La falta de harina de trigo no sólo afecta a las grandes panaderías, los pequeños vendedores también se las ven negras por la ausencia de productos.
Gabriela Berroterán/@gabyestibalys
Caracas. Carmen Morillo se dedicaba a la venta de tortas a las afueras de su hogar en el centro de Caracas, allí vendía a sus vecinos, mototaxistas y trabajadores de la zona, pero desde hace un mes dejó el negocio, pues afirma que “conseguir los productos se volvió una tarea muy difícil”.
Morillo se dedicó por más de cinco años a la venta de tortas en la entrada de su edificio y con la ayuda de sus familiares hacía maromas para comprar los ingredientes y seguir la venta, sin embargo, en los últimos meses la escasez se acentúo y decidió dejarlo, porque los precios a los que conseguía la harina y otros ingredientes, la obligarían a aumentar el costo de la porción que para el momento se ubicaba en 50 bolívares, o de lo contrario registraría solo pérdidas en sus ingresos.
Quienes se dedican a la venta de dulces por encargo no sólo padecen la falta de harina para sus productos, también se les es difícil encontrar margarina, azúcar y cacao, que “a precio de bachaquero les puede salir un ojo de la cara”, apuntó Yohana Marra, periodista que vive en El Paraíso.
Harina de trigo, azúcar, margarina, huevos, leche condensada son productos que están ausentes en los supermercados y mercados municipales y aquellos que se rebuscan haciendo tortas o ponequicitos tienen que hacer cacerías de esos artículos y cuando los consiguen deben pagar altos precios, por lo cual los dulcitos se tienen que vender más caros
Elisa Ortiz, corredora de seguros, aprendió hacer tortas por internet y las comercializaba entre sus amigos y familiares, sin embargo, tuvo que dejar esa entrada extra, pues afirma que “no tengo tiempo para hacer colas” y se niega a comprar los materiales con los precios que tienen ahorita, pues asegura que “la gente no está dispuesta a pagar tanto por una torta”.
Las distorsiones de la economía están acabando con ese sustento. La semana pasada los trabajadores de la industria de la harina alertaron que la situación es crítica, debido a que cinco molinos están parados y tres están a punto de detenerse por la falta de trigo y empaques. Los problemas no solo se presentan con harina de trigo, la producción de los otros artículos que se emplean para fabricar los dulces también ha bajado por la ausencia de materia prima y los controles.
Foto: Cheché Díaz
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