Crearon un movimiento llamado Creamusical, el cual rompe con el modelo de aprendizaje tradicional de música, no tiene límites de edad ni tiempo de formación. Se han expandido a las comunidades populares y están en busca de un objetivo: que los alumnos se identifiquen con la teoría musical y un instrumento de preferencia.
Caracas. Con una metodología innovadora, sin límites y alejado del modelo tradicional de enseñanza musical, Mary Isabel Cosme y Henry González decidieron iniciar su propio emprendimiento en 2016: Creamusical. Ahora, comparten su experiencia y talento en comunidades populares como La Vega y Caricuao.
“La mejor manera de enseñar música es de manera natural, es decir, como aprendes a hablar, a caminar o comer. Nuestro trabajo en las comunidades es un sentido de responsabilidad social que brinda a los jóvenes la oportunidad de iniciar su formación a bajo costo. Tratamos de innovar ante una enseñanza que por años ha sido muy rígida y cuadrada. Nosotros tenemos un método más flexible, personalizado e incluso más humano”, afirmó Cosme.
Creamusical es un movimiento que rompe con el modelo tradicional de música, en el que un estudiante debe tener muchos años de experiencia para su formación. Cosme y González se dieron cuenta de que cualquier persona puede iniciar su camino en este ámbito y que jamás es demasiado tarde para empezar.
“Por varios años había pensado en tener mi propia escuela de música. Siempre tenía las ganas, pero no sabía por dónde comenzar. Mary me motivó a hacerlo de manera más tangible”, indicó González, profesor especializado en Educación Musical con 18 años de experiencia.
Afirmó, además, que tampoco se requiere experiencia previa para aprender a tocar un instrumento, cantar, escribir o leer el lenguaje musical. Todos pueden aprender. Los principales instrumentos que imparten son guitarra, cuatro, mandolina, violín y flauta.
Si una persona de 50 años quiere aprender música y por alguna razón alguien le dijo que no era bueno, pero aun así desea indagar en este ámbito y tiene ese interés, se puede inscribir. Tenemos varios alumnos mayores de 40 años. El oído musical es algo que puede desarrollarse. Lo único que debe tener es la intención y las ganas de obtener mayores conocimientos”, agregó Cosme.
Su motivación principal: los alumnos
Mary, quien también es directora general de su emprendimiento, dijo que su principal aspiración es que los alumnos se identifiquen con la teoría musical y con su instrumento de preferencia.
“Recuerdo que comenzamos en unas vacaciones escolares. En ese momento impartíamos clases particulares y desde allí fuimos creciendo. Luego empezamos a buscar los espacios para expandirnos en las comunidades. El primer concierto que tuvimos fue en Navidad con cinco niñas. Ya ofrecimos nuestro tercer concierto y vamos por más”, aseguró.
Ahora, Cosme y González han crecido en las comunidades populares, por lo que en estos momentos cuentan con un aproximado de 50 estudiantes de varias edades.
El programa de Creamusical contiene distintos niveles de enseñanza: maternal, kínder musical (de 3 a 6 años) y preparación musical para aquellas personas que jamás han tenido experiencia en lectura o escritura.
Adicionalmente, dos jóvenes colaboran con Mary y Henry. Ellos aún continúan su formación y mientras, con el conocimiento adquirido, educan con la tutela del profesor González.
La sede principal de Creamusical se ubica en Chacaíto. Todas las clases duran tres horas. Generalmente, se imparte instrumento, preparación musical y canto. Otro núcleo se sitúa en el colegio Fe y Alegría Andy Aparicio, parte alta de La Vega, en la parroquia San Alberto Hurtado, allí están los miércoles. Mientras que en Caricuao las actividades musicales son los jueves en el liceo Benito Juárez.
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