En Aragua solo 75 días de clases se impartieron durante el año escolar 2018-2019

solo 75 días de clases

80 % de los contenidos programáticos no se cumplió y en consecuencia, la preparación de los estudiantes es muy deficiente. Desde fallas y faltas de los servicios básicos, hasta problemas de infraestructura educativa y la incontrolable diáspora de docentes, se suman a la grave crisis del sistema educativo.

Maracay. De los 180 días de actividades establecidas para el año escolar, el correspondiente al período 2018-2019, apenas cubrió unos 75 días de clases, de acuerdo con un balance ofrecido por el Comando Intergremial de Aragua, integrado por el Colegio de Profesores, Sinprotec, Sitraenseñanza, SUMA, Colegio de Licenciados, Fetrasinet y la Asociación de Jubilados de la gobernación.

Richard Rivas, presidente del Colegio de Profesores, no duda en calificar que este año escolar, próximo a finalizar, el peor del siglo XXI.

80% del contenido programático fue suprimido y para justificar las evaluaciones, se asignaron dos o tres temas, durante el tercer y último lapso, denunció.

Los gremios docentes de la región detallaron las circunstancias por las cuales este período es considerado el peor en muchos años. Citaron como ejemplos: la pésima calidad de los servicios públicos que también padecen las instituciones educativas, los paupérrimos salarios que perciben los docentes, la deteriorada infraestructura educativa, la desaparición de los programas de alimentación o de las “Canaimitas” y la cada día más recurrente diáspora de profesionales de la docencia.

En este caso, los más afectados son los niños y adolescentes en formación, que muchas veces no cumplen con los requisitos académicos y aun así, son promovidos al grado superior inmediato e, inclusive, se gradúan de bachilleres para intentar ingresar al sistema educativo universitario.

75 dias de clases
Foto: Gregoria Díaz

La profesora Yeseni Ramírez, docente del Pedagógico de Maracay, resiente que muchas veces se ha visto obligada a reprogramar el inicio de los nuevos ingresos, pues muchos de los jóvenes que llegan a la UPEL Maracay, ni siquiera saben tomar un lápiz.

“He recibido a muchachos que inician una carrera universitaria y no saben escribir y otros, tienen graves dificultades para leer”, admitió.

El profesor Jesús Elorza informó que han recibido denuncias, muchas de ellas de instituciones privadas, en los que algunas materias y cátedras las imparten los propios padres o representantes, a cambio de condonar las matrículas de sus representados.


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