En Carabobo hay 91 estaciones de servicio, 74 de ellas surten la gasolina a precio subsidiado, las 17 restantes ofertan a precio internacional. En las colas no se respeta el distanciamiento físico. Entre quienes se mantienen en cola se turnan por guardia para cuidar los vehículos durante la noche, también intercambian alimentos y bebidas.
Valencia. Este lunes 17 de agosto, cuando empieza una nueva semana de cuarentena radical por COVID-19, carabobeños amanecieron en estaciones de servicio para llenar el tanque de sus vehículos. Desde hace tres semanas hay escasez severa de combustible y, otra vez, se observan las colas por gasolina.
Las listas pueden agrupar hasta 800 personas, y se invierten entre tres y cinco días en cola para surtir de combustible. En medio de este caos, hay personas que optan por la solidaridad y por “organizar las colas” de manera voluntaria. El altruismo y la solidaridad salen a flote.
Johana Vasquez decidió “llevar el orden”, porque sufrió en carne propia perder cinco días de cola por gasolina porque no había organización. El viernes 14 de agosto logró surtir su vehículo de combustible, sin embargo, tres días después permanecía en la cola de la Estación Santa Ana, ubicada en el municipio Naguanagua, porque tenía anotado el orden correlativo de las personas que quedaron rezagadas.
A las 4:00 a. m. la mujer de 60 años de edad comenzó a “pasar la lista” y depurarla. La aglomeración de personas a su alrededor era elevado, muchos no portaban el tapabocas de manera correcta. Aun así, la mujer se mantuvo firme y anotó el nombre y apellido de cada uno de los que deseaban abastecerse de gasolina.
Johana aseguró que solo está protegida por una gorra y un tapabocas artesanal. No tiene miedo de contraer COVID-19 porque de siente protegida por su fe y, con profunda confianza, alegó que cuando una persona hace una labor altruista está protegida.
Yo pienso que cuando uno actúa desde el corazón, y con Dios allí, siempre nos cuida, cuando no tenemos un interés particular. La gente confía en mí, sabe que no estoy metiendo a nadie”, manifestó Vásquez.
Recomendó a quienes desean echar gasolina a sus vehículos que verifiquen las estaciones que surten con regularidad, y guardar las normas de prevención contra la COVID-19. Además, rechazó que la administración de Nicolás Maduro no garantice el abastecimiento de combustible, sobre todo, en tiempos de pandemia.
Nos dicen que debemos guardarnos, pero no podemos porque tenemos que abastecernos de gasolina. No hay políticas de Estado que garanticen el acceso a la gasolina”, señaló.
Entre quienes se mantienen en las colas por gasolina, a pesar de que no respetan el distanciamiento físico, se apoyan entre ellos, comparten bebidas y alimentos; también hacen turnos para cuidar los vehículos para no ser víctimas del hampa.
En Carabobo hay 91 estaciones de servicio, de las cuales 74 surten la gasolina a precio subsidiado, mientras que las otras 17 la venden a tarifa internacional.
El pasado viernes 14 de agosto se registró una fuga en la unidad de craqueo catalítico fluidizado de la refinería El Palito, ubicada en el municipio Puerto Cabello. Por este incidente la planta no paralizó su función. Está refinería tiene capacidad para producir 146.000 barriles diarios, sin embargo, en la actualidad produce 35.000 barriles por día. La refinería El Palito es la tercera más importante del país y es la única que está produciendo gasolina.
De acuerdo con la administración de Nicolás Maduro, en la entidad carabobeña se registran 450 casos de COVID-19 y diez fallecidos.
Médicos Unidos de Venezuela, capítulo Carabobo, reveló hace siete días que tres médicos han perdido la vida con coronavirus en la entidad.
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