Colas en puntos rojos fueron más largas que en los centros de votación este 10D

En las parroquias Antímano, La Vega, San Juan y El Paraíso la indiferencia a participar en las elecciones municipales de este domingo 10 de diciembre, jugó rudo. Desde la mañana hubo poca afluencia de electores, que subió un poco al mediodía pero no igualó a procesos pasados.

Caracas. Otro proceso electoral madrugó a los vecinos de la parroquia La Vega con fuegos artificiales, como en ocasiones pasadas. Sin embargo, no salieron tan temprano a votar pues pasadas las 7:00 a. m. de este domingo 10 de diciembre apenas comenzaban a acercarse a los centros de votación.

En la Unidad Educativa Amanda de Snechell, en sector La Veguita, llegaron graneaditos. A las 6:10 a. m., a la hora estipulada, inició el proceso con poca afluencia, pese a que tuvieron que resolver la inasistencia de muchos miembros de mesa.

Al salir, los vecinos hicieron una larga fila para “escanear” el carnet de la Patria en un punto rojo que se encontraba a escasos metros del plantel. La cola era más larga que para ingresar a la institución a sufragar.

Esta situación se registró en la mayoría de los centros electorales de La Vega, la aglomeración de personas en estos toldos era mayor que en las colas para sufragar.

Por ejemplo, en toda la entrada de la Escuela Los Naranjos, en la calle La Zulia, dos mujeres se sentaron en un pequeño murito de cemento y cuando cada elector salía le preguntaban, amablemente, de qué sector eran. Dependiendo de lo que respondieran les informaban que hicieran la cola frente al centro, donde había tres mesas de plástico con varias personas revisando un montón de carpetas.

La mayoría de los vecinos acudía a los puntos rojos después de votar, con el carnet de la patria

Ambas, quienes también tenían unas carpetas en la mano, llevaban a los electores hasta esas mesas y ahí verificaban el carnet, después de votar.

Barrio arriba, en el sector Los Mangos, el panorama era el mismo. En la cera de en frente de la escuela Elba Hernández de Yánez repetían el proceso de verificación. Los habitantes acudían, a veces, sin que se lo pidieran.

Pero los puntos rojos no solo estuvieron muy cerca de los centros de votación, también se distribuyeron en varias partes de la comunidad, a donde se acercaban varios vecinos.

La parroquia La Vega pertenece al municipio Libertador de Caracas, donde hay 1.658.846 electores inscritos en el Registro Electoral. En principio, seis candidatos se postularon para las elecciones municipales de este 10 de diciembre.

Indiferencia y basura en Montalbán

Los centros electorales más grandes de la urbanización Montalbán lucieron vacíos durante el proceso. El colegio La Concepción y La Aplicación, que en elecciones anteriores tenían colas de varias cuadras, esta vez se encontraban casi vacíos.

En la urbanización se vio más moscas y basura que vecinos votando. La avenida Teherán desborda gran cantidad de bolsas de desperdicios, que desprenden olores fétidos.

En Montalbán la indiferencia fue tal que hasta los miembros de mesa fallaron. En La Concepción no asistieron alrededor del 50 %, situación que demoró la instalación de las mesas y el centro abrió a partir de las 8:00 a. m., dos horas más tarde.

A este plantel también llegaron habitantes preguntando dónde podían activar el carnet de la Patria, pues el punto rojo no estaba cerca del centro como en La Vega. Este se encontraba dos cuadras más lejos, frente al Centro Comercial Uslar.

La parroquia El Paraíso, del municipio Libertador, también se mostró floja a participar en los comicios. En el Colegio San José de Tarbes, ubicado en la avenida Páez, faltaron más de 20 miembros y tuvieron que constituir las mesas con miembros accidentales, que eran quienes estaban en la cola o los que servirían como testigos.

En la Unidad Educativa Teresiano, en la calle Los Laureles, la situación fue parecida aunque resolvieron a tiempo. A las10:00 a. m. llegaron algunos miembros y les asignamos otras tareas, de un aproximado de 1035 electores a las 10:00 a. m. habían participado 72, detalló Yorvis Benítez, coordinador del centro.

Antímano despertó después del mediodía

En esta parroquia al oeste del municipio Libertador, los vecinos comenzaron a despertar después de las 12:00 m. y un fuerte aguacero contribuyó en la demora.

En la Unidad Educativa Refugio de La Infancia también faltaron casi todos los miembros de mesa y comenzaron a las 8:00 a. m. por lo mismo.

Ha sido muy flojo el proceso, hasta las 10:30 a.m. habían votado 414 personas de casi 3000 que hay en este centro. Ya al mediodía comienza a llegar más gente, dijo José Bello, coordinador del centro.

Hacia Mamera, en la Unidad Educativa Mercedes Limardo, no había tanta soledad como en otros centros. Este plantel estaba nucleado con el Guzmán Blanco y la afluencia era distinta.

Sin embargo, José Bolívar, coordinador del centro, sostuvo que en horas de la mañana “casi nadie” fue a votar.

La cola para registrar el carnet de la Patria sí fue bastante larga, ni para ingresar al plantel había que hacer una de esa extensión. Varias mujeres participaron en la organización y cerca de la estación del Metro Mamera culminaban el proceso con quienes votaron.

En la Unidad República del Ecuador, en la avenida San Martín, también se activaron en la tarde. “El proceso ha ido lento, no tenemos la cantidad de personas de otras elecciones. En otras ya a las 5:00 a. m. la cola pasaba el elevado de la avenida, hoy a las 6:00 a. m. si había 12 personas era mucho”, detalló Reinaldo Linares, coordinador del centro.

Añadió que varios habitantes se presentaron a votar con el carnet de la Patria, pero les indicaron que solo se podía con la cédula láminada. Unos la traían, pero tuvimos casos en los que nos dijeron que querían votar con el carnet porque les habían robado la cédula. Las normas son las normas y no pudo.

A este lugar se regresaron vecinos que ya habían sufragado pero se les había olvidado validar el carnet de la Patria.

—Disculpa, ¿allá es que tengo que validar el carnet? —preguntó un motorizado a otro.

—Sí —le respondió.

—Gracias, es que voté y se me olvidó enseñar el carnet en el punto —soltó.

Fotos: Yohana Marra


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