Especialistas alertan que el abandono infantil se incrementó entre 20 y 30%

En el seminario “La desnutrición infantil, primera infancia en emergencia”, se informó que los casos de niños menores de cinco años con bajo peso dentro de las instalaciones hospitalarias superan 85 %.

Caracas. Se habla de niños muertos por desnutrición en la prensa nacional y se crea una conmoción colectiva, sin que se frene este flagelo que va creciendo a razón de 1 % cada mes, según la doctora nutricionista Susana Raffalli.

Y más allá de estos casos que son estadísticas negras, la especialista, quien participó en el seminario “La desnutrición infantil, primera infancia en emergencia”, destacó que el infante no solo está llegando con desnutrición aguda a los centros hospitalarios, sino que además lo están abandonando porque sus papás salen a sobrevivir en medio de la crisis actual. Destacó que este abandono se está incrementando y que la demanda de casas de abrigo subió entre 20 y 30 %.

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Además, mencionó que hay muchos niños huérfanos debido a un repunte del aumento de la mortalidad materna entre 2015 y 2016 en 65 %, y porque ahora se está generando otro fenómeno social denominado “movilidad humana”, que ocurre cuando los padres dejan a sus hijos con los abuelos y se desplazan a otras zonas en busca de alimento.

Este seminario —que versó sobre la desnutrición y la importancia de la lactancia materna— no solo sirvió de catarsis para los trabajadores de la salud, quienes contaron la grave crisis que se vive en los puestos de Emergencia; sino que también fue un espacio para que la doctora Raffalli ratificara algunas denuncias, como el hecho de que no hay reactivos para la realización de la carga viral en mujeres seropositivas al VIH y, por tanto, no pueden amamantar; y que las mujeres en estos momentos están bajo estrés excepcional como cuidadoras.

Al salir del seminario, los médicos trancaron la avenida San Felipe de La Castellana. Se sumaron a la acción convocada por la Mesa de la Unidad Democrática y demandaron declarar la emergencia alimentaria.

“43 % de los hogares del país son monoparentales femeninos. Eso incide en la alimentación en el hogar y, por ende, dificulta la lactancia. Entonces esto no se trata de observar las normas sobre la nutrición infantil que está en emergencia, no es promocionar la lactancia materna o apoyar la donación de fórmulas, lo que buscamos es proteger las fórmulas seguras y adecuadas para garantizar la nutrición que permitan asegurar la salvación y el bienestar de cada niño”.

La especialista destacó que la cuestión no es decirle a la madre que amamantar es bueno, ni explicarle cómo, sino garantizarle que pueda hacerlo y en caso de que el bebé solo pueda tomar fórmulas, velar porque cuente con toda la leche que requiera.

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Y por si fueran pocas las calamidades en el sector salud asociadas a la desnutrición infantil, indicó que la tasa de embarazo adolescente es alta, la segunda en la región: 95 mujeres entre 14 y 18 años por cada mil ha salido embarazada, y a ello se asocia la falta de anticonceptivos en más de 85%.

Ello sin contar que ahora hay brotes excepcionales de enfermedades infecciosas en el país.

Alerta en Venezuela

Raffalli compartió el panel con sus colegas Livia Machado, pediatra-nutrólogo; Eunice Lample, pediatra; Maritza Landaeta, también nutrólogo y Huníades Urbina, presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría. 

En este encuentro, la doctora Machado expuso la cruda realidad que se vive en los puestos asistenciales. Dijo que la desnutrición hospitalaria en menores de 5 años supera 85 %.

Denunció que no cuentan con un aporte regular de nutrientes calóricos y que además en las emergencias no se cumplen las dietas por pacientes, no hay fórmulas especiales, faltan los insumos y están llegando muchos niños con infecciones respiratorias y cuadros diarréicos.

Mientras que Lample se refirió al hecho de que en medio de esta crisis política-económica hay una silente que es la malnutrición.

Indicó que el país está en emergencia y que en ese estado hay casos de inseguridad, se incrementa la pobreza y hay mala higiene, lo que pone a la población en un alto riesgo, siendo la población infantil la más vulnerada “y de allí la importancia de la leche materna que funciona como un escudo. En ese sentido hay que iniciar una campaña nutricional. Es más fácil salvar vidas enseñando a comer. La madre puede estar desnutrida pero aún su leche tiene una carga de proteínas para su bebé”.

Lample, quien habló de los principios rectores para el manejo de la nutrición infantil en emergencia, comentó cifras oficiales que revelan que 80 % de las mujeres en el país tienen la lactacia materna como exclusiva. “Pero eso no es así, si acaso llega a 40 %”.

Relatoría en defensa de la infancia

Durante cuatro horas, especialistas de la Fundación Bengoa, del Capítulo Venezolano de la Sociedad Venezolana de Nutrición y del Observatorio Venezolano de la Salud disertaron sobre la problemática. Coincidieron que para frenar la desnutrición y las muertes infantiles urge promover en todos los espacios la lactancia materna.

Se comprometieron a elaborar propuestas y a aprovechar el mes de agosto, cuando se celebra la semana de la lactancia materna, para incluso lanzar por las redes sociales una campaña de educación.

Igual promovieron una comisión para organizar una mesa de trabajo con los representantes de la Unicef en Venezuela y de igual modo piensan reunirse con la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Como punto destacado mencionaron que deben reeducar a los médicos integrales comunitarios, pues han detectado fallas en el diagnóstico inicial en los ambulatorios. De hecho, denunciaron que les dicen a las mamás que amamantan que “no coman granos”, por ejemplo.

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