Su autora es Nohelimar Belén Fernández Romero, docente con discapacidad auditiva y hermana del párroco de San Mateo, el padre Ángel Fernández, que develó y bendijo esta obra urbana elaborada con casi 50.000 tapas plásticas, en la que destacan las imágenes de la patrona de Aragua y del beato José Gregorio Hernández.
Maracay. En la calle Romero Sánchez cruce con calle Purino de San Mateo, a una cuadra de la plaza Bolívar del municipio Bolívar del estado Aragua, destaca un inmenso mural. Su particularidad es que fue elaborado con tapas plásticas.
La idea es de vieja data. El sacerdote Ángel Fernández quiso realizar el mural tiempo atrás. Pero no fue sino cuando llegó a San Mateo como párroco del municipio que se pudo cristalizar la obra, gracias a la participación de la feligresía.
“En el piso se dibujó el boceto muy grande y después íbamos colocando las tapas. Luego lo pegamos a la pared con cemento”, explica con mensajes de seña la autora de la obra, Nohelimar Belén Fernández Romero, una docente con discapacidad auditiva y hermana del párroco de San Mateo.
La obra artística mide 23 metros de largo por 4,30 metros de altura. Casi 84 metros cuadrados de área total cubierta, en la cual se utilizaron cuatro metros cúbicos de arena, 22 sacos de cemento y aproximadamente 49.390 tapas plásticas.
El propósito del mural era, en principio, celebrar la beatificación de José Gregorio Hernández, pero con el transcurrir de los días el espacio fue creciendo en altura y longitud con emblemas religiosos y culturales propios de San Mateo, y es conocido como “La Puerta del Ingenio Bolívar”.
Entre los símbolos plasmados en la obra se pueden apreciar la imagen de Jesús en la Misericordia, que muestra su corazón radiante y en oración, el Santo Rosario acompañado de la imagen de una paloma para representar la paz del mundo y la imagen de Nuestra Señora de Belén, patrona del estado Aragua.
A la figura del beato José Gregorio Hernández, se le incorporó la de un araguaney, un turpial y orquídeas, símbolos naturales de Venezuela, rodeados del tricolor nacional.
En otra área del mural, se muestra a Simón Bolívar con la custodia de la Virgen de Belén implorando la intervención de la virgen aquel 25 de marzo de 1814, cuando el Ingenio Bolívar ardía en llamas, y Antonio Ricaurte se inmoló por la causa libertaria.
Además, fueron incorporadas unas alas gigantes invitando a lugareños y visitantes a detenerse, tomarse una foto y siempre llevar a San Mateo en el corazón.
“Ella es una mujer muy creativa –cuenta orgulloso el padre Ángel Fernández de su hermana– y rápidamente captó la idea. Hizo el boceto que luego fue llevado a la pared para rellenarlo poco a poco con tapas plásticas que fuimos recolectando en la parroquia por varios meses”.
La obra fue develada el pasado 5 de junio, luego de la acostumbrada eucaristía que se realizó a las 7:00 a. m. en los espacios del Santuario de la Virgen de Nuestra Señora de Belén.
Esta es una obra que contó con la participación de nuestra feligresía y que tiene dos propósitos: celebrar nuestra fe, a nuestro beato y también incentivar el reciclaje”, explicó el sacerdote, visiblemente emocionado.
Las tapas plásticas utilizadas en el mural fueron recolectadas por varios meses, gracias al entusiasmo incluso de muchos niños y hasta de un preescolar ubicado en Cagua, a unos 11 kilómetros de San Mateo, que aportó una significativa cantidad de material plástico.
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