La construcción pública lleva dos años y medio en picada

En el segundo trimestre la actividad del sector público tuvo un caída de 30%, de acuerdo con los datos oficiales. La construcción privada retrocedió 5%

Mayela Armas/@mayearmas

Caracas. Los motores de la economía se fundieron. Tras el lanzamiento de la Gran Misión Vivienda, las autoridades dijeron que la construcción tendría un gran impulso, pero el repunte duró poco y desde 2013 este sector, que es uno de los mayores generadores de empleo, está en picada.

En el segundo trimestre del año la construcción pública retrocedió 30% y con ese resultado lleva 10 trimestres de caída, de acuerdo con datos del Banco Central y de los despachos de Vivienda y Transporte.

¿Por qué ese retroceso?

Aunque el discurso de las autoridades se centra en destacar el avance en vialidad, transporte y vivienda, la propia información oficial revela que hay proyectos de infraestructura con una lenta ejecución y, por ello, la cifra negativa.

Fuentes del sector construcción indican que la notificación realizada por el Gobierno a las contratistas fue terminar aquellas obras que se fueran a inaugurar en el marco de las elecciones del 6 de diciembre como puentes y ampliaciones de autopistas.  De manera que el resto de los proyectos quedó fuera de las prioridades.

En la construcción pública el mayor peso lo tiene el área petrolera, y según las fuentes consultadas, varias obras asociadas a los programas petroleros van a un ritmo lento por el descenso en los precios del crudo.

En materia de vivienda, la producción no va a paso de vencedores. La meta contemplada para este año es de 400.000 casas y de esa cantidad se ha culminado el 37%, de acuerdo con los reportes oficiales.

El presidente Nicolás Maduro aseguró que este año entregará la vivienda un millón, pero ese número abarcará la casas realizadas desde 2011 (inicio de la Misión Vivienda) hasta 2015 por los entes oficiales, las empresas privadas y el poder popular (rehabilitación y autoconstrucción).

Las fuentes indican que en transporte también hay dificultades, especialmente con los ferrocarriles y las líneas de metro.

La lentitud en varias obras en parte responde a los retrasos en las asignaciones de recursos por parte del Gobierno. Al inicio del 2015, el jefe de Estado anunció la inyección de dinero para planes en transporte y vialidad, sin embargo, los desembolsos han sido a cuentagotas.

A ese atraso en la entrega del dinero, se suman las fallas en el suministro de insumos.

Las obras públicas se enfrentan a una menor disponibilidad de materiales como cemento, cabillas y otros productos de acero, debido a que las empresas estatales que los fabrican están operando a una menor capacidad.

Esa baja producción de insumos también impacta en los proyectos privados. Los datos oficiales revelan que la construcción privada en el segundo trimestre del 2015 cayó 5%.

La actividad privada ya tiene 22 trimestres negativos. Las pocas obras que las empresas están ejecutando están más vinculadas al área comercial que a la de vivienda.


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