Afectados piden al Gobierno baje la mirada y vea cómo sufren quienes padecen hipertensión pulmonar, diabetes insípida, hepatitis C, hemofilia, cáncer, patologías neurológicas y los trasplantados.
Mabel Sarmiento Garmendia/@mabelsarmiento
Caracas. “Desde 2014 no se consigue Minirin de 120 mcg, que sirve para tratarme la diabetes insípida. En consecuencia no controlo la orina, me deshidrato, descompenso y desmayo. En una noche me paro hasta nueve veces al baño, porque esta enfermedad produce mucha sed y tomo demasiada agua: Hasta 20 litros al día. Por eso necesito el medicamento con urgencia”.
Eso lo contó Amarili Rojas una de las pacientes que se unió a una fundación junto con otras 600 personas y que hoy en día ven disminuida su calidad de vida por la escasez de medicinas.
La diabetes insípida es el resultado de un déficit de la hormona antidiurética (vasopresina), que es la encargada de limitar la excreción de agua a nivel renal.
¿Cómo se desarrolla? Según los afectados de diferentes formas. A Rojas le apareció, dijo ella, como si se tratara de la ruleta rusa. “Soy enfermera y hace unos años comencé a tener un exceso de sed. Era algo delirante, si veía un jarrón de agua me la podía tomar. Así fue que descubrí que conmigo andaba esta patología”.
Pero a Ewduard Chacín le sobrevino luego que le extrajeron un tumor cerebral hace ocho años. “No es fácil, a veces uno se siente tan descompensado que no quiere salir de la casa y más porque no hay los tratamientos. Pero igual salgo a trabajar porque necesito llevar el pan a mi casa”.
Fuera de la red farmacéutica convencional el Minirin se consigue en Bs. 75.000. Deben tomarlo tres veces al día y le dura 15 días. En Colombia, dijeron los pacientes, se puede conseguir hasta en 536.000 pesos (1.800.000 bolívares). “Eso no lo podemos pagar, por eso exhortamos al Gobierno que baje la mirada y mire lo que padecemos los pacientes crónicos”, expresó Chacín.
No es solo la cantidad de veces que van al baño, que al día pueden ser hasta 45 veces, sino que además se les reseca la piel, se les cuartean los labios y pierden todas las sales, y minerales que requiere el organismo.
Estas personas participaron en la concentración por la salud, organizada por la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y la Vida (Codevida), realizada este jueves en el anfiteatro de la plaza Altamira, en Chacao, y a la que asistieron más de 300 personas.
Unidos por la vida
En ese encuentro se dieron cita enfermos oncológicos, renales, con Parkinson, hipertensos, con afecciones pulmonares, con colitis, hemofílicos, hepatitis C, con problemas neurológicos, así como las madres de los niños recluidos en el hospital J. M de Los Ríos, con VIH-Sida y otras patologías.
La afectación por la escasez de medicinas que se planteó allí llega en muchos casos hasta 97%. El tiempo de desabastecimiento lo calcularon incluso desde 2014 en todos los niveles.
En la concentración se leyeron pancartas como “marcho por la salud de mi hija”, “mis padres de 91 y 83 años se están muriendo porque no consigo medicinas”, “medicinas sí, armas no”, “no queremos que muera más gente por la falta de tratamientos”.
Vinieron incluso pacientes de Mérida con hipertensión pulmonar. Denunciaron que no consiguen los medicamentos y en consecuencia están atados a una bombona de oxígeno. Johana Castellanos, afectada, comentó que tienen registros de 450 personas que penden de un hilo. De hecho informó que de septiembre a diciembre de 2015 fallecieron 12 venezolanos a los que no les llegó la medicina. Dijo que no los puede comprar siquiera en el exterior porque cuestan entre 3.000 y 4.5000 dólares.
“Por eso nos estamos muriendo, nos falta el oxígeno y ya no tenemos más tiempo. Ya perdimos la paciencia”, comentó.
Feliciano Reyna, de Acción Solidaria y fundador de Codevida, en medio de la concentración dijo que el contralor Manuel Galindo, el defensor Tarek Willian Saab, la fiscal Luisa Ortega Díaz, el presidente del Ivss Carlos Rotondaro, la ministra de Salud Luisana Melo, el vicepresidente Artistóbulo Istútiz y el presidente Nicolás Maduro son responsables por acción u omisión de garantizar y proteger derecho a la salud y vida en Venezuela.
Y los emplazó a considerar los niveles de riesgo que corren las personas según sus afecciones. Manifestó que piden al Gobierno permitir la cooperación internacional para garantizar de forma inmediata medicamentos, insumos y servicios, y reconocer públicamente la grave magnitud del problema en todo el sistema sanitario del país.
“Los hospitales y centros de salud pública en Venezuela enfrentan el retiro de 50% de su personal médico calificado. En Venezuela los inventarios de medicinas se redujeron 80%”, comentó.
Citó por ejemplo el caso de los pacientes con el síndrome VIH, 61.000 en el país, que con los antirretrovirales tenían una expectativa de vida de 50 años, “pero ahora los inventarios que hay llegan hasta el mes de abril”.
En consecuencia Francisco Valencia presidente, de Codevida, informó que como ya agotaron todas las instancias posibles, llevaran sus quejas y plegarias a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a la Organización de Naciones Unidas (ONU). Expondrán la situación actual y la respaldarán con firmas que ya comenzaron a recolectar.
“Así tengamos que encadenarnos en Miraflores, queremos que nos escuchen y que se atienda la crisis de salud que padece Venezuela, que estamos alertando desde 2013 y sobre la cual también hemos hecho propuestas para superarla”, manifestó.
Lo que no se consigue desde hace dos años:
- Tensión e hipertensión: Janumet, Valsartán, Losartán Potásico, Captopril, Adalat.
- Cáncer de mama: Herceptin, Arimedex, Avastin, Zoladez, Perjeta, Femara, Tamoxifeno, Paciclatel, Ixempra, Zometa, taxol, Aromasin, Asparminasa.
- Colitis y Crohn: Mesalazina, Infliximab.
- Hepatitis C: Sofosbuvir, Ledipa Svir, Daclatasvir, Simeprevir, Viekirax.
- Pacientes de neurocirugía del J.M de Los Ríos: En esa sala hay 13 infantes que necesitan válvulas de presión media y baja, yelcos, scal, solución dextrosa al 5%, unificadores, micronebulizadores, pañales, guantes, centros de cama.
- Diabetes insípida: Desmopresina, Minirin.
- Trasplantados renales: Predipsona.
- Hipertensión pulmonar: Ventavin, Bosetan.
Fotos: Cheché Díaz
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