Playas de La Guaira atraen a visitantes capitalinos durante el último fin de semana de vacaciones

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Para los visitantes capitalinos y otros habitantes de los estados centrales del país, cualquiera de las 64 playas de La Guaira resultará una opción viable este último fin de semana de vacaciones escolares. Paralelamente, se ha activado un plan de resguardo para los que se desplazan por la autopista Caracas-Litoral.

La Guaira. A pocos días de iniciar un nuevo año escolar, las playas de La Guaira siguen representando una opción para los turistas capitalinos, ya que les permite ahorrar costos, sobre todo a los grupos familiares.

La fórmula luce atractiva: disfrutar del sol, el mar y la arena, liberarse del stress y regresar a casa el mismo día, a través de los 17 kilómetros de la autopista Caracas-Litoral.

Si los temporadistas se desplazan en transporte público, el servicio no solo llega hasta las principales ensenadas marinas sino que también se ofrece el retorno hasta la ciudad capital desde los balnearios.

Sigue siendo lo más barato si uno se trae su comida de la casa. Así disfrutamos de la playa cerca de Caracas y todos somos felices”, expresó Oly Piñango, quien se ha propuesto ir a Playa El Yate, en Caraballeda, al este de la región.

Confluencia del río y el mar

A lo largo de 170 kilómetros de costa marina, hay 64 playas habilitadas por el Ministerio de Ecosocialismo (otrora Ambiente), así como cuencas fluviales que suelen entusiasmar a los visitantes: Naiguatá, Camurí Grande, Los Caracas; Osma, Oritapo, Todasana, La Sabana y Chuspa.

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Un conjunto de “ojos de gato” y reductores de velocidad fueron instalados al final de la autopista Caracas-La Guaira, para evitar accidentes viales. Foto Cortesía

Los mencionados ríos tienen su desembocadura en el mar Caribe y ello, igualmente, llama la atención de los visitantes, incluso de quienes acceden por la localidad de Chuspa (límite con el estado Miranda) desde Río Chico.

La posibilidad de bañarse en la playa y en el río es definitivamente mágica”, dijo Cornelio Iriarte, encargado de un kiosco que ofrece empanadas de cazón, pescado frito y tostones en el balneario de Todasana.

En el abanico de playas del oeste del Litoral Central, destacan el balneario de Catia La Mar, Marina Grande, Q-lito, Verde y Vasito, mientras que en el este suelen ser muy concurridas las del Paseo de Macuto, San Luis, el Yate, Los Cocos, Caleta, Escondida; el balneario de Naiguatá, Los Ángeles, Pantaleta y el balneario de la ciudad vacacional de Los Caracas.

Para este último fin de semana de vacaciones escolares, las autoridades nacionales y regionales han establecido una serie de dispositivos de seguridad en las principales playas.

La prevención comenzará desde el final de la autopista Caracas-La Guaira, en el punto de control de El Trébol, en Maiquetía. Allí se medirá la velocidad de los autobuses, motos y otros vehículos particulares.

Entre julio y septiembre, en esa pendiente vial (de 1,5 kilómetros de extensión entre el final de la autopista y el principio de la avenida Carlos Soublette) ha habido una decena de accidentes, luego de que conductores de buses y camiones de carga se quedaran sin frenos.

En ningún caso, los choferes confiaron en la rampa de frenado que se ubica a 500 metros del referido punto de control. Ello fue evidenciado en un reportaje que se publicó el pasado 7 de septiembre en Crónica.Uno.

Con el hándicap en contra en este aspecto, la gobernación de La Guaira colocó nuevas señalizaciones, ojos de gato y reductores de velocidad, con el propósito de disminuir las colisiones que causaron las heridas de ocho personas en el aludido lapso.

“La idea es que quien venga para las playas de La Guaira pueda llegar sin problemas a su destino, para recrearse con sus familiares y amigos”, señaló un funcionario de la Policía de La Guaira en el puente del distribuidor El Trébol.

En esas labores, acompañan los agentes de las policías Nacional y del municipio Vargas, así como de la delegación regional del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas. El Ministerio para Relaciones Interiores, Justicia y Paz busca el descenso de los accidentes en ese espacio de pendiente vial, a través de la campaña “Prevenir es vivir”.


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