Manuel Rosales, que se había reunido a comienzos de mes con el embajador James Story en Colombia, dijo que si las conversaciones entre Miraflores y la Casa Blanca abren la ruta para la reactivación económica, son bienvenidas. Nicolás Maduro aseguró que el encuentro constituyó “una nueva oportunidad” en las relaciones bilaterales. Dirigentes republicanos y demócratas rechazaron el acercamiento de Biden a Maduro.
Caracas. Los partidos políticos de oposición Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia recibieron con buenos ojos el acercamiento de la Casa Blanca a Miraflores, en el contexto de una posible reanudación del diálogo en México y la reapertura del intercambio comercial entre Venezuela y Estados Unidos.
El presidente de UNT y gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales, calificó la iniciativa como “correcta” y consideró que de allí saldrán “buenos frutos”. En su opinión, es momento de “examinar el camino político de los últimos años y adecuar la lucha a las nuevas realidades sin complejos, sin vacilaciones ni dilaciones”.
En el marco de los actos por el XVI aniversario de UNT realizados hoy en Zulia, Rosales recalcó: “Si las conversaciones sirven para facilitar los caminos legales y que retornen a Venezuela las inversiones petroleras, se eliminen obstáculos al sector comercial, industrial y agropecuario, yo lo aplaudo. Si ayudan a la construcción del Zulia productivo, yo lo aplaudo. Si sirve para que miles de venezolanos vuelvan a casa, yo le tributo mis más emocionadas ovaciones”.
El pasado 1° de marzo se conoció que Rosales junto a los gobernadores de Cojedes y Barinas, Alberto Galíndez y Sergio Garrido, respectivamente, se reunieron en Colombia con el embajador de Estados Unidos para Venezuela, James Story para abogar por el reinicio del diálogo como paso necesario en el camino hacia la reapertura de inversiones extranjeras en Venezuela.
Esta reunión se dio al margen de la Plataforma Unitaria y del gobierno encargado, que hasta ese momento eran las instancias de interlocución opositora por excelencia. Pero los resultados de las elecciones del 21-N y del 9-E parecen haber comenzado a empujar una redimensión del liderazgo opositor.
Primero Justicia enfocado en condiciones
Por su parte, Primero Justicia emitió un comunicado en horas de la tarde de este 8 de marzo “ante los encuentros del gobierno de los Estados Unidos de América y el régimen de Nicolás Maduro” en el que recalca que siguen comprometidos con la negociación como mecanismo para restablecer la democracia en Venezuela.
En ese sentido, PJ aspira a que se retomen cuanto las conversaciones en México en los términos del Memorando de Entendimiento suscrito entre la representación de Maduro y la Plataforma Unitaria el 13 de agosto de 2021.
El partido dirigido por Julio Borges, que se apartó del gobierno encargado de Juan Guaidó en diciembre, enfatiza, como lo hizo en su pronunciamiento el pasado 22 de febrero, en la necesidad de que el proceso liderado por Noruega sirva para construir “mejores condiciones electorales para unas elecciones presidenciales libres y competitivas”.
Entretanto, el gobierno encargado de Juan Guaidó, que este lunes 7 de marzo había confirmado la reunión y había ofrecido la difusión de un comunicado informativo sobre el encuentro, a las 7:00 de la noche de este 8 de marzo aún no había reaccionado públicamente.
Rechazo bipartidista en Estados Unidos
Mientras tanto en los Estados Unidos, la visita ha causado la reacción de rechazo por parte del Partido Republicano, opositor a Joe Biden, así como de sus principales figuras políticas: “La misión oficial de la administración Biden a Venezuela, con el objeto de implorar ante el dictador asesino Nicolás Maduro por petróleo, no solo fue recibida como una bofetada por los productores estadounidenses, sino también como una ofensa y un acto de traición por los miles de venezolano-estadounidenses”, aseguró la organización.
Entretanto el senador demócrata y presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense, Bob Menéndez, dijo que “las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano, al igual que el coraje del pueblo de Ucrania, valen mucho más que unos pocos miles de barriles de petróleo” y emitió una completa declaración sobre el asunto.
Nueva oportunidad
Nicolás Maduro confirmó el encuentro del sábado en una alocución difundida este lunes por la noche, durante una reunión en Miraflores con el Consejo de Vicepresidentes, el Alto Mando Militar y el Alto Mando Político.
El dirigente oficialista calificó la reunión de “respetuosa, cordial, muy diplomática”, y enfatizó que la cita constituye “una nueva oportunidad” en las relaciones “entre el gobierno de Estados Unidos y el gobierno venezolano” que él encabeza.
Como se sabe, desde comienzos de 2019, Venezuela y Estados Unidos rompieron relaciones diplomáticas a raíz del apoyo y reconocimiento que el gobierno de Donald Trump en ese momento, dio a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela. Desde entonces no se había producido un encuentro de tan alto nivel entre Miraflores y la Casa Blanca.
Maduro dijo que el encuentro duró casi dos horas, que se abordaron “temas de máximo interés de Venezuela y del mundo” y que estuvo acompañado por el presidente de la Asamblea Nacional electa en diciembre de 2020, Jorge Rodríguez (y no por Delcy Rodríguez como informaron las agencias el sábado y el domingo), y por su esposa, Cilia Flores.
“Estuvieron los dos, conocen los detalles de todo lo que se conversó, temas de interés que hemos acordado trabajar en una agenda hacia adelante. Me pareció importante poder conversar cara a cara temas de máximo interés de Venezuela y del mundo”, dijo Maduro.
Como se recordará, dos sobrinos de Flores, Efraín Campo Flores y Francisco Flores de Freites, fueron detenidos por la DEA en Haití en 2015, extraditados a Estados Unidos, enjuiciados y condenados por intentar ingresar 800 kilos de cocaína a ese país.
Nicolás Maduro y dio a entender además que el encuentro marcó el inicio de un nuevo espacio de acercamiento con la Casa Blanca:
“Ratifico toda nuestra voluntad para, desde la diplomacia, el respeto y la máxima esperanza de un mundo mejor, poder avanzar en una agenda que permita el bienestar y la paz de los pueblos del hemisferio y la región, de América completa, Latina y del Caribe. Continuar hacia adelante las conversaciones, las coordinaciones y una agenda positiva entre los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela. Los temas que se acordaron, se acordaron. Seguiremos adelante”.
Además instruyó a Jorge Rodríguez a convocar una rueda de prensa para dar más información sobre el encuentro. El equipo de comunicaciones de la AN oficialista informó este martes a las 7:20 de la mañana que en efecto Rodríguez ofrecería una rueda de prensa en el transcurso del día; pero tres horas más tarde informaron que la convocatoria se suspendió, sin más detalles.
En el marco de la misma reunión Maduro dijo que decidió “reactivar con mucha fuerza el proceso de diálogo nacional con todos los factores políticos, sociales, económicos, religiosos, culturales del país” y agregó: “El diálogo de México recibió un golpe tremendo, pero si estamos pidiendo diálogo para el mundo tenemos que dar el ejemplo en el país”.
Por otra parte, aseguró que Venezuela podría recuperar su capacidad de producción de petróleo “una vez recuperada Pdvsa a nivel básico, para crecer uno, dos, tres millones de barriles de petróleo, si hiciera falta, para la estabilidad del mundo”.
Conversaciones en curso
Ya ayer en la tarde la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, confirmó a los medios de comunicación acreditados para su rueda de prensa diaria que en efecto una delegación de alto nivel de su país se reunió en Venezuela con Nicolás Maduro el sábado.
Dijo que se trata de “una conversación en curso”, de varios temas, entre ellos el energético y los estadounidenses detenidos en Venezuela: “Una variedad de temas que incluyen ciertamente seguridad energética, pero también discutir salud de ciudadanos estadounidenses detenidos”, dijo Psaki a los medios.
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