Una bióloga busca libros para las nuevas generaciones mientras protege la reserva de Caparo en Barinas

La investigadora Diana Duque emprendió una campaña de recolección de libros para crear bibliotecas. La meta es que la aprovechen los estudiantes que viven en esta zona protegida del estado llanero que no cuentan ni con televisión ni internet.

Barinas. Diana Duque es bióloga y se dedica a investigar sobre la fauna y flora de la Reserva Forestal de Caparo. Pero sus observaciones no se quedan solo en ecosistemas que deben ser cuidados, pues ha detectado un asunto muy desprotegido: la falta de libros para los niños que viven en esa zona del país.

Alrededor de 150 niños que estudian en el municipio Andrés Eloy Blanco, al suroeste del estado Barinas, no saben lo que es una biblioteca. Por eso Duque se puso manos a la obra para transformar esta realidad con la campaña de donación de libros que inició hace pocos días.

La bióloga conoce el cotidiano trajinar de los niños de la reserva y le preocupa el desempeño académico presente y futuro de estos estudiantes.

Foto cortesía @Lizduquesa

En el año 2014 se desarrolló una pequeña jornada de educación ambiental en por lo menos 12 escuelas, con la autorización del director de la zona y de las maestras. En esa ocasión se realizaron charlas con juegos educativos, recibieron material para dibujar. Simultáneamente, se les habló sobre el proyecto del Mono Araña.

Duque es la coordinadora de la investigación sobre este primate (Ateles hydridus) en vías de extinción, investiga también otras especies de fauna de la zona y la conservación de Caparo, el último bosque de los llanos occidentales de Venezuela.

La labor perdió continuidad debido a la falta de recursos, el combustible y lo intrincado del camino. Solo por poner un ejemplo, desde la Facultad de Ciencias Forestales, en Mérida, hasta la Estación Experimental Caparo, son 500 kilómetros de distancia, es decir, el mismo trayecto que hay de Barinas a Caracas.

Caparo, libros
Google Maps

Este 2023 una luz comenzó a asomarse, gracias al impulso recibido por parte del Zoológico Auckland de Nueva Zelanda para reanudar las actividades de educación ambiental.

Acercarse al saber

Para estos niños, el pueblo más próximo queda a varios kilómetros.

Es una comunidad alejada de los pueblos, están alejados para cualquier cosa, como ir al médico, comprar comida, comprar sus útiles escolares, etc.”, explica Duque.

La comunidad más cercana se ubica a una hora y media de camino, hasta la población de El Cantón, en el municipio Andrés Eloy Blanco. Alrededor de tres horas hasta Santa Bárbara en el municipio Ezequiel Zamora y cerca de tres horas hasta Guasdualito, en el estado Apure.

Algunos niños son trasladados por sus padres en motos hasta la escuela; otros van a pie. Pero los que viven al otro lado del río Caparo, deben atravesar en canoa y luego caminar dos kilómetros para llegar.

¿Cómo es la situación de estas escuelas?

Estas escuelitas están muy necesitadas, son bastante pequeñas. En un solo salón ven clases niños de varios grados. La maestra divide los salones en grupos, a veces cuentan con dos maestras.

Las docentes tienen dificultades para asistir. Antes de la pandemia había problemas, luego se agudizó la situación. Esos niños no veían clases desde la cuarentena. En 2022 se activó, nuevamente. Ellos reciben clases, lunes, martes y miércoles, por lo que su preparación para el bachillerato es muy débil.

Los días en que estaba más cerca de la Estación Experimental de la Universidad de Los Andes, hablaba con ellos. Solo hay un preescolar y cerca de la zona del campamento una escuelita un poco más grande donde se ubica el liceo.

¿Qué intenta con esta campaña de donación de libros?

Espero que podamos conseguir suficientes libros de lectura de cualquier tipo para niños en edad de primaria, libros escolares, material escolar, didáctico, deportivo.

Tal vez a la gente se le haga más fácil donar libros y se les pueda organizar o construir una biblioteca, es una zona bastante alejada del pueblo, no cuentan con internet, con televisor.

Quiero conversar con el alcalde o con el director para hacerla en la escuelita más grande o en algún salón anexo. Lo primero es reunir los libros. He visto que en otros países se ha logrado la adecuación de bibliotecas comunitarias.

Cómo ayudar

A través de sus redes sociales, @Lizduquesa ha abierto esta campaña de donación en varios puntos del país:

  • En Mérida: Panadería La Croacia, Avenida Las Américas
  • En Táchira: Fundación Bordes, San Cristóbal, Barrio Obrero
  • En Lara: Serpentario Parque Barararida, Barquisimeto
  • En Caracas: Casa La Solana, 2da avenida de Altamira (cerca de la entrada a Sabas Nieves)

Las personas interesadas en apoyar pueden comunicarse a través del teléfono 0412-7392857, Diana Duque, @proyecto_ateles

Lea también:

Mariela Mendoza creó Buscadores de Libros para fomentar la lectura y el encuentro en Guayana

Kent Acevedo enseña las “primeras lecciones” a estudiantes de El Winche en Filas de Mariche


Participa en la conversación