Aumento indiscriminado en costo de servicios obliga a empresarios sucrenses a analizar otros mercados 

comerciantes | ingreso promedio

La Cámara de Comercio Industria y Producción de Cumaná ha denunciado el cierre de 23 empresas en lo que va de año y al menos dos analizan la posibilidad de mudarse a otras entidades del oriente del país para obtener mayores beneficios económicos.

Cumaná. Juan Marcano tiene más de 30 años dedicado a la venta de pinturas y otros materiales de la construcción en el estado Sucre y ya no le sorprende la presencia de funcionarios de distintos entes públicos a su local, porque semanalmente “lo visitan”.

“Se van rotando, una semana es el Seniat, otra la Alcaldía, otra el personal de Corpoelec, incluso, pueden llegar todos el mismo día. Se aparecen con sus puntos de venta para ordenarnos pagar las tarifas impuestas o de lo contario, cortan el servicio de inmediato”, detalla.

Sucre se encuentra entre los tres estados más pobres de Venezuela. En la entidad oriental la productividad económica no ha salido a flote luego de la pandemia y las carencias se han agudizado, en medio de la vorágine económica que afecta el desarrollo de todos los sectores del país.

Pescadores sin gasolina, productores agrícolas sin incentivos, ni garantía de seguridad ciudadana; son el caldo de cultivo para entorpecer el avance de las actividades tradicionales. Sin embargo, los comerciantes y empresarios también han sido enfáticos al denunciar la inestabilidad legal, jurídica y tributaria que les aqueja.

La Cámara de Comercio Industria y Producción de Cumaná, ha rechazado el cobro indiscriminado de tributos municipales, así como el aumento exorbitante de las tarifas de servicios como electricidad, cuyas fallas persisten, el inconsistente servicio de agua y la recolección de aseo, que en muchos casos no tiene garantía de prestación. 

En consecuencia, en lo que va de 2023, el gremio confirmó el cierre de 23 empresas porque el costo de los servicios y la producción no va de la mano con los servicios de luz, aseo y agua. 

Paralelamente, al menos dos establecimientos adelantan estudios de mercado en otras entidades del oriente venezolano como Anzoátegui, porque aunque las tarifas de los servicios públicos también aumentan, tienen mayores beneficios económicos.  

Debemos entender que el estado de Sucre no tiene la bondad económica que otros estados del país. Además, estamos saliendo de una pandemia, con un bloqueo económico que nos afecta a todos y si no nos ponemos en sintonía, no haremos que la economía levante”, sostiene el presidente de la Cámara de Comercio Industria y Producción de Cumaná, Miguel Pazos.

Impagables

Pazos aseguró que los costos de los servicios son bastante elevados y en muchos casos, no llevan relación con el consumo de las empresas.

El dirigente sostiene que es necesario contratar servicios externos, que hagan evaluación del consumo para determinar si las tarifas son acordes a la dinámica económica y presenten un informe que realmente sea válido y genere consideraciones con los empresarios. 

Tratamos de llamar la atención de las autoridades para hacer propuestas que lleven a un cobro lógico, alejado de las arbitrariedades y que nos permita trabajar”, dijo.

Recientemente la representación gremial tuvo un encuentro con la directiva del Consejo Legislativo del estado Sucre (CLES), para que ejerzan su deber de auditar y supervisar a las instituciones públicas como Corpoelec.

“Los funcionarios se presentan a cobrar el servicio sin una autorización oficial. Debemos entender que Corpoelec es un monopolio de servicios y aunque la Constitución protege al ciudadano que no puede estar sin luz aunque no pague, pero los empresarios formales son atropellados”.

Representantes industriales han manifestado que el monto de su factura de electricidad en marzo fue de 55.000 bolívares y en mayo alcanzó los 135.000 bolívares, aunque el dólar no ha tenido un aumento considerable.

Tenemos el caso de un afiliado que tenía desde septiembre de 2022 un aumento constante de 46 y 48% todos los meses”, detalló el representante gremial.

Es así como los negocios pequeños pagan mínimo 20 dólares por el servicio eléctrico. 

Pese a todos los problemas enunciados, Pazos es optimista y confía en que las autoridades puedan reflexionar para finalmente, alcanzar los beneficios económicos que la entidad merece.

Sin embargo, al consultar la opinión del presidente de la Cámara de Comercio de Carúpano, Ihsan Saladino, sostuvo que la situación no es distinta en el eje pariano en el que la economía ha sido golpeada al igual que en el resto del país.

Mientras desde Fedeindustria Sucre mantienen la campaña por la inclusión de Sucre como Zona Económica Especial para la expansión de la Península de Araya con el puerto de aguas profundas, a través de proyectos como la puesta en marcha de tres camaroneras, la expansión de la empresa salinera, la construcción del complejo industrial de Araya y plantas procesadoras de la pesca.

Casos atípicos

Aunque el gremio ha denunciado el cierre de empresas, los sucrenses también han observado con curiosidad la reapertura de empresas que fueron tradicionalmente conocidas en la entidad.

Es el caso de la Heladería “La Rosita”, conocida como la más antigua de Cumaná, que reabrió sus puertas hace un mes luego de que en 2018, las dos sucursales del local bajaran sus santamaría en medio de la severa crisis económica.

Otra ha sido la dinámica de reconocidos centros comerciales como Express Mall que luego de 20 años de servicio, fue vendido por sus dueños debido a las dificultades para mantenerlo y reabrió sus puertas con nueva administración y nuevo nombre.


Participa en la conversación