Cancillería responde a retención de avión en Argentina: Uruguay fue irresponsable al revocar permiso de vuelo

Diez días después de que este incidente haya provocado una investigación en Argentina finalmente Venezuela respondió. El Ministerio de Relaciones Exteriores expone que debido a la denegación del permiso por parte de Uruguay la vida de los tripulantes fue puesta “en grave riesgo” al no contar con suficiente combustible.

Caracas. Luego de diez días de que un avión venezolano-raní está retenido en Argentina por presuntas irregularidades con el plan de vuelo y también por quiénes integran la tripulación, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela finalmente se pronunció sobre la situación la tarde de este jueves, sin embargo, no cargó contra el país donde se lleva a cabo la averiguación, sino contra Uruguay. 

“La República Bolivariana de Venezuela rechaza categóricamente el irresponsable manejo que ofreció la autoridad aeronáutica del Uruguay, al revocar el permiso de sobrevuelo otorgado a la empresa venezolana Emtrasur, mientras que la aeronave se encontraba en el aire, cumpliendo el itinerario entre el Aeropuerto Internacional de Ezeiza Argentina-Montevideo-Caracas, para hacer su escala técnica de abastecimiento”, se lee en el comunicado divulgado este 16 de junio por la Cancillería.

La institución venezolana expone que la tripulación de la aeronave, conformada por 14 tripulantes venezolanos y cinco iraníes, “se vio obligada a retornar inmediatamente hacia el aeropuerto de Ezeiza en Argentina, no contando con el combustible reglamentario, poniendo en grave riesgo la vida de la tripulación”.

El avión retenido -un Boeing 747 Dreamliner con matrícula venezolana YV353- fue comprado hace un año a la aerolínea iraní Mahan Air y actualmente es propiedad de la filial de Conviasa: Empresa de Transporte Aerocargo del Sur, S.A. (Emtrasur).

La aeronave había arribado a Buenos Aires el 6 de junio y dos días más tarde tenía previsto ir a Montevideo, pero Uruguay le denegó acceso a su espacio aéreo, por lo que debió regresar al aeropuerto argentino, donde fue retenido y permanece en esa situación hasta la fecha.

Las averiguaciones que pesan sobre la tripulación y la aeronave se producen debido a que Mahan Air posee numerosas sospechas de presuntamente tener vínculos con la Fuerza Quds, un poderoso brazo paramilitar de élite del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC). Estados Unidos, por ejemplo, acusa a Mahan Air de transportar cargas militares en aviones civiles y en 2011 impuso sanciones para quienes operen con la aerolínea iraní.


Este avión de carga provenía de México, previa escala en Caracas, de acuerdo con un documento aportado al juzgado por la estatal Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), reseña CNN. La carga de la aeronave serían autopartes provenientes de la ciudad mexicana de Querétaro, adquiridas por la empresa privada argentina SAS Automotriz SA, proveedora de la automotriz Volkswagen.

La Cancillería asegura que una vez que aterrizó el un Boeing 747 Dreamliner “se pudo constatar que la aeronave contaba con tan solo 17.000 litros de combustible, muy por debajo de lo recomendado por el Procedimiento Operacional estandarizado de Emtrasur, el cual está establecido en 20.000 litros”.

“La República Bolivariana de Venezuela considera inaceptable lo suscitado y exige a las autoridades del Gobierno uruguayo explicaciones sobre este terrible hecho. Al mismo tiempo, exhorta a velar por los principios de seguridad, fraternidad y hermandad que han guiado históricamente las relaciones entre ambas naciones”, concluye.

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