Desde el viernes 28 de octubre se registra una militarización en Tumeremo, días después del desalojo que hicieron las FANB en una mina de Imataca
Ciudad Bolívar. Continúa la militarización en Tumeremo, a poco más de una semana del desalojo de mineros de Imataca, quienes denunciaron a funcionarios de las Fuerzas Armadas de quemar sus campamentos y la iglesia del pueblo.
Las protestas del pueblo del municipio Sifontes se concentran en poblados aledaños a Tumeremo, como El Dorado y el Km 88. Rechazaron no solo la forma cómo los militares hicieron el desalojo en Imataca, sino también violaciones de derechos humanos y detenciones de al menos 30 personas, de quienes desconocen su paradero.
Este sábado, los comerciantes de Tumeremo emitieron un comunicado en el que rechazan la militarización.
“Nuevamente extendemos nuestra preocupación ante la opinión pública del municipio Sifontes, del estado Bolívar, ante los hechos que vienen ocurriendo en Tumeremo, tierra de paz, gente buena, alegre y trabajadora”, señala el comunicado.
Denunciaron a las FANB de irrumpir en el pueblo “de manera hostil, prepotente y contraria al espíritu de paz de nuestra Constitución”.
La militarización en Tumeremo incluye despliegue de los uniformados, con presencia de tanques de guerra y sobrevuelo de aviones de combate.
“Como si fuéramos nosotros un campo de batalla de la Segunda Guerra Mundial. Sin dar detalles, sin dar mayor información, solo irrumpir ante la mirada atónita de madres, padres, ancianos, niños, niñas, gente de bien que nada más desea trabajar en paz”, denunciaron los comerciantes.
Llamaron a una nueva protesta de Hora Cero para rechazar la perturbación e incertidumbre que viven en la zona.
Maltrato al pueblo
“Aquí lo que hacen es maltratar al pueblo. Los comerciantes asiáticos quieren apoyar al minero y por eso se unen al llamado de Hora Cero, como una protesta pacífica, pero los militares los obligan a abrir los negocios”, dijo una habitante de Tumeremo a Crónica Uno.
Agregó que, además, hay detenciones arbitrarias, ya que se hacen sin orden de captura ni flagrancia. Mientras tanto, los cuerpos de seguridad no atienden denuncias de desapariciones. Uno de esos casos es el de Angelo Vargas Seijas, desaparecido desde el pasado domingo cuando salió de la mina Corregente.
La ONG Fundaredes se hizo eco de las denuncias sobre allanamientos arbitrarios y la presunta detención de 30 mineros de Imataca.
Luis Caraballo, vocero de los Consejos Comunales, denunció los atropellos hacia los mineros y desmintió que pertenezcan a grupos delictivos. Asimismo, exigieron explicaciones al Gobierno del porqué de la militarización en Tumeremo.
Respuesta de las FANB
A través de la cuenta en Instagram de la Zodi Bolívar se muestra un video con explosiones de campamentos mineros presuntamente ilegales.
En frase del comandante estratégico operacional de la FANB, Domingo Hernández Lárez: “No permitiremos instalación de campamentos de grupos armados terroristas, dedicados a la minería ilegal, trata de personas y narcotráfico”.
El desalojo en Imataca llevó al desplazamiento de unos mil mineros. 200 de ellos comunicaron que se refugiaron montaña adentro, a unas 10 horas de la zona. Contrario al argumento de las FANB de destruir campamentos ilegales, los mineros aseguran que pagan sus impuestos a la Corporación Venezolana de la Minería (CVM) por concepto de extracción.
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