En julio, la Alcaldía de Caracas ejecutó un plan de mantenimiento vial en la parroquia El Junquito. Sin embargo, a pesar de esta intervención, los vecinos denuncian que la situación de las calles es crítica y requiere una inversión estatal más significativa.
Caracas. La parroquia El Junquito, en las afueras de la ciudad, enfrenta una crisis de infraestructura que se agrava con cada temporada de lluvias. Las calles están llenas de huecos y baches de diversos tamaños, mientras que los botes de aguas servidas recorren tramos enteros de la vialidad, lo que convierte el tránsito diario en una odisea para sus habitantes.
La situación se tornó crítica la semana pasada, cuando una onda tropical provocó intensas lluvias en varias regiones de Venezuela. En El Junquito, las alcantarillas desbordadas y el mal estado de la carretera llevaron al colapso de la vialidad.
Las corrientes de agua arrastraron piedras, escombros y desechos sólidos desde el kilómetro 4 hasta La Yaguara, generando preocupación entre los residentes.
“Las autoridades tienen olvidada a la parroquia. Aquí solo vienen a lanzar pañitos de agua tibia en la vialidad y cada vez que llueve todo se vuelva a dañar”, reconoció, Victorina, vecina del Kilómetro 7.
La queja de Victorina resuena entre otros habitantes que han visto cómo el asfalto recién colocado se levanta en menos de un mes y deja al descubierto sendos baches, que se suman a los derrumbes y la falta de iluminación, que convierten el avance en la zona en una tarea peligrosa.
Las troneras de los huecos en la carretera, los derrumbes, la falta de iluminación y la neblina hacen prácticamente imposible avanzar con seguridad en la zona y afecta la movilidad de quienes vivimos aquí”, dijo.
Recuperación limitada
En julio, las autoridades de la Alcaldía de Caracas realizaron una jornada de atención integral dedicada a la recuperación de la vialidad de la carretera Yaguara-El Junquito, la cual finalizó una semana antes de que se realizarán las elecciones presidenciales en Venezuela del 28 de julio pasado.
Sin embargo, a dos meses de este plan, en la vialidad de El Junquito solo se pueden observar las máquinas que utilizaron para los trabajos. Para Victorina la carretera está peor que hace cinco meses porque las autoridades rasparon y dejaron tramos sin asfalto.
Eso es falta de Alcaldía y de un buen gobierno que se preocupe por el interés del país y los ciudadanos. Necesitamos un buen gobierno con gerencia ciudadana”, enfatizó.
Derrumbes que afectan la vialidad
Yohana Carmona, residente del kilómetro 5, contó que las lluvias provocaron varios derrumbes, especialmente en los primeros kilómetros de la vialidad. Desde entonces, un deslizamiento de tierra en el kilómetro 4 obstruye un canal, lo que afecta el tránsito vehicular y peatonal.
Añadió que en los kilómetros 3 y 2 de la parroquia también hay deslizamiento de tierras e insiste en que las autoridades no han solucionado el problema. “Las personas que han construido alrededor de la carretera también son responsables de esta situación por no realizar una buena canalización de las aguas negras”.
Carmona señaló que los derrumbes y las construcciones ilegales han dañado las tuberías de agua potable, lo que provoca pérdidas de agua y afecta el suministro en los sectores más altos.
Para los vecinos es indignante ver cómo se desperdicia el agua en los primeros kilómetros, mientras los demás sufren largas temporadas por la falta del servicio.
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