En la parroquia no había este martes el movimiento usual de gente, ni de carros ni motos. Los que salieron lo hicieron bien temprano y fue a cazar los productos de la cesta básica de alimentos
Mabel Sarmiento Garmendia/@mabelsarmiento
Caracas. Este 5 de enero, cuando se pensaba que la gente aún estaba trasnochada por las fiestas de Fin de Año, fue totalmente atípico. En el centro de la ciudad todo giró alrededor de la instalación de la nueva Asamblea Nacional (AN), pero hacia el oeste específicamente en la parroquia Antímano, otro gallo cantó. Y es que la gente, no en multitud, salió fue a hacer cacería a los productos alimenticios. Donde se paraba un camión allí se armaba una cola, y tremenda por cierto.
Lo que más buscó la gente fue el papel tualé. Este producto, barrio adentro oficialmente hablando, le robó el protagonismo a los 163 diputados que se proclamaron en horas de la mañana en el hemiciclo de sesiones de la Asamblea Nacional.
Desde muy tempranas horas las amas de casa caminaron de una cuadra a la otra marcando colas y entregando las cédulas a los chinos. Más de una puso cara de alegría cuando salió con la “maletica” de papel higiénico. “Desde hace semanas no compraba y los bachaqueros lo venden demasiado caro”, dijo una compradora.
También salieron a cazar pañales, shampoo, harina de maíz y toallas sanitarias.
Muy pocos locales comerciales tanto en Antímano como en su parroquia hermana, Carapita, tenían las santamarías arriba. Los vendedores informales tampoco colmaron las aceras, pero hasta el mediodía se vio flujo de gente con sus bolsas de mercado.
Por estas zonas el transporte público no se vio masivamente. Una que otra camioneta se observó rodando. De allí que la gente pagó plantón en las paradas.
Los obreros del aseo urbano hicieron jornadas de recolección en la intercomunal de Antímano, pero más allá de este servicio no se vio ninguna otra cuadrilla, como por ejemplo las de Hidrocapital, arreglando dos botes de agua que desde hace semana adornan la vía a la altura del Seguro Social.
En las ventas de empanadas y en las panaderías sitios donde se concentró más la gente, muy poco se mencionaba el evento que acontecía en los alrededores de la AN, y cuando salía el tema, alguno decía “ya vas a ver que no va a pasar nada”.
Los transeúntes por estas parroquias sí esperaban poder ver algo de la instalación por la TV. Así que pasado el mediodía más de uno se recogió a sus casas. Para esa hora la instalación de los diputados nuevos y los reelectos tomaba forma, es decir, estaba en marcha. “Pero primero compro mi papel tualé”, dijo una señora que aguardaba la cola desde hace más de hora y media.
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