Desde 2008, vecinos del sector Manicomio, Jabillo a Curazaito, en la parroquia La Pastora, esperan por la construcción de un muro de contención, obra prometida por la Alcaldía de Caracas para evitar el derrumbe de varias viviendas.
Caracas. Residentes del sector Manicomio, Jabillo a Curazaito, en la parroquia La Pastora esperan desde hace 14 años que la Alcaldía de Caracas construya un muro de contención para evitar el derrumbe de tres viviendas sobre otras que se encuentran en la parte inferior de esa comunidad. El temor invade a los vecinos desde el 21 de junio de 2021, después de caerse parte de la caminería y las viviendas en riesgo quedaron prácticamente en el aire.
Yelitza Espinoza, una de las personas afectadas por el deslizamiento progresivo del terreno, resumió la lucha emprendida para evitar la pérdida de su vivienda:
Después de varios años de gestiones en la Alcaldía de Caracas para la construcción de una pantalla atirantada, en el año 2008 se comenzó la obra. Pero a la mitad fue desmontada porque el presupuesto no alcanzaba para terminarla. Espinoza detalló que, en una segunda oportunidad, se levantó un muro de contención, pero a los 15 días comenzó a agrietarse, por lo que fue derribado por una cuadrilla de la Alcaldía.
En ese momento, Freddy Bernal, quien era alcalde del municipio Libertador, se comprometió a través del periódico Últimas Noticias a reconstruir dicho muro de contención, ya que la obra estaba en garantía, pero “la contratista no cumplió”. Desde entonces, los vecinos hacen todo lo posible para que les cumplan y no dejaron de solicitar en las siguientes gestiones municipales la construcción del esperado muro de contención.
Espinoza tiene una carpeta llena con las comunicaciones entregadas en las distintas gestiones municipales y las notas de prensa con las denuncias de la situación. El 25 de febrero de 2013, entregó una carta a la Alcaldía de Caracas para solicitarle a Jorge Rodríguez, mandatario municipal para ese momento, el envío de funcionarios que verificaran la denuncia y aplicar los correctivos a fin de evitar el derrumbe de las casas; sin embargo, no recibió la atención requerida.
En 2020, la caminería comenzó a desprenderse y, a principios de mayo del 2021, cuando la situación estaba peor, un ingeniero del Instituto Municipal de Gestión de Riesgo y Administración de Desastre, Imgrad, realizó una inspección e informó que se levantaría un informe porque allí había que construir un muro de contención.
El 21 de junio del 2021, con las lluvias intensas, se desplomaron 10 metros del camino y los vecinos de la parte alta quedaron incomunicados.
En la campaña para las elecciones municipales perseguimos a la almiranta Carmen Meléndez y le entregamos tres veces la carta haciendo la solicitud. En el Gobierno del Distrito Capital, con Nahum Fernández, me recibieron todo y nada de nada. Nos preocupa porque como la caminería no está, cuando llueve, el agua cae directo y afecta más el cerro”.
Debajo de una de las tres casas se abrió un hueco y las bases están prácticamente en el aire. Los vecinos repararon las tuberías de aguas servidas y agua potable que se reventaron en las casas de la parte alta. El 21 de enero de este año, Yelitza volvió al Imgrad a pedir otra inspección porque cada día cede más el terreno, se fracturó el piso de la casa que está arriba de la suya y corre el riesgo de derrumbarse.
Espinoza teme estar en su casa. Cuando sale del trabajo, se va a la casa de su mamá en Propatria. En la vivienda se queda su suegra y su cuñado.
La semana pasada fui a Miraflores y me dijeron que no podía ir sola, que fuera con tres personas más del consejo comunal. Y no he ido porque están todos enfermos. Pero pienso ir. No duermo porque me da miedo que vaya a temblar y esas casas de arriba vuelen hacia abajo y mi cuarto está frente a ellas. Ella si está todo el tiempo allí no tiene para donde irse. Y mi esposo también se queda allá, le da miedo dejarlos allí solos y que pase algo”.
En el barrio todos comentan que las casas están en riesgo y no ayudan a las familias afectadas, pero en el sector Los Robles, la alcaldesa Carmen Meléndez, el año pasado cuando estaba en campaña, mandó hacer una cancha techada con parque y aparatos deportivos. Los vecinos no comprenden cómo se ha invertido un dineral en esa obra deportiva, mientras que hay vidas en peligro, por eso, proponen trancar la avenida principal de Manicomio para solicitar a las autoridades que construyan un muro de contención para evitar el derrumbe de las tres casas.
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