Periodista amenazado desde 2015 muere en el Domingo Luciani tras recibir una golpiza

La Universidad Bolivariana de Venezuela se negó a entregarle el título en Comunicación Social al periodista Alí Domínguez, quien debía graduarse en julio de 2018. A pesar de haber culminado toda la carga académica, Alí nunca fue convocado al acto de grado y su situación tampoco fue aclarada posteriormente por la casa de estudios.

Caracas. “Martín Luther King dijo que la esperanza es un sueño despierto. (…) Hay una ruta que estamos recorriendo sin divisarla. Creo que vamos bien”. La frase la publicó, hace seis días, el periodista y activista Alí Domínguez, en su cuenta de Instagram. El 28 de febrero la familia lo dio por desaparecido. El 5 de marzo su cuerpo llegó al Hospital Dr. Domingo Luciani de El Llanito, con múltiples traumatismos en el cráneo que le provocaron la muerte. Allegados cuentan a Crónica.Uno que desde 2015 recibía amenazas por denunciar las precarias condiciones de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV).

Este jueves 7 de marzo Alí cumpliría 27 años. En 2018 emprendió un viaje por varios estados de Venezuela para alertar sobre la crisis humanitaria y de salud que aqueja a los venezolanos. Mario —nombre cambiado a petición de la fuente— relata a Crónica.Uno que su amigo hacía esto de manera independiente. Lo describe como un joven chavista, quien siempre se mostró crítico y disidente del gobierno de Nicolás Maduro. En 2015, 2016 y 2017 recibió intimidaciones por su activismo dentro de la casa de estudios en la que cursó la carrera de Comunicación Social.

Según la ONG de Derechos Humanos, Provea, el cuerpo del comunicador social presentaba traumatismo cráneo encefálico, fractura de tabique nasal, pérdida de dientes, entre otras lesiones que lo llevaron a un estado de coma.

“El personal de seguridad del centro médico aseguraba que no había pacientes con las características de Alí Domínguez en dicho centro de salud. No obstante, el médico a cargo informó que el joven fue recibido el viernes 1° de marzo y había sido trasladado en una patrulla de la Policía Nacional Bolivariana, que reportó que fue hallado en la autopista Francisco Fajardo. No tiene lesiones en el resto del cuerpo, por lo que familiares desconfían de la versión sobre un posible arrollamiento”, detalla la institución en un comunicado luego de repudiar el hecho.

Sin título universitario

En julio de 2018, Alí debía graduarse al igual que todos sus compañeros; sin embargo, no recibió la convocatoria al acto de grado. Pese a haber culminado la carga académica en la carrera de Comunicación Social, el departamento de Control de Estudios de la UBV no dio una respuesta al dirigente.

Ya había terminado todas las materias. Semanas antes de la graduación me felicitó y me dijo que no entendía por qué no fue convocado, él fue a Control de Estudios y no obtuvo respuesta. Allí se alejó de la universidad y comenzó a hacer una gira por Venezuela, él denunciaba la crisis de salud y humanitaria, relata Mario.

Pese a la afiliación con el chavismo, Domínguez manifestó que en la UBV se cometían actos de corrupción, denunció el estado en el que se encontraba el transporte “que se paralizó por completo”, así como el cierre de la biblioteca y los comedores. “La limpieza ya no se hacía. Alí había mostrado la desidia en la UBV de Los Chaguaramos”, dice uno de sus compañeros de clase, quien prefirió mantenerse en anonimato. Las críticas le valieron las amenazas que vinieron después, aseguran sus allegados.

Él empezó a militar en una dirigencia estudiantil contraria a lo que ellos tenían. Era crítica. Las comidas [en la UBV] ya no eran igual, Alí hizo estas denuncias dentro de la universidad y comenzó a ser blanco de amenazas. Me contaba que eran grupos de la universidad, pero no logró identificarlos, creía que eran colectivos de allí. Él me decía que los mensajes eran que conocían su rutina y que lo golpearían, agrega Mario.

Luego de varios días desaparecido, amigos y familiares iniciaron una campaña en redes sociales con la etiqueta #QueAparezcaAliDominguez para dar con su ubicación. El último contacto con el periodista fue el 28 de febrero después de que asistiera a una reunión de voluntariado por la Ayuda Humanitaria, en la sede de El Nacional, en representación del chavismo disidente. Sus allegados informaron que la última conexión en la plataforma de mensajería WhatsApp fue a las 06:50 p. m. de ese jueves.

Alí era chavista, pero no compartía las políticas de Nicolás Maduro. No me extraña que ese sea el motivo de su muerte y que hayan tomado represalias contra él, considera Mario.

Domínguez era activo en sus redes sociales, donde mostraba su participación en las manifestaciones antigubernamentales que se llevan a cabo en el país desde el 21 de enero de 2019.

Mario añade que Alí nunca estuvo muy vinculado al “partido de Chávez” (Partido Socialista Unido de Venezuela), ni a alguno opositor. “Compartía ideales con Desafío de Todos, el de Miguel Rodríguez Torres”, dice.

Familiares que intentaban reclamar el cuerpo de Domínguez este miércoles en el Domingo Luciani, manifestaron que el Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) puso trabas para entregárselo.

Provea publicó un informe recientemente sobre ataques contra miembros del llamado “chavismo disidente”, en el que identificó a 45 víctimas de violaciones, agrupadas en vulneraciones a la libertad personal (57 % de los casos), Derechos laborales (28.5 %), Libertad de expresión (16.6 %), Integridad personal (11.9 %) y el derecho a la justicia (7.1 %). “Aspiramos que este hecho no forme parte del proceso de retaliación contra activistas sociales y políticos que ejercen su voz crítica ante la realidad del país”, expresó la organización.


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