Desde que el Partido Comunista de Venezuela rompió filas con el PSUV en el 2020, el chavismo se ha enfocado particularmente en atacar a la tolda del gallo rojo, inhabilitando a sus candidatos, y amenazando con una posible intervención jurídica.
Caracas. Han pasado casi tres años desde que el Partido Comunista de Venezuela (PCV) rompió filas con el Gran Polo Patriótico y pasó a ser la única alternativa de la izquierda venezolana contra el gobierno de Nicolás Maduro. Desde entonces, este partido se convirtió en uno de los principales objetivos del Gobierno, lo cual pudiera culminar en los próximos días con la intervención del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) a la tolda del gallo rojo.
Fue el 18 de agosto de 2020 cuando el PCV, junto con otros nueve partidos de la izquierda, decidió “divorciarse” del chavismo y pasaron a formar parte de una nueva coalición política: La Alternativa Popular Revolucionaria (APR).
La APR nació con cuatro partidos políticos reconocidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE): Patria Para Todos (PPT), Tupamaros, Compromiso País (Compa) y el PCV. Para el momento en el que se escribió este artículo el PCV es el único que no ha sido intervenido por el TSJ.
Tupamaros fue intervenido el 19 de agosto de 2020, el PPT el 22 de agosto del 2020, y Compa el 25 del mismo mes. Esta situación dejó al PCV como el único partido de la APR con capacidad de postular candidatos, que no se alinean con el gobierno de Nicolás Maduro. Esto puede cambiar en los próximos días.
Henry Parra, un supuesto representante de las bases del PCV, encabezó una delegación de personas que introdujeron, el 10 de julio, un documento ante la Sala Constitucional para pedir la intervención del PCV y la designación de una junta directiva Ad Hoc. Es decir, el mismo tratamiento que en años anteriores se le dio a los otros partidos que forman parte de la APR.
De acuerdo con los argumentos de Parra, la actual directiva del PCV no cuenta con el apoyo de las bases y fue designada en un congreso en noviembre del 2022 que no representa la voluntad real del partido.
“Rechazamos la conducción política que le vienen dando a nuestro Partido Comunista, casi coincidiendo con la ultraderecha, nuestro partido lo han convertido en un partido de la ultraizquierda y siempre la ultraizquierda ha coincidido con la ultraderecha en sus postulados”, expresó Parra desde el TSJ.
El supuesto militante del PCV agregó que introdujeron el documento para exigir justicia “Estamos diciendo que se haga justicia en cuanto a que la actual junta directiva es ilegal, planteamos que se nombre una directiva Ad Hoc que se encargue de llamar a un verdadero congreso de comunistas”.
La respuesta desde la directiva del partido
Solo horas después de que Parra introdujera el pedido para la intervención del PCV, en el TSJ, la directiva del partido –electa en un congreso en noviembre de 2022 – rechazó lo ocurrido.
Oscar Figuera, diputado a la Asamblea Nacional y secretario general del partido, denunció a las personas que encabezó Henry Parra como “un grupo mercenario”, que actúa bajo órdenes de la cúpula política del PSUV.
Esta actuación del grupo mercenario significa un nuevo paso en el proceso de usurpación del PCV por parte de la cúpula del PSUV y por parte de sus marionetas mercenarias que vienen actuando en contra de los intereses del pueblo”, comentó Figuera.
Crónica.Uno contactó Héctor Rodríguez, uno de los miembros del buró político nacional del PCV, la máxima instancia de toma de decisiones del partido y este confirmó lo que expresó la directiva el pasado 10 de julio.
“Ningún militante del PCV está participando de estos actos. Esto es algo que se viene gestando desde el 2021, se trata de un vil montaje detrás del cual está directamente el vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, al promocionar a este grupo de personas ajenas a nuestra organización”, comentó Rodríguez.
“Muchos son militantes del PSUV”
Rodríguez afirmó que la mayoría de estas personas no solo son ajenas al PCV, sino que de hecho “muchos son militantes del PSUV”. Una afirmación que dijo se ha respaldado en varias ocasiones al mostrar pruebas como las planillas de inscripción de estas personas ante otras organizaciones políticas.
“Muchos de ellos son militantes del PSUV, de otras organizaciones como Somos Venezuela, ex militantes de Podemos. Hemos presentado un dossier para ver lo que publican, los eventos a los que asisten y toda la promoción que han recibido desde los medios públicos (…) Hay algunos casos muy interesantes que son funcionarios del CNE, de hecho cuando esto comienza en el 2021 se hace con una carta dirigida a Diosdado Cabello, esa carta la firma Carlos Fermín, quien es el director del CNE en el municipio Ezequiel Zamora en el estado Monagas”, describió Rodríguez.
Referente a Henry Parra, Rodríguez dijo que “en efecto fue militante del PCV por muchos años”, pero agregó que en el año 2021 fue expulsado por “romper con la línea electoral del PCV para ir a apoyar a FReddy Bernal como candidato a la gobernación de Táchira”.
“El PCV lo expulsó (A Parra) por tratar de dividir al partido, eso fracasó, él se fue y fue expulsado”.
Rodríguez agregó además que el PCV actuará “evaluando todas las acciones legales en lo nacional” y además desde el plano internacional transmitiendo “la verdad de lo que está pasando con nuestra organización”.
La posible intervención política del PCV tendría como una principal consecuencia que la APR ya no tendría tarjetas electorales para postular candidatos de la izquierda política venezolana que sean críticos ante Nicolás Maduro.
Sobre esto, Rodríguez dijo que aún sin la tarjeta el PCV “se mantendrá en la política de deslinde con el Gobierno” que encabeza Nicolás Maduro y al cual calificó como “neoliberal” en especial en el plano laboral con la “destrucción de los salarios y las prestaciones sociales de los trabajadores”.
En la agenda del PCV uno de los próximos eventos que se realizarán será un encuentro pautado para el 22 de julio como parte de “la lucha del movimiento obrero”. Se espera que para este evento acudan más de 400 delegados de diversas organizaciones políticas de izquierda que no están alineados con el PSUV o el Gran Polo Patriótico.
“Nada nuevo cuando hay elecciones en el horizonte”
Para el politólogo Fernando Spiritto, lo que ocurre con el PCV no es “nada nuevo”, en especial cuando hay elecciones en el horizonte, como en efecto ocurre de cara a las presidenciales del 2024.
“El Gobierno (de Maduro) juega muy duro a la política, en especial cuando hay elecciones a la vista. Saben que son una minoría política en el país, están leyendo las encuestas, y por eso buscan las mejores condiciones para participar”, explicó.
Agregó que hay alta una posibilidad de que se suspenda la primaria. Buscan tener un candidato a la medida, por eso van a sopesar el tema de inhabilitaciones al estilo Nicaragua. Forma parte de lo que quieren establecer para las presidenciales”, comentó Spiritto.
Referente al ensañamiento de varios años del PSUV contra el PCV, el académico señaló que forma parte del deseo del madurismo de “monopolizar la izquierda en el país”.
Los comunistas son una espinita que tienen en el lado izquierdo. Ellos quieren monopolizar todo lo que es la izquierda. Pero no son un partido de izquierda, solo son un partido que quiere poder. Ellos se han hecho pasar por la izquierda toda la vida y por eso ver un partido verdaderamente de izquierda oponiéndoles es algo intolerable para ellos”, comentó.
Finalmente, Spiritto dijo que es muy poco probable que, una vez se concrete la aparente toma judicial del PCV, el gobierno vaya a sufrir algún costo político en el país.
“No creo que haya algún tipo de costo político. Eso ya se pagó con la intervención de partidos más importantes como Primero Justicia o Acción Democrática. Hay pocos dolientes para el PCV en el país”, comentó.
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