Defensores del patrimonio cultural deploran que maquinarias de la Alcaldía de Vargas intervengan un grupo de casas patrimoniales en la calle Bolívar. Paralelamente, se reportó la caída del techo de un inmueble histórico de la zona.

La Guaira. Mientras maquinarias de la Alcaldía del municipio Vargas intervienen varios inmuebles desocupados del casco histórico de La Guaira, vecinos de la zona vivieron momentos de angustia por el desplome del techo de otra de las propiedades coloniales.

Aunque el suceso ocurrido entre el sábado 17 y domingo 18 de febrero no guarda relación con los movimientos de tierra, escombros y desechos sólidos que realizan en el casco histórico de La Guaira, la preocupación no cesa entre lugareños y transeúntes de la calle Bolívar.

El techo y otras piezas de la pared perimetral de la vivienda se derrumbaron en uno de los callejones paralelos a la casa Emilio Boggio, sede del Concejo Municipal de Vargas. 

“Los de la Alcaldía se movieron rápido para recoger todo y no hubo lesionados, pero los que vivimos cerca no hemos recibido respuesta a las peticiones para arreglar nuestras casas”, indicó Maritza Ocanto.

Desde principios de este año, las maquinarias no detienen las labores en esas casas, arruinadas por el abandono y el salitre. No se conoce cuál es el plan de restauración del organismo municipal. Tampoco hay pronunciamientos del Instituto de Patrimonio Cultural (IPC), ni del Ministerio de la Cultura.

Salitre y ostracismo

En 2022 y 2023, y sin hacer público el plan de rescate avalado por el IPC, unas 20 casas coloniales fueron susceptibles de intervenciones en sus fachadas.

Hubo un voto de confianza entre defensores del patrimonio cultural, en función de retomar la aspiración colectiva de la declaratoria de La Guaira como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Tal declaratoria se materializó en 1993 con Coro y La Vela (estado Falcón), así como con la Universidad Central de Venezuela (UCV), en Caracas.

La solicitud oficial se hizo en 1997, con el impulso del alcalde Lenín Marcano y el Concejo Municipal, quien emitió un decreto de preservación de la emblemática Casa Guipuzcoana para convertirla en un museo internacional.

En ese año, igualmente, se logró que La Guaira fuese considerada en una lista indicativa para el objetivo patrimonial.

En 1992, el Fondo de Monumentos Mundiales incluyó al casco colonial litoralense en una lista de los 100 sitios de interés histórico que están en riesgo. De hecho, ello se profundizó luego del deslave de Vargas de diciembre de 1999.

De acuerdo con investigaciones históricas de la UCV, en el casco colonial de La Guaira existen 630 edificaciones, casas patrimoniales, fortificaciones, templos y casas mutuales.

Otra vez

“Es muy difícil que La Guaira sea patrimonio de la Humanidad si las autoridades no respetan las estructuras originales. Otra vez están metiendo tractores en casas coloniales abandonadas, como hicieron con las bóvedas y la muralla en la plaza Miranda”, dijo Arcadio Echandía, obrero que vive en la esquina de Pachano.

Echandía, de 65 años de edad, dudó que las maquinarias de la calle Bolívar estén para restaurar según los parámetros internacionales.

El 2 de diciembre de 2022, el presidente del Consejo Superior de Identidad, Patrimonio y Turismo de Vargas, Johnny Martínez, denunció en Crónica.Uno que las excavaciones correspondientes a la remodelación de la plaza Miranda obviaron los estándares arqueológicos que exige la Unesco.

En el sitio, se localizaron extractos de las bóvedas y el baluarte de la plataforma de la ciudad amurallada de La Guaira, los cuales fueron sepultados por la construcción de la avenida Carlos Soublette, a fines de los años treinta del siglo XX.

No creo que restauren nada en esas casas desocupadas. Ese es un verbo (restaurar) que quedó para antropólogos e historiadores, y a lo mejor para gente como yo que nos duele La Guaira”, agregó Echandía, quien durante 25 años fue estibador en el puerto marítimo de la capital del estado.

“Soñé con ver a La Guaira patrimonial, pero con esta gente que no sabe de excavaciones sino de negocios, eso es imposible”, puntualizó.

Camino hacia la zona empedrada de la calle El León, Iraida Ugueto observó el movimiento de las máquinas en las casas en ruinas y señaló: “Con qué orgullo hablan los colombianos de Cartagena como ‘la heroica’ y nosotros, penando. Aquí no tienen idea de que Gual y España abrieron cauce a la libertad y que José María Vargas fue el primer presidente civil de la República”.


Participa en la conversación