Tres mujeres heridas por GNB en Vargas el 30A denunciaron a su agresora ante la AN

heridas por la GNB

Gioconda Hernández de 41 años, Albertina Andrade de 63 años, y Esmeralda Acosta de 61 años, responsabilizaron del ataque a la funcionaria de la GNB Francelis Carolina Serrano. Ellas tres y otras cuatro personas resultaron heridas de consideración ese 30 de abril en Maiquetía. Todos tienen secuelas y no tienen recursos para su recuperación.

Caracas. La comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional escuchó este miércoles el testimonio de tres mujeres, mayores de 40 años, que fueron atacadas por la Guardia Nacional Bolivariana, con perdigones, por expresar su respaldo a Juan Guaidó el pasado 30 de abril. Al momento de la agresión, que les causó secuelas de consideración, las tres mujeres y otras cuatro personas que también fueron heridas, estaban dentro de una clínica, resguardándose del aluvión de gases lacrimógenos lanzados por los militares.

La diputada Milagros Eulate (AD-Vargas) presentó el caso en la comisión. Expuso que ese día, la Guardia Nacional, bajo las órdenes del comandante del ZODI Vargas, almirante Gustavo Matamoros y del jefe de seguridad de la gobernación, Andrés Goncálvez, reprimió las manifestaciones en apoyo al llamado a la insurrección cívico-militar de Juan Guaidó.

Una de las protestas se registró en las cercanías de la plaza Los Maestros en Pariata. Ante la ola represiva, varios manifestantes corrieron a refugiarse en la Clínica Alfa, ubicada en la zona.

La GNB entró a la clínica y comenzó a disparar perdigones a las personas. Dejaron siete heridos. Tres de ellos están aquí hoy. Todos tienen secuelas de sus heridas. Solicito a la comisión citar al almirante Matamoros y al jefe de seguridad Goncalvez para que sean interpelados por estos hechos, dijo Eulate.

Las tres mujeres que acudieron a la comisión son Gioconda Hernández, de 41 años de edad, con una herida mal cicatrizada en el área axilar, junto al seno izquierdo; Albertina Andrade, de 63 años, quien recibió el impacto de los perdigones en la mandíbula y perdió la dentadura inferior, parte de la lengua y tuvo daños en la dentadura superior; y Esmeralda Acosta de 61 años, que fue herida en la mano izquierda, aún tiene perdigones incrustados y ha perdido la movilidad de la mano.

Goncálvez contó que en el hospital de la entidad no hay insumos para darle la atención requerida y que ella no cuenta con los recursos para comprar antibióticos ni cicatrizantes: “La funcionaria Francelis Carolina Serrano, bajo el mando de Richard Vargas, de la Guardia Nacional, entraron a la clínica y nos dispararon a todos. Hemos puesto la denuncia en todas las instancias. Hoy estamos aquí pidiendo que esto se investigue. Me he tratado yo misma con plantas medicinales porque no tengo ni para comprar las medicinas”.

Albertina Andrade rompió en llanto mientras explicaba su caso. Desde que fue herida no ha podido volver a comer alimentos sólidos, ha perdido peso y por estar por debajo de los 50 kilos y ser una persona de la tercera edad, los médicos le han dicho que el riesgo de una operación es muy alto: “Yo perdí mis dientes inferiores, no puedo masticar, tengo pedazos de dientes incrustados en la lengua y los dientes de arriba están todos flojos. No puedo comer. No tengo como pagar mi tratamiento”.

Política Interior AN
Gioconda Hernández responsabilizó directamente del ataque del 30 de abril a la funcionaria de la GNB Francelis Carolina Serrano. Foto: Maru Morales P.

La comisión acordó citar a Matamoros y a Goncálvez para una interpelación. Las expectativas de que acudan son inexistentes, pero la presidenta de la comisión, Dennis Fernández (AD) afirmó que esto servirá para nutrir el expediente.

“Para este caso abriremos un expediente especial que será remitido a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Además vamos a solicitar a las instancias correspondientes ayuda humanitaria, insumos y medicinas para estas tres valientes mujeres”, dijo Fernández.

La comisión también acogió un caso presentado por el diputado Williams Dávila (AD), quien denunció el asesinato de Wildemar Paredes Moreno (32 años), a manos de un funcionario de la PNB en un incidente ocurrido el 8 de junio en la cola de una estación de servicio para surtir gasolina, en el municipio Santos Marquina de Mérida.

Además, los diputados concedieron un derecho de palabra al oficial de la Armada en situación de retiro, Darwism Ernesto Muller Mania, quien denunció violación de sus derechos humanos y laborales por parte del Alto Mando de la FANB, tras sufrir un accidente laboral que le ocasionó pérdida parcial de la audición. El caso será remitido a la comisión de Defensa.


Participa en la conversación