La Fundación Westminster para la Democracia, adscrita al Parlamento británico, ha trabajado junto al Parlamento venezolano durante dos años en el diseño de un proyecto de fortalecimiento institucional que permitan al Poder Legislativo adaptarse a las nuevas realidades. El presidente de la AN, Omar Barboza (UNT-Zulia) confirmó que la alianza será ratificada.
Caracas. El equipo de trabajo conjunto entre la Asamblea Nacional y la Fundación Westminster para la Democracia, que desde mayo de 2016 iniciaron el programa de cooperación para la modernización del Parlamento venezolano, presentó este jueves a diputados y trabajadores de la AN el informe final de la fase diagnóstica.
La actividad se realizó en la sede administrativa del Poder Legislativo y a la misma asistieron el presidente y vicepresidente de la AN, Omar Barboza y Alfonso Marquina; el presidente de la comisión de Modernización Enrique Márquez y el embajador del Reino Unido en Caracas, Andrew Soper.
El presidente Barboza explicó a los medios de comunicación invitados al acto que tanto el Parlamento como la Fundación convinieron renovar el plan de cooperación que vence el próximo mes de mayo, para garantizar el acompañamiento de los expertos de la Fundación Westminster en la fase de implementación de las propuestas de modernización en cada dirección y área del Poder Legislativo.
Barboza indicó que ante la asfixia financiera de la que es objeto la AN desde agosto de 2016, todos los gastos y recursos necesarios para llevar adelante dicha cooperación han sido aportados por la Fundación, la cual a su vez está adscrita a la Cámara de los Comunes del Parlamento inglés.
“Hoy se entregan cuentas del resultado de estos dos años de gestión. El embajador ha expresado su satisfacción por el trabajo adelantado. Ahora viene la parte de implementación para lograr la modernización del Parlamento y de sus procedimientos de funcionamiento interno”, dijo Barboza.
Precisó que las áreas principales a las que irá dirigido el plan de actualización son la administrativa y a la formación del personal de investigación: “Por ejemplo, un área a trabajar es el procedimiento para las consultas públicas de las leyes. Cada comisión hace las consultas públicas de una manera diferente dependiendo del criterio de su equipo; estamos tratando de estandarizar esos procedimientos. También la Comisión de Legislación se ha mantenido en contacto permanente con la Fundación para conocer los procedimientos legislativos que se aplican en otros parlamentos”.
Sin embargo, la alianza también tiene sus límites. Si bien los recursos para el proyecto han provenido de la Fundación, el Parlamento venezolano enfrenta diariamente otros problemas de funcionamiento y mantenimiento de urgente atención que no entran en el marco de ese convenio.
Barboza admitió que esos problemas siguen siendo un reto para los diputados que, como se sabe, no cobran sus sueldos desde mediados de 2016 y para un Parlamento que no recibe recursos de funcionamiento desde finales de ese mismo año.
“Las bombas de agua de la sede administrativa de la AN se rompieron ayer en la tarde y estamos en emergencia; el aire acondicionado del área de tecnología se descompuso hace dos semanas y tuvimos que buscar contribuciones y ayudas personales para solventar. Este Parlamento está cercado económica, política y militarmente para el ejercicio de sus atribuciones. Es por ello que la Fundación considera que si algún parlamento del mundo necesita apoyo es el Parlamento venezolano”, afirmó.
4 años para reformarse
El plan de modernización que comenzará a implementarse este año y que fue presentado este jueves consta de seis áreas prioritarias: el proceso de elaboración de leyes; la supervisión y control de los poderes públicos; el presupuesto nacional; la representación popular; la inclusión ciudadana; y la administración parlamentaria.
“La reforma completa del Parlamento es un proyecto de mediano a largo plazo, con un plazo mínimo equivalente al mandato de un parlamento (entre 4 y 5 años). Es importante que la modernización se implemente mediante una serie de planes anuales de acción prioritaria, que permita la revisión periódica de los avances y la estrategia de mediano-largo plazo de conformidad con los resultados de implementación y las necesidades emergentes”, señala el documento distribuido entre los asistentes.
En el área de legislación, el plan contempla reformar la dirección de consultoría jurídica, fortalecer los equipos de redacción de leyes y reformar el reglamento interno de la AN “para que sea coherente con las reformas de la modernización”.
Para el área de presupuesto, se prevé crear un departamento parlamentario para asuntos presupuestarios que se encargue de coordinar todo lo relativo al control del presupuesto nacional.
En cuanto al fortalecimiento del rol de representación de los diputados, se propone un “parlamento abierto” así como desarrollar una estrategia de comunicación para la Asamblea, además de “la adopción de políticas estandarizadas para la participación de la sociedad civil en el Parlamento”.
Fotos Cortesía Prensa AN
Participa en la conversación