En la parroquia Sucre fueron activados 16 centros electorales de 181 que están autorizados por el Consejo Nacional Electoral.
Caracas. Desde las 9:00 a.m. de este miércoles 12 de octubre, vecinos de las diferentes zonas de la parroquia Sucre se concentraron frente a la Escuela Básica Nacional Diego Renato Mejías, de Altavista, para dar inicio a las actividades previas a la recolección del 20 % de las firmas para el Referendo Revocatorio (RR), evento pautado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) los días 26, 27 y 28 de octubre.
En la parroquia Sucre este fue el único sitio habilitado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), para juramentar a los voluntarios que serán los defensores y cuidadores de las rúbricas que respaldarán el RR.
Ellos esperaban fijar ese compromiso delante de algún líder de la alianza, pero al final los mismos dirigentes comunitarios asumieron la tarea. Al principio, sí estuvo apoyándolos Helen Fernández, alcaldesa del Distrito Metropolitano de Caracas, pero para conformar el grupo de voluntariado contaban con la presencia del presidente de la Asamblea Nacional (AN), Henry Ramos Allup, quien dejó a los vecinos con los crespos hechos.
Faltando dos minutos para el mediodía, y aguantando la fuerza del sol, más de 50 ciudadanos fueron juramentados para defender las rúbricas “llueva, truene o relampaguee”. Levantaron la mano derecha como muestra del compromiso asumido.
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Al inicio se habló de concentraciones en varios puntos, pero de la noche a la mañana hubo un cambio en las directrices, así como también de los representantes de la MUD que harían recorridos por esta zona para respaldar las actividades comunitarias.
En la escuela Renato Mejías se instaló un punto de información. En la puerta colgaron el listado con los códigos de los 16 centros electorales seleccionados por el CNE.
Tamara Vivas, coordinadora electoral del sector, sostuvo que en la parroquia hay 181 centros electorales y que para el RR solo activaron 16, cuando la población que sufraga es de 300.000: “Pero eso no va a hacernos retroceder, ya hemos sorteado varias trabas y seguiremos en condiciones normales y seguiremos trabajando en pro del revocatorio”.
Cerca de 100 personas se congregaron en el plantel y organizaron una especie de asamblea para discutir los puntos y las instrucciones coordinadas desde la Mesa de la Unidad. “No podemos actuar con anticipación pues la MUD manda las decisiones un día antes, pero tenemos que estar preparados y trabajar unidos”, expresó Josefina Boada, líder comunitaria.
Las casi tres horas que estos vecinos —identificados con los partidos Acción Democrática (AD), Copei, Voluntad Popular (VP), Alianza Bravo Pueblo (ABP) y Primero Justicia (PJ)— estuvieron en la calle no hubo incidentes negativos. No tenían cornetas ni altavoces para hacerse notar. Pero un grupo de mujeres se armó con un cuatro y empezó a versionar canciones del folclore nacional, lo que les valió su lluvia de aplausos y vítores dada la creatividad con que mezclaron en su despliegue lírico asuntos como el revocatorio, la crisis económica y el desabastecimiento de alimentos.
Asimismo, en la unidad educativa se llevó a cabo un trabajo de volanteo y voceros explicaron a los transeúntes dónde y cómo se realizará el proceso de la recolección de firmas.
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En otros sectores, como Los Magallanes de Catia y en Propatria no hubo concentraciones ni grandes asambleas.
José Quintero, de la organización Procatia, dijo que una comisión fue casa por casa para organizar el voluntariado que, de ahora en adelante, apoyará la recolección y ayudará a coordinar logística y transporte para la movilización de los ciudadanos en los días dispuestos para la segunda fase del proceso —26, 27 y 28.
Un poco antes de las 12:30 p.m. culminó el evento. Algunos se quejaron de que no tenían un toldo para resguardarse del sol y que tampoco les llevaron agua ni refrigerios.
Mientras estas personas desempeñaban su función política, dos policías merodeaban el lugar y preguntaban los nombres de algunas figuras relevantes. Sin embargo, la tarea de los funcionarios no pasó más allá de anotar datos y de hacer una que otra llamada telefónica. No había nada que justificara otro proceder: la gente no trancaba calles ni obstaculizaba el paso peatonal.
La otra cara de la moneda
En la parte baja de Altavista, en la avenida Sucre, se dibujó la otra cara de la moneda: la actividad comercial estuvo en pleno apogeo, al igual que el tráfico. El transporte público funcionó sin restricciones. Únicamente en los alrededores de la Plaza Catia estuvieron congestionados porque desde ahí partió la caravana motorizada convocada por el oficialismo.
La estación del Metro de Propatria no trabajó durante toda la mañana y se notó poca afluencia de transeúntes no solo por esa comunidad, sino también por los lados del 23 de Enero y El Amparo. En Lomas de Urdaneta, por su parte, se vieron un par de colas para comprar comida.
Tampoco hubo mucho movimiento de pasajeros en las paradas de Gato Negro, que tienen como destino las playas del Litoral Central.
Hubo quejas de vecinos que salieron a hacer sus compras diarias y se encontraron con que el pasaje en transporte público estaba en Bs. 75, por ser día feriado.
El parque Alí Primera, ubicado en el oeste de la ciudad, estuvo muy concurrido este miércoles, así como los espacios deportivos de las partes altas. Los chamos aprovecharon el buen tiempo para practicar deportes. Muy pocos estaban enterados de las actividades de la MUD en esas barriadas.
Fotos: Mariana Mendoza/Mabel Sarmiento Garmendia
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