Adrián Ochoa, de 23 años de edad, tenía seis meses de haber regresado de Colombia. Andrielys Ochoa, hermana de la víctima, añadió que funcionarios de Polisucre y la DCDO estuvieron hasta altas horas de la noche en el barrio Unión de Petare.
Caracas. La noche del miércoles, 7 de junio, los gritos se confundían con el sonido de la sirena de Polisucre, pero se distinguía una voz que clamaba: “no me maten, no me maten”.
Adrián Ochoa fue asesinado, presuntamente, por funcionarios de Polisucre en un operativo en conjunto con la Dirección Contra la Delincuencia Organizada (DCDO), en el sector Lisboa, del barrio Unión, en el municipio Sucre.
Según sus familiares recibió cinco impactos de bala en la pierna y el pecho. Según Andrielys Ochoa, hermana de la víctima, el barrio estaba sin luz al momento del acontecimiento y no tenían muy claro lo que sucedía, aunque escuchaban los gritos de Adrián.
El joven, de 23 años, tenía seis meses de haber regresado a Venezuela, luego de estar en Colombia por tres años, donde se dedicaba a vender frutas.
Andrielys añadió que al sitio arribaron miembros de Polisucre y la DCDO y que estuvieron en la zona hasta altas horas de la noche.
“Nos sentimos muy inseguros en un lugar donde la policía entra y sale y hace lo que le da la gana”, expresó un allegado del fallecido.
Adrián estaba desempleado y tenía dos hijos, de tres y dos años de edad.
Otro fallecido en barrio Unión
A parte de Adrián , en esa misma zona también fue presuntamente asesinado por grupos policiales, Yonder Jiménez, de 22 años. Ambos eran amigos y vecinos en esa localidad de Petare.
Un pariente cercano, quien prefirió no identificarse, relató que Yonder seguía con vida luego de recibir los impactos y que no fue trasladado a tiempo al hospital. Desconoce cuántos disparos recibió, porque estaban a la espera de los exámenes forenses.
Yonder vendía dulces por varias partes de Petare y dejó huérfano a un niño de dos años de edad.
Versión oficial
La versión de la policía del municipio Sucre sobre este hecho, sostiene que el servicio de patrullaje motorizado mantuvo “un enfrentamiento con grupo armado”, en el que “fueron heridos dos antisociales” que posteriormente fallecieron en un centro de salud.
En su cuenta de Twitter, Polisucre indicó que estos jóvenes, supuestamente, robaron a un grupo de vecinos que esperaban el surtido de la bombona de gas en la comunidad, la mañana del 7 de junio. En el enfrentamiento lograron recuperar dos armas de fuego y un celular de unas de las presuntas víctimas del robo.
De acuerdo con el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), entre enero y abril se registraron al menos 25 presuntas ejecuciones extrajudiciales. En 2022 el OVV documentó 23 víctimas, dos casos menos que en 2023. Igualmente, las operaciones policiales se elevaron de 10 a 12. La totalidad de las víctimas eran hombres y 8 de cada 10 de las intervenciones ocurrieron en la calle.
La ONG reportó en su informe cuatrimestral que el Cicpc se vio reflejado en 50 % de las intervenciones documentadas. Aunque también participaron la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la policía estadal, y se realizaron operativos en conjunto.
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