En el mercado negro, la venta de una bombona de gas pequeña cuesta tres puntos de oro. De acuerdo con habitantes en Tumeremo, los consejos comunales también cobran en oro, aunque a más bajo precio.
Puerto Ordaz. Mientras en otros estados del país las ventas en el mercado de servicios básicos, como el gas, se cobra en dólares, en Bolívar, específicamente en Tumeremo, las bombonas de gas se pagan con puntos de oro.
Yoannis Mejía, candidata a concejal en el municipio Sifontes, denunció que en Tumeremo se fomenta el mercado negro con la venta de gas en oro, negocio en el que también se involucran los consejos comunales. De acuerdo con la dirigente, sería en complicidad con el alcalde Vicente Rojas.
No han caído en cuenta de lo peligroso que es comercializar el combustible de esa manera, a sabiendas de que aquí existe un depósito de gas que más nunca lo utilizaron. En tiempos de revolución lo sustituyeron por los consejos comunales y eso no es posible”, fustigó Mejía.
Puntos de oro
Según la denunciante, “los consejos comunales junto con el alcalde están vendiendo el combustible a tres puntos de oro una bombona pequeña, a seis puntos una bombona mediana, y de una grama a una grama y media la bombona grande. Eso es un negocio redondo, cuando en el deposito llenábamos a precios solidarios”, agregó.
Actualmente, en Tumeremo un punto de oro se cotiza en cuatro dólares, mientras que una grama de oro en 40 dólares.
Una habitante consultada por Crónica.Uno aclaró, sin embargo, que esos precios corresponden a las ventas en el mercado negro, y no a las jornadas que cada cierto tiempo hacen los consejos comunales.
El consejo comunal esporádicamente hace operativos. Recogen las bombonas y te dicen lo que tienes que pagar. También cobran en oro, pero un poquito por debajo que los bachaqueros. Que si los bachaqueros te venden una bombona grande en 35 dólares, el consejo comunal, en 20 dólares. En Tumeremo todo se volvió un negocio. Todo lo cobran en oro, o en dólares, lo único que pagas con bolívares es la comida”, agregó la fuente.
La mayoría termina por recurrir a la venta de gas de revendedores. Las jornadas de los consejos comunales son cada tres o cinco meses.
“En lo que va de año le he comprado solo dos veces al consejo comunal. Del resto consigo gas con el bachaqueo”, dijo otro habitante de Tumeremo.
Yoannis Mejía reiteró que en Sifontes no se ha respetado en ningún momento el anuncio oficial de los nuevos precios de los distintos tamaños de las bombonas de gas destinadas a consumidores, instituciones, comercios e industrias.
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