Fe y Alegría denunció que retrasos en los pagos a docentes ocurren desde marzo

Fe y alegría

El profesor Rafael Peña de Fe y Alegría indicó que los retrasos vienen ocurriendo desde marzo y ve muy difícil el regreso a las clases presenciales con las condiciones laborales y salariales actuales.

Caracas. La organización educativa Fe y Alegría denuncia desde la semana del 12 de julio el retraso del pago de salarios de los docentes correspondiente a la primera quincena de julio, a pesar de que el monto de la remuneración no supera los cuatro dólares mensuales.

El profesor Rafael Peña, director de la Escuela Técnica Industrial San José Obrero, comentó a Crónica.Uno que apenas el pasado 19 de julio recibieron los fondos para pagar la nómina de los docentes que debió liquidarse entre el 10 y el 11 de julio.

Peña destacó que los retrasos en los pagos se han convertido en una constante. Ocurren desde marzo de este año y, en esta ocasión, la justificación por parte de la Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC), ente encargado de hacer la gestión de pagos ante el ministerio, es que la demora se produjo por un retraso en la Oficina Nacional de Presupuestos.

AVEC es la instancia a la que están suscritos todos los colegios católicos del país y a pesar de ser intermediario entre el Estado y las escuelas como Fe y Alegría, tampoco se han salvado de los retrasos.

Peña agregó que en marzo cerca de 80 % de los trabajadores de AVEC no recibieron el pago correspondiente a esas quincenas, el cual pretendía hacerse a través del sistema Patria, y todavía siguen esperando.

Esta constante demora en el pago de las últimas quincenas fue lo que obligó a Fe y Alegría a denunciar en redes, según explicó Peña.

La baja remuneración, sumado a los retrasos que últimamente son más frecuentes, empeoran las condiciones laborales para los docentes que cada vez más dejan las instituciones para dedicarse a cualquier otra cosa que devengue un salario más competitivo.

Regreso a clases

El 1° de julio Nicolás Maduro anunció su intención de retornar a las aulas para el año escolar 2021-2022 en todos los niveles educativos a partir de octubre, todo sujeto al cumplimiento de las medidas de bioseguridad.

Sin embargo, desde Fe y Alegría ven esta iniciativa con preocupación debido a la falta de condiciones para volver a las clases presenciales. Peña comentó en entrevista que el principal problema son las condiciones laborales y salariales.

Mientras que, por un lado, los docentes no reciben una remuneración acorde a la realidad económica del país; por el otro, muchas escuelas no cuentan con las herramientas para retornar a las aulas, lo cual hace muy cuesta arriba ofrecer una educación de calidad.

Muchos de los profesores tienen dos y tres trabajos que no necesariamente están ligados a la educación. Algunos hacen tareas dirigidas, pero otros simplemente hacen otra cosa, explicó. Esto en un esfuerzo para intentar conseguir ingresos más.

Peña afirma que será muy difícil retornar a las aulas con las condiciones actuales: malas condiciones laborales, infraestructura inadecuada para recibir a los estudiantes, falta de equipos para manejar la educación a distancia. La mayoría de los profesores no tienen teléfonos inteligentes o computadoras para impartir clases desde sus casas o hacer seguimiento a las asignaciones que mandan a los alumnos.

En el caso de la infraestructura, en varias ocasiones han denunciado las condiciones de algunas escuelas de Fe y Alegría. Muchas no tienen agua o presentan graves fallas.

Con estas condiciones va a ser muy difícil retornar a una modalidad presencial, indicó Peña.

Esta tampoco es la primera vez que la organización se pronuncia en favor de una mejora laboral y salarial. A lo largo de 2020, e incluso en años anteriores, docentes tanto de Fe y Alegría como de otras instituciones salieron a las calles a protestar para exigir una mejor remuneración. Sin embargo, las autoridades no han sido capaces de atender el problema.


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