Hace un año se derrumbó la vía principal. Uno de los edificios ya tiene grietas. Las lluvias recientes se llevaron el cableado y todavía las promesas están en informes y proyectos.
Caracas. Justo esta semana se cumplió un año del derrumbe de la vía principal el urbanismo Cacique de la Misión Vivienda ubicado en Vista Alegre, La Paz.
Hace dos semanas los vecinos de los cinco edificios que componen el complejo cerraron la vía principal hacia El Junquito para demandar respuesta. Ya enviaron cartas al Instituto Municipal de Gestión y Administración de Riesgos de la Alcaldía de Caracas, Imgrad, exponiendo la situación. Incluyeron fotos del hundimiento, de las grietas que ya se están asomando en el edificio Caracas.
Son cinco edificios, 96 apartamentos, para un total de 480 familias que están reubicadas en ese urbanismo desde hace cuatro años.
Jesús Maita, vocero de la comunidad, indicó que el terreno tiene una socavación profunda que afecta, incluso, un colegio universitario que está en la subida de La Yaguara.
Y la gota que derramó el vaso: con las lluvias de hace dos semanas se quedaron sin luz. El cableado eléctrico estaba empotrado en la misma línea del tubo de agua matriz que quedó al descubierto con el derrumbe.
Por estar expuesto a la tierra y el agua terminó reventando y, a la fecha, no les han restituido formalmente el servicio.
Tres torres, las que están de cara a La Yaguara, fueron conectadas a un transformador, y las otras dos, que están cerca de Vista Alegre, reciben energía de una planta eléctrica que llevó Corpoelec. Una solución momentánea, apunta Maita.
De hecho, Dani Sánchez comentó que, luego de la protesta, representantes de la Alcaldía de Caracas fueron al lugar y mostraron un informe técnico con la posible solución para detener el derrumbe y canalizar de nuevo el servicio eléctrico.
Los vecinos, para aminorar los trámites burocráticos, iniciaron las obras civiles, una zanja donde enterrarán la nueva tubería de cables.
Los habitantes de este urbanismo son de Nueva Tacagua. Temen quedar damnificados ante la poca efectividad de las promesas de las autoridades.
Al parecer, en la reunión de hace dos semanas, se asomó el comentario de la falta de presupuesto. “El proyecto está, pero no el dinero, eso es lo que retrasa los trabajos y realmente no podemos esperar más”, acotó Maita.
El hundimiento de la vía los tiene prácticamente incomunicados. A eso se suman las filtraciones de aguas limpias y los pozos de aguas de lluvia, que están aumentando las familias de mosquitos. Ya hay varios casos de paludismo en el sector, de acuerdo con la información dada por el vocero.
Además, el derrumbe está socavando parte de las instalaciones del Colegio Universitario de Administración y Mercadeo. En esta institución no puede usarse el auditorio desde hace un año. Todos los días se llena de agua limpia hasta tres centímetros de altura y cuando llueve puede llegar al medio metro.
Rusela García, administradora, también estuvo en la reunión de hace dos semanas e igualmente escuchó lo del proyecto que está en puertas para estabilizar el cerro.
Sin embargo, el tiempo corre y las lluvias hacen estragos. Esta semana se les cayó una pared perimetral y ahora son más los espacios que tienen inhabilitados.
Unas 1200 personas, alumnos y profesores, esperan respuesta del gobierno local.
Fotos: Mabel Sarmiento Garmendia
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