Desde 2010 se aplicó una reducción de celdas en Venalum hasta quedarse en cero cuando el apagón de 2019 sacó de servicio las 19 celdas que le quedaban. El 30 de agosto, de 205 celdas que lograron reactivar, se perdieron casi 50.
Ciudad Guayana. Como ocurrió en 2019, el apagón nacional que se registró este 30 de agosto trajo secuelas para la poca operatividad que hay en las empresas básicas de Guayana. El caso más visible fue el de Venalum, luego de un video difundido en redes sociales en el que se aprecia unas explosiones en la planta.
https://twitter.com/EsNoticiaVzla_/status/1829721282533081293
Un trabajador de esta empresa, quien prefirió no ser identificado por la persecución poselectoral que hay en el país, explicó que lo que ocurrió en Venalum fue un efecto anódico.
“El efecto anódico sucede cuando la celda está apagada y le entra la corriente. Si hay una fisura en algún carbón, empieza a dar esas explosiones, que no son normales, por supuesto, porque afecta el casco y probablemente la celda se vaya por el lado más débil”, detalló.
Hasta el cierre de esta nota no había información oficial de la cantidad de celdas en Venalum que salieron fuera de servicio. Fuentes internas comentaron a Crónica Uno que la falta de electricidad llevó a que se apagaran 40 celdas. Más tarde, otros trabajadores informaron que la cifra aumentó a 47 celdas inoperativas, de las 205 que estaban en funcionamiento.
Productividad mínima
Venalum cuenta con una capacidad máxima instalada de 905 celdas. Las líneas de complejos de celdas I y II tienen 360 cada una, el resto la completan la línea V. En 2018, la operatividad se redujo a 400 celdas. Para el 7 de marzo de 2019, apenas habían 19 celdas operativas. Todas se perdieron por el llamado “mega apagón” de ese día.
En ese entonces, dirigentes sindicales indicaron que recuperar cada celda requería una inversión de 450.000 dólares, para revestimiento, materia prima y mano de obra. Para la reactivación de las 905 celdas, más de 400 millones de dólares.
Sin embargo, la empresa luego anunció el arranque paulatino de sus celdas hasta llegar a 205.
Un jubilado de esta estatal señaló que uno de los factores fundamentales para que se mantenga la operatividad de la celda es el baño frío, que solía generarlo Alcasa, empresa que también quedó sin producir tras el apagón de 2019.
“Venalum tiene otras celdas para hacerlo, pero no hay el baño frío. Entonces esto genera más caos y a esto le sumamos que Bauxilum no está produciendo aluminio. O sea, hay una situación bastante compleja”, agregó.
Trascendió que en Venalum preveían sacar de servicio 50 celdas, precisamente porque Bauxilum no está produciendo y no cuentan con materia prima. “Lo del apagón parece que fue propicio para que salieran esas celdas”, dijo una fuente interna.
Secuelas en otras empresas
Venalum no es la única empresa básica de Guayana que depende del suministro eléctrico para su operatividad, aunque en la actualidad está al mínimo de su capacidad instalada.
En Sidor, un trabajador comentó que este 30 de agosto sacaron a todo el personal administrativo debido a la falta de electricidad. Las demás plantas están prácticamente paralizadas, solo unas pocas que cuentan con generadores estuvieron operativas.
“La gente del turno de 3:00 p. m. a 11:00 p. m. fue solamente a cuidar las plantas. A los demás los mandaron a sus casas. Ya los de turno de 11:00 pm. a 7:00 a. m., como ya había regresado la luz, trabajaron normal, pero esperando que el proceso arrancara, viendo qué se quemó y qué no se quemó, porque cuando hay esos apagones fuertes siempre se quema algo y hay que tener cuidado cuando vuelves a arrancar la planta”, comentó la fuente sidorista.
En Bauxilum-Los Pijiguaos, empleados dijeron que allí hay una subestación que presentaba fallas desde días antes del apagón del 30 de agosto. Hasta la mañana de este 31 de agosto, pese a restituirse la electricidad en la zona, la subestación seguía sin arrancar. Esperaban un equipo técnico de Corpoelec de Amazonas para evaluar la posible causa de esa falla.
“Obviamente al no arrancar esa subestación, no arrancan los equipos del área Jobal, que es donde está la volcadora de vagones, donde está el recuperador, está el apilador de mineral y la correa 28, que es la correa que se encarga de cargar el mineral a el muelle”, comentó un trabajador de larga experiencia en Bauxilum.
La única información oficial sobre la situación del parque industrial de Guayana, luego de 16 horas sin electricidad, se refirió a Venalum. El vicepresidente de la junta interventora de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) dijo que trabajadores “lograron restaurar los operadores de la sala de rectificadores de la quinta línea”.
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