Janer Sanabria de Fuerza Vecinal y el MAS, Kelly Paredes de AD-Ramos Allup y Pedro Vegas de PJ competirán por la candidatura de la Plataforma Unitaria a la Alcaldía de Cristóbal Rojas (Charallave) en el estado Miranda. La incorporación de Súmate a última hora como organizador de la consulta, a solicitud del G4, hizo declinar a tres de los siete precandidatos. Uno de los aspirantes se retiró porque contrajo la COVID-19. El G4 vetó el concurso de la Alianza Democrática. Se habilitarán cinco centros en las dos parroquias.
Caracas. Los más de 140.000 habitantes del municipio Cristóbal Rojas (Charallave) del estado Miranda, están invitados a participar este domingo 19 de septiembre en las elecciones primarias para elegir al candidato de la Plataforma Unitaria en esa jurisdicción.
De los más de 15 aspirantes que iniciaron la carrera electoral hace tres meses, la comisión organizadora de las primarias logró ir depurando el listado y la semana pasada solo siete de ellos suscribieron el acuerdo para participar en la consulta popular. Sin embargo, luego de abierto el proceso de inscripción de precandidatos, solo se registraron tres contendores: Janer Sanabria de Fuerza Vecinal y el MAS, Kelly Paredes de AD-Ramos Allup y Pedro Vegas de PJ.
Arturo Salazar, integrante de la comisión preparatoria, explicó a Crónica.Uno que los otros cuatro precandidatos declinaron participar en las primarias por distintas razones personales y políticas.
Carlos Arteaga, de la organización Compa (Alianza Democrática), contrajo la COVID-19 y está de reposo: “Él informó que por su condición de salud no seguiría en el proceso en campaña, pero está dispuesto a sumarse al candidato ganador de primarias”, dijo Salazar.
Arsenio Revette, candidato de Copei intervenido por el TSJ y postulado por la Alianza Democrática, decidió no participar (aunque la semana pasada había firmado el acuerdo) y dijo que esperará el resultado del domingo para luego definir al abanderado opositor: “Yo no me he negado ni me negaré a buscar la candidatura unitaria, espero por este proceso y que de ahí salga un abanderado, una vez que eso se produzca, nos medimos en un proceso de mutuo acuerdo para elegir un candidato único de la oposición”.
Mientras los otros dos precandidatos, Pabla González (Unión Progreso, partido de Eduardo Fernández) y Simón Carlos De Castro (Min Unidad) afirmaron que respaldarían al ganador del domingo, pero no competirán.
Ellos están en desacuerdo por la manera que se cambió el proceso, que pasó de ser autónomo de la sociedad civil a uno con la intervención de la ONG Súmate, organización que impuso condiciones políticas que limitan la participación abierta”, explicó Arturo Salazar.
Denuncian secuestro del proceso
Con respecto a lo ocurrido con Súmate, Salazar explicó que luego de firmados los acuerdos la semana pasada, el G4 y el partido Primero Justicia pusieron condiciones: primero, que la ONG Súmate fuera la organizadora de la parte logística de la consulta y segundo, que no participaran candidatos de la Alianza Democrática, integrada por los partidos secuestrados por el Tribunal Supremo el año pasado.
“Básicamente fue una imposición del G4: si no participaban con Súmate manejando el proceso, Primero Justicia no participaba en las primarias aun cuando ya hubiese aceptado y no serviría de nada las primarias sin ellos. Nos llamaron para decirnos que sencillamente aceptábamos de esa forma o no concurrirían. Además, el G4 dijo que la Plataforma Unitaria no participaría en una misma primaria con la Alianza”, denunció Salazar.
De hecho, tuvieron que forzar la barra del G4 para que permitieran competir al candidato del MAS.
Salazar recordó que el comité organizador de las primarias ya había avanzado no solo en persuadir a los precandidatos de construir la unidad para tener una verdadera oportunidad de disputarle la plaza al PSUV, sino que también habían diseñado sus reglamentos internos tanto de campaña como del proceso de inscripción de candidatos, votación y escrutinio de votos. Todo de forma autónoma, organizado 100 % por las comunidades.
“Pero cuando ya teníamos todo, PJ recibió la instrucción de que ellos no podían participar en las primarias, sino que tenían que lograr un acuerdo con el candidato de AD-Ramos Allup y ese acuerdo consistía en medirse por el sistema de encuestas, aun cuando el candidato ya había aceptado medirse en primarias. La otra exigencia era que esa encuesta solo se podría hacer para medir a AD y a PJ”, indicó el dirigente del MDI en Charallave.
Explicó que luego de conversaciones con dirigentes regionales y nacionales y finalmente lograron que el G4 y PJ accedieran a participar, pero bajo sus condiciones, lo cual generó gran frustración en los vecinos y dirigentes locales que durante los últimos meses trabajaron para llevar adelante el proceso.
“Fue toda una componenda, un manejo turbio para imponer sus normas a la comunidad”, dijo el dirigente del Movimiento Democracia e Inclusión.
Datos técnicos y costos
- En total se instalarán cinco mesas de votación en las dos parroquias de la localidad, Las Brisas y Santa Rosa.
- El proceso contará con la participación de la Red de Observadores Electorales y se conformó un comité electoral integrado un representante de cada comando y tres representantes de la sociedad civil de Charallave.
- El costo global del material electoral, que lo suministra Súmate, fue de 2500 dólares, equivalente a 500 dólares por cada mesa de votación. “Ese monto lo costearon los propios candidatos”, precisó Arturo Salazar.
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