El corrimiento de tierra detrás del edificio Amposta, en Las Palmas, ha sido constante en las últimas semanas. Esto ha provocado el desalojo de una familia que vivía en la planta baja de la torre, debido a la cantidad de tierra que ingresó a su apartamento. El estacionamiento del edificio y las áreas públicas quedaron tapiadas. Tres vehículos también quedaron bajo la tierra.
Caracas. El 12 de septiembre, a la 1:30 a. m., los vecinos del edificio Amposta, en la parte alta de la urbanización Las Palmas, del municipio Libertador, escucharon los primeros ruidos que venían desde la colina que está detrás del edificio. Era tierra, rocas y árboles que se deslizaron hacia sus apartamentos y el estacionamiento, en donde habían tres vehículos estacionados que sufrieron daños.
Desde esa noche, para Mery Castro, vecina del piso seis del edificio, no ha sido fácil volver a dormir. Cada tanto se despierta sobresaltada, pues piensa que el cerro volverá a ceder junto con la estructura que está sobre él. Esa construcción es una casa que funciona como sede del Colegio de Profesores de Venezuela desde hace 60 años.
Estoy nerviosa de que los árboles sigan cediendo también y peguen contra las ventanas de los balcones. Ese es el temor que tenemos ahorita. Estoy muy nerviosa con todo lo que está pasando”, expresó Castro, vecina del edificio.
Otros deslizamientos
El 19 de septiembre hubo otro deslizamiento y el 28 de septiembre ocurrió el último, “mucho más fuerte”, —describieron los vecinos—, que trajo consigo mucha más tierra, rocas y árboles. Esto generó más pánico entre los habitantes de los 16 apartamentos que tiene el edificio Amposta, en cuyo primer piso aún queda una gran cantidad de barro.
“Quedaron tres carros tapiados. Dos de los vehículos los salvamos, pero tienen partes de la carrocería dañadas”, explicó Mary Bollero, propietaria de uno de los carros afectados y vecina del edificio.
La familia del apartamento de la planta baja, con dos niños menores de edad, tuvo que desalojar debido a la cantidad de tierra que entró por las ventanas. Los vecinos del edificio Amposta sostienen que la responsabilidad del derrumbe no solo es de las precipitaciones que han caído en Caracas durante las últimas semanas.
Durante estas lluvias hubo varios hundimientos de la capa asfáltica en vías públicas, caída de árboles, crecida de quebradas, entre otras consecuencias de la falta de mantenimiento a la infraestructura de la ciudad.
La mayor responsabilidad es de arriba, del Colegio de Profesores de Venezuela porque ellos tenían tuberías varias rotas y todo el agua filtraba por todo el cerro que se vino abajo”, declaró Bollero.
Lo que dicen desde el Colegio de Profesores
Desde el Colegio de Profesores, Raúl Bravo, secretario general de finanzas de la institución, declaró que ellos prefieren no emitir declaraciones al respecto y que van a esperar a que Protección Civil publique el informe final de lo sucedido, “qué es lo que va a determinar lo que realmente pasó y qué solución se le va a dar”.
No es que no hemos querido atender a los vecinos, es que no hemos sido invitados. Nada hacemos con pelear comunidad con comunidad”, añadió Bravo.
La sede del Colegio de Profesores de Las Palmas se mantendrá desalojada, al menos por tres meses, por recomendación de Protección Civil, explicó.
Desde el 28 de septiembre los vecinos del edificio Amposta se sienten en expectativa constante. “Estamos pidiéndole a todos los santos que no siga lloviendo”, comentó Bollero.
Sin embargo, este viernes continuaron las lluvias. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh), pronosticó nubosidad, lluvias, ráfagas de viento y actividad eléctrica durante este viernes en la región central del país, sobre todo en horas de la noche.
Las rejas y los vidrios de las ventanas del balcón de los apartamentos de Armando Cabrera y Pablo Pedreíra quedaron afectadas por el deslizamiento. Explicaron que luego del derrumbe del 12 de septiembre ellos intentaron contactar al presidente del Colegio de Profesores, Euribiades Verdú, pero “se hizo de la vista gorda”.
Autoridades de la alcaldía de Libertador han ido hasta el edificio Amposta y han hablado sobre la solución al deslizamiento. Los vecinos agradecen que hayan estado pendientes de lo sucedido, pero piden que “después de las palabras, puedan ver los hechos”.
Protección Civil
Hernan Matheus, director de Protección Civil del municipio Libertador, explicó este viernes a los vecinos que los trabajos de recolección de escombros están paralizados debido a las condiciones climáticas. Aún queda una gran capa de concreto que cuelga del terreno, apenas sostenido por algunas vigas. Esta situación preocupa a los vecinos del Amposta. Temen que el terreno termine de ceder e impacté con las rejas que bordean la entrada del edificio.
Ayer no pudimos terminar por la lluvia y con lluvia no podemos trabajar. Vamos a esperar a que baje la presión de la lluvia para continuar el lunes. Por los momentos vamos a terminar de poner la capa plástica sobre el cerro para evitar que se siga mojando el terreno”, explicó Matheus.
Otra explicación de Matheus para los vecinos fue que la capa vegetal que aún sigue sobre el cerro no seguirá cediendo, al menos no de manera tan rápida, según estudios que ha hecho Protección Civil – Libertador sobre el terreno.
Participa en la conversación