Los cambios de turnos en los centros médicos son aprovechados por delincuentes para asaltar al personal, según declararon testigos. En los estacionamiento se ha vuelto común el robo de las motos y los afectados piden seguridad
Shaylim Castro/@ShayC_
Caracas. Mínimo una vez a la semana la Policlínica La Arboleda, en la avenida El Cajigal, es asaltada por grupos de hampones que le quitan las pertenencias a pacientes y al personal médico, según un taxista que trabaja en el lugar y por motivos de seguridad no reveló su nombre.
Según indicó, al parecer no cuentan con punto de venta adentro y esto obliga a las personas a pagar sus consultas en efectivo, lo cual aprovechan los delincuentes para dar el quieto, tanto dentro como fuera de las instalaciones.
“Ellos vienen armados y van pasando por los pasillos quitando el efectivo o pertenencias a los pacientes y al personal mientras están en las consultas”.
Detalló que hace una semana observó cómo una pareja de motorizados le cayó a golpes a una mujer que intentaron robar mientras salía de la clínica. Y lamentablemente, los vigilantes no pueden hacer mucho, ya que según él la mayoría son de edad avanzada y no cuentas con armas para hacer de frente a los malandros.
El personal médico también debe pensarlo muy bien cuando les toca salir de sus turnos, pues irse caminando a una estación del Metro o esperar camioneta en alguna parada es convertirse automáticamente en un blanco perfecto para un robo debido a la soledad de las calles.
Por eso, al llegar los cambios de turnos prefieren esperar a sus compañeros para luego irse en combo y sentir más seguridad, aunque en ocasiones no ha funcionado. Así comentó la encargada de un puesto cercano a la clínica, quien ya está acostumbrada escuchar los cuentos de enfermeros a quienes asaltan.
Expresó que hace tres meses unos delincuentes asaltaron a varios enfermeros que iban saliendo en horas de la noche. El vigilante al notar la situación no le quedó de otra que cerrar las puertas para que los hampones no robaran al siguiente grupo que iba de salida.
Debido a estas situaciones en las cercanías se ha creado un ambiente de zozobra y paranoia para los trabajadores, que deben pensarlo dos veces antes de salir de sus puestos de trabajos, sobre todo si son en horas de la noche.
Hasta 10 motos a la semana
Un taxista que labora en la línea del Hospital de Clínicas Caracas ha visto desde su puesto el robo de las motos que visitantes dejan estacionadas en la entrada.
Bajo anonimato expresó que a la semana fácilmente se pueden robar hasta 10 motos, pero tanto él como sus compañeros prefieren no hablar mucho del asunto ya que temen que los antisociales los tengan fichados, pues los mismos se la pasan robando en los alrededores. “Nosotros tenemos las llaves (de los taxis), pero ellos tienes las pistolas”.
En vista de esto prefieren hacerse los locos cada vez que ven algún robo, pues la única manera de ver la presencia policial “es cuando vienen algún ministro, porque traen a sus escoltas”.
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Foto: Angeliana Escalona
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