Calculan que en el último trimestre de 2016 se perdieron 700.000 empleos en el sector comercio

Los comerciantes cuestionan las limitaciones que tienen las empresas para adquirir pesos en las casas de cambio de las zonas fronterizas.

Caracas. La baja disponibilidad de mercancía por la caída en la producción y las importaciones, la menor demanda, el aumento de los costos y los ajustes salariales tienen al sector comercio en crisis, y por tal motivo, los establecimientos han recortado las nóminas.

Alfonso Riera, vicepresidente de Consecomercio, calcula que en el último trimestre del 2016 se perdieron 1 millón de puestos de trabajo en el sector privado y de ese monto 70 % (700.000) corresponde al sector comercio, que es el mayor empleador.

Comenta que cuando hay más egresos que ingresos, los establecimientos toman medidas y entre las acciones están las revisiones del personal.

La organización no tiene cifras de los comercios cerrados, porque se ha dificultado levantar la información, pero los voceros del sector estiman que la crisis se prolonga y más cuando se siguen autorizando aumentos de sueldos y fiscalizaciones. Riera añade que “si se fiscaliza un local, no hay certeza de si volverá a abrir”.

El representante de Consecomercio destaca que en 15 años han cerrado cerca de 500.000 empresas y actualmente operan 230.000 industrias y comercios.

En el interior del país los problemas crecen. Tras la orden del Gobierno de sacar de circulación el billete de 100 bolívares en diciembre, en varios estados se registraron protestas porque muchos se quedaron sin efectivo, y esos reclamos terminaron en saqueos, siendo el estado Bolívar uno de los más golpeados.

A los comerciantes afectados, el Gobierno les prometió créditos para su recuperación, pero dichos financiamientos han sido solamente para los de alimentos y en montos que llegan hasta los 100 millones de bolívares. Yorman Hernández, presidente de la Cámara de Comercio de Bolívar, apunta: “muchos comercios debieron ser indemnizados, sin embargo, no fue así”.

Por fuera

El pasado 16 de enero, el Presidente Maduro autorizó las operaciones en las casas de cambio de la frontera para que las personas naturales puedan comprar pesos, sistema que ha generado una nueva paridad de referencia.

Los empresarios cuestionan el mecanismo porque quedan por fuera. El sector privado ha tenido restricciones para recibir divisas a la tasa de Dipro (Dólar protegido) y a Dicom (dólar complementario) y se estructura otro esquema al cual tampoco pueden acudir.

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Daniel Montealegre, director de la Cámara de Comercio de Ureña (estado Táchira), señala que se crea un sistema en el que no hay acceso para las personas jurídicas: “De esto no se benefician ni las industrias ni los comercios”.

Franco Cafoncelli, director de Consecomercio en el Zulia, indica que “ese sistema con las casas de cambio ha tenido que ser en todo el país”.

Los voceros añaden que para que se pueda reactivar la frontera es necesario que se restablezca el libre tránsito.

Foto referencial: Mariana Mendoza


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