El domingo en la noche dos hombres y una mujer entraron al plantel a través de unos boquetes, y sometieron al vigilante a punta de pistolas. 1.065 niños están sin clases.
Mabel Sarmiento Garmendia/@mabelsarmiento
Caracas. 1.065 niños de primero a sexto grado de la escuela República de Venezuela, ubicada en la parroquia Coche, están sin recibir clases debido a un robo que se registró en el plantel el pasado domingo en horas de la noche.
Dos hombres y una mujer abrieron varios boquetes en las paredes y por allí se colaron a la biblioteca, y al centro de informática. Al vigilante de guardia lo sometieron a punta de pistolas en uno de los salones. “Lo estaban obligando a entregar las llaves de otras instalaciones”, contó Mercedes Silva, secretaria del turno de la mañana.
Del salón de informática se llevaron dos laptops madres y dos Canaimitas. Además cargaron con extensiones de cables, con micrófonos inalámbricos, con lámparas y con otros enseres de rutina. El robo ocurrió un poco antes de las 9:00 pm.
Cuando Silva hacía un recorrido por los patios y mostraba la cantidad de boquetes abiertos por los delincuentes, los obreros informaron que “cinco chamos pasaron por el frente del colegio con pistolas en mano”. Eran casi las 11:00 am. “Eso es así aquí, de hecho la GN cuando vino nos recomendó que no estuviéramos aquí pasadas las 5:00 pm. ¿Eso implicará recudir los turnos? Será. Pero aquí la gente tiene miedo”.
Eso mismo lo reseñó la subdirectora Alicia Aparicio, quien comentó que los vigilantes, tres en total, fueron a la Zona Educativa a poner los cargos a la orden pues no quieren trabajar en estas condiciones.
Según contó el vigilante los ladrones revisaron el salón de quinto grado en el primer piso y revolvieron todo. Del centro de informática (ubicado en planta) sacaron las computadoras y las que no se pudieron llevar las dañaron.
“Pareciera que no les dio tiempo. Esta no es la primera vez, aquí somos la sopita de los ladrones. En agosto pasado se metieron dos veces y luego en septiembre. Esa vez se llevaron el tanque de agua y nos dejaron sin luz, por eso no pudimos comenzar las clases a tiempo”, denunció la subdirectora Alicia Aparicio.
Aparicio además mostró su molestia porque, dos días después del robo, los funcionarios del Ministerio de Educación no se daban por enterados, aunque la directora Migdalis Solano hizo las diligencias pertinentes.
“La GNB vino el lunes caso a las 5:00 pm y el Cicpc todavía está levantando la investigación y tomando las huellas. Pero nos llama la atención que no venga la Zona Educativa, aquí nos sentimos desprotegidos y además se está afectando el derecho a la educación de 1.065 alumnos. Aquí están las maestras y los obreros con miedo. Temen que regresen los malandros. Y mientras estén las paredes rotas no podemos reiniciar las clases”, dijo.
Esta escuela, según dijo Mercedes Silva, es piloto en la parroquia, pero aun así la Fundación de Edificaciones y Dotaciones Educativas, Fede, no viene a hacerle un cariñito. “Le falta pintura, que le arreglen las filtraciones, que le coloquen más alumbrado público y que le retiren de las áreas verdes el materia que se desecha, pues de allí hasta salen culebras. Pedimos además que le hagan una pared perimetral más alta para evitar el ingreso de los indigentes a las instalaciones”.
Ahora con respecto al reinicio de las actividades, mencionó que si no reciben respuestas del Ministerio de Educación lo antes posible, le pedirán ayuda a la comunidad para conseguir cemento y así arreglar los destrozos.
Hampa visitó la Cuatricentenaria
Este fin de semana la escuela Cuatricentenaria, ubicada en la parroquia Caricuao, también fue desvalijada. Los maestros dicen que es la incursión número 12 del hampa. Esta vez se llevaron ocho Canaimitas, dos computadoras, conexiones centrales para internet, un equipo de sonido. Denunciaron que los ladrones tumbaron la puerta de la dirección y dejaron el sitio una botella de licor y colillas de cigarros. 1.500 estudiantes, por esta acción delictiva, están sin clases ahora.
Fotos: Angeliana Escalona
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