Falta de agua, deficiencias en servicios de Rayos X y tomografías, área de emergencia al borde de su capacidad. El megapagón sigue empeorando la situación de los hospitales públicos del país y afecta a los más vulnerables. A las madres de niños que requieren quimioterapia los directivos del Hospital J. M. de los Ríos les piden “esperar”, pero el cáncer no espera.
Caracas. El segundo megapagón nacional del 25 marzo dejó su marca en el Hospital J. M. de los Ríos: el centro hospitalario trabaja a media máquina y la falta de aire acondicionado en la unidad de mezclas mantiene en vilo a cerca de 180 pacientes que requieren urgentemente recibir tratamientos de quimioterapia.
La directiva del hospital comunicó a las madres que el aire acondicionado se dañó producto del apagón, sumándose así a los tantos equipos dañados que mantienen algunos servicios suspendidos.
El miércoles 28, algunas madres de niños del servicio de Oncología protestaron a las afueras de la institución en reclamo a la falta de quimioterapia para sus hijos. Las mismas fueron citadas por los directivos del recinto, quienes les “prometieron resolver la situación” y pidieron esperar. No se hizo mención de cuánto tiempo sería la espera ni si está contemplado trasladar a los pacientes a otro hospital.
A su vez, la falta de agua ha provocado infecciones en algunos niños, a las madres no se les permite el acceso a los baños y las cisternas son destinadas exclusivamente para diálisis, aunque estas no cumplen los protocolos internacionales, según la ONG Prepara Familia.
La planta eléctrica instalada por Corpoelec luego del primer megapagón provee solamente hasta 240 kv, por lo que las únicas áreas del hospital que cuentan con electricidad son emergencia, pediatría y hemodiálisis, dijo Katherine Martínez, directora de Prepara Familia. Unidades tan importantes como la torre de aislamiento, la sala de hospitalización y los quirófanos están fuera de servicio y a oscuras.
El Reporte Nacional Emergencia Humanitaria Compleja 2018 señaló que al menos 33 % de los hospitales públicos del país no cuentan con plantas para mantener encendidos equipos de soporte vital en caso de fallas dentro de áreas críticas como emergencias, quirófanos y unidades de cuidado intensivo.
Asimismo, las constantes interrupciones del servicio eléctrico han ido dañando paulatinamente los equipos para hacer Rayos X y tomografías, “muy pocos de los equipos funcionan”, sostuvo Martínez. La Encuesta Nacional de Hospitales 2018 reportó fallas en 97 % de los tomógrafos y 94 % de los servicios de Rayos X en todo el país.
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