La reforma de la seguridad social: una deuda de la Asamblea Nacional

En 2002 el Parlamento aprobó la Ley de Seguridad Social, pero los regímenes complementarios a lo largo de 13 años quedaron en el olvido

Mayela Armas/@mayearmas

Caracas. Según el Presidente Nicolás Maduro, en Venezuela se ha profundizado el régimen de seguridad social y en diversas alocuciones ha destacado la inversión realizada en esa área, que ha consistido principalmente en incrementar el número de pensionados, porque la creación de un sistema completo ha estado en deuda desde hace 13 años.

En diciembre de 2002 la Asamblea Nacional aprobó la reforma de la Ley de Seguridad Social, que contempló la conformación de seis regímenes: Salud, Pensiones, Asistencia Social, Vivienda, Empleo y Riesgo Laboral (regido por la Lopcymat).

Pero de esos seis subsistemas, solamente se redactaron los marcos legales de tres: Vivienda, Asistencia Social y Riesgo Laboral. Los puntos fundamentales de la propuesta de seguridad social, como los son Salud y Pensiones, han seguido como tarea pendiente.

En 2004 los diputados dieron el primer visto bueno a un proyecto de Ley de Salud, que luego se engavetó. En aquella propuesta se contemplaba la centralización del sistema, de manera que un solo instituto administraría los centros de salud y paulatinamente se suspenderían los seguros en la Administración Pública.

La propuesta de Ley de Pensiones ni siquiera llegó a la primera discusión. La Comisión de Desarrollo Social elaboró un anteproyecto que establecía que los trabajadores debían cotizar a un esquema de aseguramiento colectivo (aportes a un pote) que sería administrado por el Estado y de manera voluntaria las personas se afiliarían a planes complementarios del sector privado y del sector público. Dicha iniciativa quedó en el olvido.

No solo hay mora con los sistemas mencionados, también falta el régimen de empleo. Aunque el Parlamento elaboró un proyecto, que establecía la incorporación de los trabajadores independientes y la creación de un Instituto de Empleo, el mismo no pasó.

Desde 2003 hasta la fecha, los diputados dijeron en cada ejercicio que dichos instrumentos legales serían aprobados, lo cual no sucedió. De manera que la nueva AN, que comenzará el 5 de enero de 2016, tiene como reto: saldar esa deuda.

¿Y las normas laborales?

El retraso no solo se registra con el sistema de seguridad social, los parlamentarios también tienen pendiente le elaboración de los marcos legales vinculados con la Ley de Orgánica del Trabajo.

Ese instrumento estuvo en revisión en la Asamblea Nacional durante años, pero luego el ex presidente Hugo Chávez decidió autorizarlo a través de la Habilitante de 2012, delegando en la AN los instrumentos que complementan la Ley.

La Ley del Trabajo prevé 10 normas adicionales, y de ellas la AN solamente redactó la que regula las relaciones laborales de los trabajadores del sector cultura, sin embargo, al final dicho texto no fue promulgado.

Faltan por autorizar las leyes para las personas que trabajan en el hogar, los trabajadores a domicilio, del deporte profesional, trabajadores agrícolas, del transporte terrestre, transporte marítimo, transporte aéreo, motorizados y personas con discapacidad.


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