Este viernes de Concilio, la Virgen Dolorosa salió en procesión por los alrededores de la Basílica de Santa Teresa. El martes se inician los preparativos y la decoración del santo, para su procesión el próximo 12 de abril, día en que reúne a millones de feligreses de todo el país.
Caracas. La ruta de la procesión del Nazareno de San Pablo, que reúne a millones de devotos de todo el país en la Basílica de Santa Teresa, se amplió y cubrirá tres kilómetros del centro de Caracas. El año pasado llegó a la plaza O’leary y cruzó la Diego Ibarra, pero este año, pasará por La Hoyada y por El Calvario. Se prevé que su procesión se inicie a eso de las 4:00 p. m., luego de culminadas las misas en su honor que arrancan el martes 11 de abril a las 10:00 p. m.
Lo otro novedoso que traerá el Nazareno de San Pablo es que no saldrá con su arco. Su vestimenta será remozada al igual que su pedestal. Esta imagen que tiene más de 400 años en la historia caraqueña será llevada al Teatro Municipal, que fue su casa, el martes en horas de la mañana. Ahí será decorado con su túnica morada y con centenares de orquídeas que comenzarán a llegar a la Basílica de Santa Teresa a partir del lunes próximo. Los arreglos se harán ante los ojos de la feligresía y no a puertas cerradas.
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Por otro lado, mientras la organización va viento en popa, los sacerdotes hacen maromas para conseguir las hostias benditas y el vino consagrado. De hecho, esta semana en la Basílica los párrocos se han movido como peso pluma para abastecerse de esos insumos y garantizar la celebración de la eucaristía.
Los organizadores de las festividades religiosas de la Cofradía del Nazareno, entre ellos Harold Serrano, piensan que debido a la crisis actual, aumentará la asistencia a las iglesias católicas, pues la gente tiene necesidad de encontrarse con Dios.
Estima una afluencia a Santa Teresa de más de tres millones de personas, además de las que se aglutinen en torno a la procesión que recorrerá más de 20 cuadras del centro capitalino.
Del otro lado de la acera, los de a pie tienen opiniones divididas: “Muchos estarán esos días buscando comida”, señaló Dirmi Mejías, devota del Nazareno de San Pablo.
Comercio santoA diferencia de otros años, en los alrededores de la Basílica de Santa Teresa solo hay tres puestos informales que venden los símbolos religiosos. Eran nueve tradicionalmente, “pero se fueron a la quiebra, ya no se puede comprar tanta mercancía, las imágenes subieron de precio al igual que las velas”, dijo uno de los comerciantes. En estos momentos, una vela normal cuesta Bs. 400 y lo más barato que se consigue un velón pequeño es en Bs. 2000. Las túnicas van desde Bs. 5000 hasta 35.000. “Si es por la fe, la gente hace lo posible. Sin embargo, las ventas están malísimas”, comentó la única vendedora de batas moradas, usadas por los creyentes para pagar promesas, que está apostada a un costado de la Basílica. La fachada de la iglesia, cuya construcción se inició en 1876, está siendo rehabilitada de cara a las festividades de la Semana Mayor, que se inició este viernes 7 con la procesión de la Virgen Dolorosa. El Nazareno estará en el pedestal de la cúpula central, al alcance de sus devotos, hasta el día de Cristo Rey, a conmemorarse el mes de junio, cuando lo suben a su nicho original. |
Fotos: Luis Miguel Cáceres
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