Representantes de Colombia y Venezuela “chocan manos” en Cúcuta pero siguen sin definir apertura de la frontera

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Durante un encuentro binacional en Cúcuta el ministro colombiano dijo que de reabrir y retomar el flujo comercial entre ambos países este podría duplicar los ingresos del año pasado hasta llevarlos a $630 millones o incluso pueden elevarse a $1200 millones. Los empresarios venezolanos pidieron institucionalidad y formalidad para competir en igualdad de condiciones.

Caracas. Un día antes de que se cumplan siete años del primer cierre de la frontera entre Colombia y Venezuela autoridades y gremios empresariales se reunieron en Cúcuta para juntar las manos con sus pares luego de años de tensión y del cese del intercambio comercial.  

“Acuerdo de la Frontera” es el nombre del encuentro que reunió a embajadores, ministros y a las cámaras empresariales este jueves 18 de agosto. Los ministros de Transporte y de Comercio de Colombia adelantaron que están listos para que se dé el intercambio de mercancías por los puentes y que esperan que este duplique las ganancias del año pasado. 

“No vamos a tener ni las fronteras cerradas ni las relaciones rotas”, apuntó el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña, durante una rueda de prensa. 

Umaña dijo que hasta ahora lo que hay entre ambos países es una “integralidad” sobre reabrir las fronteras, pero que todo depende de las conversaciones que de llevan a cabo entre las fuerzas militares -mientras esperan autorizaciones de ambos presidentes-, entre las autoridades de transporte, comercio y Cancillería.

El Ministro de Comercio, Industria y Turismo indicó que el paso que dan ambas naciones no se trata solo de comercio, sino de construir una integración real como la que hubo en el pasado.

“Nos tenemos que convertir en los primeros vendedores de los productos venezolanos y ese es mi primer compromiso como ministro de Comercio. Ir hacia la integración. La verdad es que nunca habíamos estado más unidos, llenos de esperanzas y de certezas sobre que hay un futuro mejor”, expresó Umaña. 

El representante de la cartera de Comercio dijo que aspiran a que este año los ingresos formales por el intercambio entre ambos países se dupliquen. En ese sentido, se refirió a que en todo 2021 se generaron $315 millones, mientras que entre enero y junio de 2022 este ya alcanzaba $316 millones.

Es decir este año si no se abre la frontera será más, pero si se abre la frontera será todavía más. Vamos a tener un comercio del doble de $630 millones, apuntó Germán Umaña, quien hace días también dijo a medios que este podría incluso llegar a $1200 millones.

El Ministerio de Comercio dijo que en este momento hay cuatro agencias aduaneras habilitadas para arrancar con el comercio, pero advirtió que este va a ser gradual y progresivo. “Sí existe la habilitación de empresas para hacer las importaciones y exportaciones, podríamos tener preparadas una seis tractomulas (gandolas), estamos preparados y tenemos lo suficiente para dar esa transferencia hacia lo legal”.

Por parte de Venezuela el presidente de Fedecámaras insistió en que era necesario recuperar la institucionalidad para lograr un ambiente de iguales condiciones, tanto para los empresarios locales como colombianos. 

“Queremos vernos como socios, como aliados comerciales, que podamos desarrollar proyectos de largo aliento. Queremos que sea una relación mucho más orgánica y que trascienda el mero hecho económico, que no nos quedemos en la mera apertura”, dijo Carlos Fernández representante de la patronal.

Sobre si quienes participan en el limitado comercio actual reciben sus pagos, el ministro de Comercio colombiano aclaró que sí se les está pagando y que existen los mecanismos legales de control de cambio de ambos países para pagar las exportaciones.

Hay diferentes mecanismos de pagos internacionales legales y en general estamos trabajando con pago anticipado, tanto de exportaciones como de importaciones, y en este momento no hay un solo dólar de deuda por el comercio internacional entre Colombia y Venezuela, apunta Umaña.

El Ministro de Comercio también mencionó que los empresarios colombianos con el apoyo de sus cámaras están atentos a que el intercambio actual con Venezuela no esté sujeto a sanciones y que puedan trabajar tranquilamente. “Esto va a crecer en la medida en que se llegue a una profundización de las negociaciones en el tema de las sanciones”, dijo. 

Con respecto a las deudas que en el pasado Venezuela llegó a tener con empresarios colombianos, Umaña respondió que estas se acercaron a $1300 millones y que fueron canceladas. Lo que quedó fueron deudas por $150 millones en el Banco Central de Venezuela que eran “pagadas en su momento”.

Sobre deudas con la aerolínea Avianca dice que esto se ha resuelto internamente y que es “tan cierto”, que lo demuestra el hecho de que esta compañía pidió recientemente una autorización a la Aeronáutica Civil de Colombia para retomar los vuelos a Venezuela.

Presencia del embajador

El embajador de Colombia ante Venezuela Armando Benedetti estuvo en el encuentro y se refirió a la necesidad de mejores precios en fertilizantes y rubros esenciales para Colombia como el maíz el cual importan desde Canadá. 

Mientras Benedetti mantenía esta reunión en Cúcuta la Asamblea Nacional, controlada por el gobierno de Maduro, convocó a una sesión extraordinaria en la que autorizaron por unanimidad la designación de Félix Plasencia como embajador de Venezuela en Colombia.

Puentes bajo revisión 

El Ministro de Transporte colombiano, Guillermo Reyes, dijo que la movilidad de las personas en los puentes fronterizos es un tema prioritario  y que han hecho las revisiones para constatar que estén en “condiciones estructurales adecuadas”, en ese sentido, explicó que el puente de Tienditas está listo para ser usado.

El encargado dijo que se deben establecer varias cosas de especial interés: cómo va a ser la movilidad de personas, los horarios, los parqueaderos (estacionamientos), y la seguridad para que nadie se vea afectado.

Representantes del comercio están preocupados

Por su parte,  presidenta de Consecomercio, Tiziana Polesel, mostró preocupación debido a que recordó que fueron siete años de relaciones interrumpidas y en las que perdieron mercado. “Hay que empezar de cero”.

Polesel manifestó que no buscan fortalecer las relaciones actuales que se sustentan en la informalidad, sino restablecer relaciones institucionales y formales, que es lo que brindará igualdad de condiciones para competir y que ambos países se vean beneficiados.

La representante gremial y varios de los voceros se refirieron al contrabando que se da en la zona, lo que generaría una diferencia de precio del 40 % entre un producto nacional que sí paga tributos y uno que no.


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