezar a darle protagonismo a la camada subcampeona del mundo en categoría juvenil. Los Fariñez, Yangel Herrera o Ronald Hernández sumaron minutos y ya están mucho más acostumbrados a la máxima competencia, donde incluso se han vuelto habituales en la selección.

En cuanto a juego, la Vinotinto vivió una primera etapa de muchas dudas y se fue estabilizando con una idea poco vistosa, donde en muchísimas ocasiones se sacrificó el talento de ciertas individualidades como las de Rómulo Otero o Yeferson Soteldo en aras de mantener una estructura táctica que intenta priorizar el orden defensivo y la salida rápida al contragolpe para encontrar a la única referencia fija en el ataque, casi siempre la de Salomón Rondón.

En la última Copa América, la selección mostró un poco más de regularidad en su juego, sobre todo en la fase de grupos, pero falló en dar el tan ansiado salto de calidad en los cuartos de final ante, probablemente, la selección argentina más floja de la historia.

Si bien Dudamel y la Vinotinto cerraron 2019 con apenas tres derrotas en 12 encuentros, en el apartado de competencias oficiales de todo el ciclo, el exseleccionador quedó en deuda. De 20 choques ganó solamente cinco, empató ocho y perdió siete con 19 tantos a favor y 26 en contra. La efectividad fue de 38,30 %. Y en total, el yaracuyano dejó marca de 12 victorias 17 empates y 13 caídas con 52 goles anotados y 49 encajados para efectividad de 42 %.

Ahora, el final de un ciclo obliga a una decisión en las próximas horas. La pelota está en la cancha de la FVF y los candidatos apuntan a mantener a un criollo en el banquillo de la Vinotinto.


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