Los recursos que entrega Pdvsa al Banco Central son insuficientes para cubrir las importaciones de alimentos, medicamentos, materia prima e insumos para la producción
Mayela Armas/@mayearmas
Caracas. El estancamiento de la producción petrolera, la mayor demanda de dólares para adquirir bienes a un tipo de cambio barato y el descenso en los precios del crudo son los factores que causan la escasez de dólares. Frente a ese entorno, el Gobierno ha recortado la asignación de divisas a las industrias por lo cual ha bajado la producción y se ha generado la ausencia de alimentos, medicamentos y hasta repuestos de carros. De hecho a marzo de 2014 la falta de productos se observaba en 29 de cada 100 establecimientos comerciales.
¿Por qué no hay dólares suficientes? El flujo de ingresos petroleros es limitado, porque Pdvsa no ha logrado elevar la producción, que se mantiene en 2,7 millones de barriles diarios. Y adicionalmente, tiene que vender parte de esos barriles a un precio más bajo a los países de Petrocaribe (Nicaragua, República Dominicana, Jamaica, entre otros) y destinar otra porción al pago de la deuda que el Gobierno mantiene con China. Firmas como Ecoanalítica han estimado que los barriles generadores de caja, aquellos por los cuales se percibe el ingreso inmediato, ascienden a 1,6 millones de barriles diarios.
A la menor producción petrolera se añade el descenso en el precio del barril. Ya con un valor del petróleo en 100 dólares el Gobierno enfrentaba dificultades para atender la demanda de divisas, ahora con precio más bajo los problemas aumentan.
En lo que va de 2015, el precio promedio del petróleo se encuentra en 45 dólares cuando hace un año estaba en 95 dólares, y con esa caída son menos los ingresos que se reciben y que se pueden destinar a las compras de bienes en el exterior.
Pero no todo lo percibe la República por las exportaciones petroleras va al Banco Central de Venezuela (BCV). Pdvsa sólo vende al BCV 48% de los recursos que se originan por las ventas de crudo, debido a que el resto lo orienta a otros fondos como Fonden, que maneja el Gobierno de manera poco transparente.
Por esa cantidad de dólares que se entregan al BCV, las reservas internacionales (que son los recursos que tiene la República para atender los pagos) no superan los 19 millardos de dólares (nivel similar a 2003) y de ese monto, solamente cerca 2 millardos de dólares son los que se pueden utilizar para realizar las importaciones y pagar la deuda pública.
Consecuencia
La disminución de fondos ya mencionada ha llevado al Gobierno a recortar las divisas a las empresas. Ya al cierre octubre del año pasado las compras totales en el exterior de insumos y productos sumaron 19,7 millardos de dólares, 23% menos que en 2013. Ese descenso limitó la producción de bienes y, por ende, generó la falta de artículos.
Las últimas cifras disponibles del BCV muestran que hasta marzo de 2014 en 29 de cada 100 establecimientos había ausencia de productos en los anaqueles, cuando en 2013 la escasez era en 20 de cada 100 locales. La situación más crítica se registró con los alimentos y en productos prioritarios como aceite, leche, café y azúcar la escasez fue superior a 50%.
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