Con motivo del octavo aniversario de Crónica.Uno, los líderes comunitarios, formados como cronistas populares, se sumaron a la fiesta y destacaron que el medio digital se ha convertido en una ventana de expresión de las comunidades para informar sus necesidades, las fallas de servicios públicos y lo positivo que sucede en sus sectores.
Caracas. “Cronica.Uno da voz a quien tiene voz, pero nadie los escucha”, “una labor de atender a la población”, “realiza labor de construcción de ciudadanía y es una ventana que nos ha permitido crecer”, “lleva a la opinión pública los grandes problemas de las comunidades”, “éxitos y que continúen las luchas” y “felicitaciones y que sigan informando los hechos como son”.
Estas son algunas de las expresiones recibidas de los cronistas populares Jimmy Pérez, de Petare; Carmen Blanco, de Filas de Mariche; Ángel Cacique, de Altavista; Alexis Cordero, del municipio Sucre e Ingrid Rodríguez, de El Valle.
Edward Ocariz, vecino de Coche, resaltó la formación recibida en Crónica.Uno y aseguró que, de esta forma, los vecinos tienen herramientas para contar lo que acontece en sus comunidades, como las denuncias y las acciones positivas.
Cronistas populares
Crónica.Uno nació en 2015 con un equipo pequeño, pero con grandes deseos de ser una tribuna para los ciudadanos. En 2017, periodistas del medio digital y de la organización no gubernamental Espacio Público diseñaron un programa de formación en redacción de noticias, fotografía y redes sociales para vecinos de la Gran Caracas. A partir de allí, se afianzaron enlaces entre líderes vecinales y periodistas.
En 2018, los líderes comunitarios solicitaron la creación de un espacio en el portal para contar lo que sucede en sus localidades. Así nació el programa cronistas populares. La primera publicación en la sección Cronista Popular se hizo el 15 de marzo del 2018: Niños usan como piscina obra inconclusa de Hidrocapital en Mamera.
Mirian Cuevas, vecina de La Pastora, es una de las fundadoras de la sección. Resaltó el apoyo de Crónica.Uno a las comunidades para informar las denuncias y acciones positivas.
Y con la llegada de la pandemia por la COVID-19, en marzo de 2020, se cambió la dinámica de trabajo. A través de las redes sociales se mantuvo el contacto con los líderes comunitarios y los cronistas populares para seguir contando los hechos como son.
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